♥︎.XLIII.♥︎

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Al día siguiente lo primero que hice fue coger la sábana y la manta y
rápidamente tirarlas en mi bolso.

Era de mañana, era temprano y todos
dormían. Camila y yo fuimos al baño, nos cepillamos los dientes, nos dimos una ducha caliente y relajante y la dejé sola para que siguiera lavándose el cabello sin preocupaciones.

Nuestra noche llena de sexo y libertinaje jugó en mi mente como una película erótico-romántica de alta
producción , yo estaba simplemente extasiada, enamorada y con el mejor
sentimiento inminente en mi ser.

"Te amo"

"Te amo"

"Te amo"

Yo también te amo Camila. Mucho.

Finalmente no pasó mucho tiempo para que todos se despertaran poco a poco y tomamos un café juntos en la cocina.

Noah se había ido ayer y ni siguiera, pude verlo irse, según el rumor él parecía molesto y ella no parecía conmovida por su malestar, ella me miró discretamente con sus ojos marrones todo el tiempo, se ofreció a hacer mi cereal y lo disfrazó y luego dijo que si todos no querían que ella también lo hiciera. El trato diferente no pareció levantar sospechas, aparte de Madison y Allyson quienes nos observaron a las dos con miradas traviesas y dudosas.

Necesitaba agradecerles más tarde por molestarme esa tarde y dejarme sola en la cocina.

Comí en silencio y ella también devoró tranquilamente su cereal, mientras
acariciaba mi brazo, y, como dije antes, a nadie parecia importarle mucho,
Camila era "cien por ciento heterosexual" y yo era mujer, no había malicia en el asunto.. de sus ojos.

Pero en el nuestro, lo sabía, ella me estaba prestando atención , resaltando vínculos y reforzando conexiones
después... Tuvimos sexo en las primeras horas de la mañana.

Me gustó y lo quise de nuevo, aunque fuera un poco..

Doloroso, por así decirlo.

Sus uñas en mi brazo eran un sueño, sus suaves dedos acariciándome, tan
dulces, que me negué a pensar que existiera una mala versión como la que
presencié horas antes, con esos ojos devorándome viva, su acción al lucirse ante mí... yo mientras levantaba su rostro y me dejaba ver cómo se movía su garganta, mostrando que se había tragado.. todo. No lo podía creer, mi distracción ante los recuerdos fue tan grande que se me cayó mi vaso de jugo, levantándome rápidamente y robándome la atención de todos.

- Lauren torpe Jáuregui, ya lo sabemos. - Bromeó Ally en voz baja,
haciendo reír a todos en la mesa y a mí también, rascándome la nuca.

- Yo ya vuelvo. - anuncié, mientras subía a uno de los tantos baños
perdidos en aquella mansión.

Con el agua corriente del lavabo me lavé las manos y me quité el ligero
almíbar de mis brazos, por suerte no mojó mucho los jeans que llevaba,
unas cuantas salpicaduras tontas y nada más.

-¿Quieres ayuda?- La voz de Camila con el celular saliendo de su oído llamó mi atención a través del espejo, mientras la veía detenerse a mi lado y dejar un beso en mi mejilla.

Volvimos a abrazarnos intensamente y aproveché para besarla también en
la mejilla, tan dulce como había sido desde que despertamos.

- No fue nada, una tontería. -Respondí torpemente, sintiendo sus lentos labios en mi cuello.

-¿Esta todo bien?- Susurró dulcemente y yo acepté con calma, intentando seguir su consejo y no pensar en teorías conspirativas. Acaricié su cabello y aspiré el perfume, era tan dorado, tan correcto. Hasta que sentí su mano bajar por mi vientre, acariciándolo.

Camila - Camren (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora