𝙋𝙀𝙍𝙁𝙀𝘾𝙏 | Max Verstappen

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━━ ¿Qué hacemos aquí, Max? ― pregunto la italiana, desconcertada de estar en una pista de aterrizaje ― Creí que querías pasar esta semana en Italia.

━━ Y lo quiero, pero, dijiste que siempre habías querido subirte a un helicóptero, no se si recuerdas.

━━ Lo recuerdo, fue ayer eso, Max.

━━ Entonces, moví mis influencias de campeón del mundo, y conseguí que nos lleven a dar un par de vueltas ― justo cuando terminaba de decir eso, el piloto que los llevaría se acerco a ambos rubios, preguntando si ya estaban listos, obteniendo una respuesta afirmativa por parte del holandés; el hombre se fue a preparar para despegar, dejándolos un rato solos ― Antes de que digas algo, esto es mi forma de pedirte disculpas por los problemas que pude haberte causado con tu padre, aparte de que ahora todo el mundo cree que eres mi novia.

Megara, lejos de enojarse, se burlo del hombre. Si era cierto que había tenido unos cuantos problemas con su padre por las noticias con Max, más, los fanáticos y prensa seguían sin saber quien era ella en realidad, así que, por el momento estaba tranquila, eso hasta que alguien supiera su nombre y descubrieran esa antigua relación que había tenido con cierto futbolista inglés.

━━ Bien, creo que estás perdonado ― le sonrío ella mientras dejaba un pequeño beso en su mejilla ― Aunque no estaba enojada, pero, aun así te agradezco por esto, es algo lindo de tu parte.

Max sonrío, como solo sonreía con ella y le tendió su mano esperando a que ella la tome, cosa que hizo sin dudar ― Vamos, debemos ir.

━━ Estoy muy emocionada ― dijo Megara apretando la mano de Max mientras ambos caminaban hacia el helicóptero que los aguardaba para despegar. Max solo sonreía, contento por la emoción que su amiga desbordaba.

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Max reía mientras Megara sostenía su mano con fuerza y cerraba los ojos. Si, ella estaba feliz y muy agradecida por lo que Max había hecho, pero eso no quitaba el hecho de que le tuviera miedo a aquella nueva experiencia.

━━ No te pasará nada, Meg, esto es muy seguro - intento tranquilizarla, más solo consiguió una pequeña risa burlona de parte de ella.

━━ Claro, tu dices eso porque estás acostumbrado, y luego estoy yo y los simples mortales los cuales nunca nos habíamos subido a uno de estos.

Las palabras de ella solo causaron que la risa de Max aumentará, por qué vamos, Megara no era "una simple mortal", ella era la hija de un famoso futbolista, hija bastarda y no reconocida ante el mundo, pero hija al final de cuentas, y una a la cual nunca le faltó nada económicamente hablando, ya que Paolo se dedicaba a mandarle grandes cantidades de dinero a la madre de Megara, y a día de hoy, Maldini seguía manteniendo a su única hija, pese a que ella tenía su propio trabajo en dónde ganaba bien para llevar su vida con pequeños lujos en Italia.

━━ Vamos, Meg, ambos sabemos que no entras en la categoría de simple mortal, y abre los ojos, te pierdes del paisaje.

Pese a su miedo, Megara abrió los ojos, primero centrando su vista en Max, quien le sonreía con sus ojos azules brillando, y eso le dió algo de confianza para fijarse en el paisaje.

━━ Esto es hermoso, Max... ― susurro la italiana, sus ojos azules brillando ante el hermoso paisaje que se mostraba frente a ella, una Italia, la bella ciudad de Monza pintada de colores naranjas por el atardecer, Megara quedó simplemente maravillada, y Max amo cada segundo de eso, porque sabía cuan difíciles habían sido los últimos días para ella, aunque ella lo negara.

Los últimos días para Megara se habían resumido en ansiedad por el miedo que le generaba que las personas se enteraran de quién era ella y supieran sobre su relación fallida con cierto futbolista, y la única razón por la que no se sabía sobre ello era porque Paolo Maldini había pagado una cantidad exorbitante de dinero a distintos medios de prensa para que no salieran noticias sobre ella y el futbolista, y eso nos llevaba a el otro gran problema de Megara, las constantes peleas que tenía con Paolo, su padre, como este la humillaba y menospreciaba, así que sabiendo todo eso, Max quiso sacarle un poco de la amargura tristeza que posiblemente sentía, tal como ella lo hacía con él cada que podía.

━━ Mi italiana favorita merece solo lo mejor ― fueron las únicas palabras de Max.

La amistad de ellos se basaba en el compañerismo, en entenderse y apoyarse, no se entrometian en la vida del otro, si querían contarse sus cosas se las contaban, pero si no, respetaban la decisión del otro; entendían los límites que cada uno imponía por su personalidad marcada, no intentaban cambiar a la otra persona o adaptarse al otro, solo coexistían, aprendieron a convivir y respetar los diferentes gustos y actitudes del otro, y eso solo en unas simples tres semanas, tal vez cuatro, y era por eso que Max consideraba que su amistad con Megara era la más real que había tenido en toda su vida, porque no necesito de años de conocerla para confiar en ella y darse cuenta de que no lo juzgaría o saldría corriendo a decirle a los medios cosas de la intimidad de él.

Megara sabía guardar secretos, sabía de la importancia de ellos, y si no ponían en riesgo a Max, ella no tenía el porque divulgarlos.

Max por su parte sabía comprenderla, entendía que la vida de Megara no había sido fácil, pese a que se creyera lo distinto, comprendía que el único verdadero apoyo que ella había tenido era su madre, y que al está morir, la dejo sin nadie que la amara verdaderamente, quedando al cuidado de un hombre que solo la aborreció desde que se enteró que ella estaba en camino de nacer. Max entendía el porque Megara no quería que se supiera sobre su anterior relación, ella se lo explico, y él entendió enseguida, no necesitaba más, él hombre la había tratado mal, la había humillado y no le había dado su lugar como su pareja, y lo más importante, la había lastimado, así que él lo entendía, y buscaría la forma de que su amistad con Megara no afectará a aquel secreto de ella.

Ambos, dejando de lado sus propios problemas, se centraron en el paisaje, con la cabeza de Megara recargada en el hombro de Max y él recargando su cabeza sobre la cabeza de ella.

Si, tal vez los demás pensaban que eran pareja, porque tal vez actuaban como una, pero preferían no pensar en eso y concentrarse únicamente en ellos, no en lo que los demás decían, y por eso su amistad era perfecta.

me tarde mil años en actualizar solo para
darles está mierda, pido disculpas y les
prometo que el próximo será mejor y más
largo.