Capítulo 8

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Capítulo 8:
Enredos en el paraíso

Luego de aquella llamativa escena, el dúo se dirigió nuevamente al lugar en donde estaban situadas Gisselle y Francis, quienes estaban admirando y hablando de lo cómodo que se veía aquél hermoso jacuzzi.

—Hasta que los encontramos. ¿Se puede saber en dónde estaban ustedes dos?—Espetó curiosa Francis inmediatamente al ver a los muchachos acercase hacia ellas.

—Nada interesante, solo observando algunas cosas interesantes del lugar. No es para tanto—Defendió Samuel nada más encogiéndose de hombros—Y claro, explicándole a este ñoño como comportarse para que no nos haga pasar pena.

—¡Malnacido!—Replicó logrando golpear al ojiazul y provocar algunas risas en todos los presentes.

Y esta era la típica escena de siempre de los dos. Sam lo molestaba y a cambio, Miles lograba golpearlo en donde podía y hacer reír a las chicas con sus acciones. Podían hacer eso las veces que era necesario y no enojarse. La confianza que se tenían era tan grande como es la que define a los mejores amigos de muchos años. Había límites, pero ambos estaban conscientes que sus juegos solo lo entendían ellos sin llegar a molestarse con el otro.

—¿Qué hacemos ahora?—Soltó curiosa Gisselle de manera sorpresiva.

—Lo ideal sería que subiéramos a las habitaciones y nos cambiemos para empezar a disfrutar del día. El tiempo que tenemos es muy limitado—Estableció Miles mirándolos a todos.

—El nene tiene razón, aunque no te acostumbres a que te la dé siempre—Manifestó de manera jocosa hacia su amigo.

—Ya es la segunda vez consecutiva que me la das en el día—Sonrió mirando con burla hacia el ojiazul.

—Cómo sea, es mejor subir a las habitaciones y luego veremos que hacer más adelante.

Las chicas asintieron a las indicaciones de Sam y procedieron a caminar de vuelta al lobby del hotel. Al entrar, se percataron que en una de las mesillas, se encontraban Ethan y Allison sentados observando sus celulares. Ethan cargaba un rashguard oscuro con mangas largas de color azul oscuro y unos shorts grises Nike, mientras que Allison usaba unos shorts cortos de blue jeans de color blanco y arriba una parte de su traje de baño de color verde.

—Oigan chicos, ¿dónde están los demás?—Cuestionó Francis apenas llegando a la mesa.

—Justin está arriba en el cuarto con Phillip cambiándose para ir a la piscina. Dijeron que querían nadar y subieron como bólidos hacia la habitación. En cuanto a Lucas y su amiga no tenemos idea en donde podrían estar—Confesó Allison negando levemente con la cabeza.

—¿Aún no han vuelto?—Cuestionó extrañada Gisselle.

—Todavía no. No sabemos nada desde que se fueron a recorrer el hotel hace unos 20 minutos. Incluso, creímos que estaban allí afuera con ustedes, ¿cierto amor?—Cuestionó Ethan recibiendo un asentamiento por parte de Allison alzando ambas cejas.

—Sí como no. Como si esa chica y yo pudiéramos estar cerca uno del otro como si nada—Chistó Sam de manera sarcástica.

—Bueno solo fue algo que mi novia y yo creímos hombre. Tampoco es para tanto tío.

Las puertas del ascensor se abrieron sonando aquel sonido de campanilla que avisaba cuando el ascensor llegaba al piso indicado, dejando ver como la presencia de Justin y compañía salían con unos lentes oscuros y una sonrisa de oreja a oreja.

—¡Que hay colegas! ¿Están listos para ir a nadar un rato?

—Estaremos esperándolos allá—Informó Ethan levantándose de su asiento obteniendo un "sí" de parte de Francis.

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