Camila - Camren (+18)

♥︎.LVIX.♥︎ Primeiro Encontro.

LVIX - Primer Encuentro.

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Sanderland era una ciudad hermosa, Charlize corría de un lado a otro con
St. James sobre el césped verde y al fondo, la escultura llamada Angeles
del Norte, yacía en perfecta armonía con el ambiente al aire libre.

Diseñada por Antony Gormley, la estructura simulaba inmensas alas
abiertas de hierro de color óxido.

Ese fin de semana comenzó la tutela de Lauren, quien habitualmente sabía muy bien cómo lidiar con el temperamento dudoso de su hija, quien
en ese momento parecía inmensamente feliz y tranquila cuando vio aparecer nuevamente en el horizonte a Marcus Göretz, con dos
cucuruchos de helado y una gorra que ella misma robó al hacer que el hombre se inclinara para igualar las alturas de ambos y compartir la refrescante comida.

— ¿Cómo estás?. — preguntó Amanda, quien estaba sentada al lado de Lauren, en voz baja, concentrada en ver la adorable escena del hermano mayor con su sobrina.

— Bien. — respondió Lauren cómodamente. — ¿Y tú?

Amanda sonrió tontamente, acariciando su propio vientre.

— Bien tambien. — Los ojos azul grisáceo brillaron hacia su mejor amiga, suspirando apasionadamente. — Simón me acompañó a la primera ecografía, pero me gustaría mucho que me acompañaras a esta. — Invitó
amablemente.

La mujer de ojos verdes sonrió emocionada, avanzando hacia el torso
pálido y de cabello claro.

— ¡¿Es en serio?! — Ella exclamó. — Pero claro que lo haré, Amanda!. —Llenó de besos el rostro femenino. — Va a ser jodidamente increíble.

— ¡Estoy tan emocionada, Laur! No tienes idea de lo mucho que deseo
tener a este bebé en mis brazos, olerlo, ver el color de sus ojos y todo. —Lubricó sus labios. — Nunca imaginé que sería posible ser madre, especialmente a una edad tan temprana. Pero ahora se siente tan bien..

PLAY — Ghosts and Creatures by
Telekinesis

La forma en que Amanda Becker se emocionó al hablar de la maternidad
no dejó dudas de que eligieron el momento adecuado para ser padres,
eran jóvenes, es cierto, pero también estaban estabilizados en una relación cuyo amor y organización de sentimientos finalmente parecían
funcionar juntos, en una receta perfecta que sólo podía dar frutos
inmensos y hermosos.

Se podía sentir cómo la maternidad había aparecido en el momento exacto, lo habían estado planeando durante dos largos años y finalmente había ocurrido. Punto.

Todos amarían a ese pequeño niño y estaban ansiosos de que viniera pronto al mundo.

— Camila me invitó a cenar con ella esta noche. — Soltó sin pretensiones. — Hace unos días bailamos en el gimnasio del colegio y no me preguntes cómo. — Interrumpió antes de que Göretz abriera la boca, teniendo en cuenta su expresión de confusión y perplejidad. — Creo que finalmnente encontramos el ritmo y todo parece ir bien ahora, me sentí bien al aceptar la cena y será como una cita, — Ella confesó, — Cómo.. Si pudiéramos encontrarnos de nuevo.

— Eso es... guau. -tartamudeó Amanda sorprendida, pero genuinamente
feliz por ese gran paso, — Pensé en comentar lo rápido que estaban
dejando fluir las cosas, me parecía curioso mandar un mensaje y que
siempre respondieras que estabas fuera de casa. Pero no lo sé, cada uno tiene su propia velocidad. — Se encogió de hombros, sonriendo. — Me alegra que hayas encontrado el ritmo perfecto para poder solucionarlo.

Ritmo perfecto... Magia...

Lauren se quedó en silencio, era imposible no saborear los recuerdos de
cuando se sentaba en las arenas de las afueras del condado de Tyne And
Wear, con paisajes grises y conversaciones profundas sobre pasiones inalcanzables.