Había sido un almuerzo bastante productivo para mí, toda la hora me había servido para conocer mejor a los amigos de Rodrigo, al menos ahora tenía más claro su nivel de humor.. era como si los tres compartieran la misma neurona pero Rodrigo seguía siendo el más infantil
—¿Te divertiste?.— cuestionó Rodri, él me estaba acompañando de regreso al hospital, sus dos amigos se habían marchado después de comer —Creo que todo salió re bien.—
—No creí que comerían tanto, casi me dejan en la quiebra.— me quejé y escuché como rio —Al menos ahora sé que tienes amigos muy divertidos.—
—Pues obvio, ni siquiera puedo imaginarme siendo amigo de un pibe aburrido.— dijo y suspiró
Seguimos caminando al hospital pero ahora estuvimos en silencio durante un rato, extrañamente las calles parecían silenciosas aunque había mucha gente a nuestro al rededor, no lo entendía pero pareciera que incluso el tiempo se detenía mientras pasábamos
—Ya que conocí a tus amigos y que tenemos una reunión la próxima semana...— llamé su atención —¿Qué te parece si empezamos a planear cuando podemos terminar toda esta farsa de tener una relación?.—
—¿Farsa?.— preguntó levantando una ceja —¿Vos pensás que esto es una farsa?.—
Lo miré sin entender, habíamos quedado que simplemente fingiríamos una relación mas cercana frente a sus amigos para que él intentara impresionarlos pero después de conocerlos simplemente quería tener la oportunidad de también ser su amiga sin ser "la chica que sale con Rodrigo", quizás era algo avaricioso pensar en ser amiga de esos tres chicos pero quería tener la oportunidad de tener una amistad sincera y no una a base de mentiras
—Sabes a lo que me refiero.— murmuré —Si me dejas quiero formar parte de su grupo o al menos intentarlo.—
—Puedes serlo sin la necesidad de decir que lo que tenemos es una farsa.— dijo en un tono algo burlón
—Pero no quiero ser solo "la cuñada".— dije —Lamento si suena como si te quisiera quitar a tus amigos o algo por el estilo pero desde que llegué a Argentina no me había dejado de sentir sola, durante la comida ese sentimiento desapareció y fue increíble.—
—No sabes cuantas personas pagarían por poder pedir lo mismo que vos me estás pidiendo.— empezó a reír y le di un ligero golpe en el brazo —Les dije que solo eras una amiga con la que estaba intentando algo, puedo compartirte a mis amigos pero vos debés prometerme algo.—
—¿Qué quieres?.— cuestioné intrigada
—No me dejes boluda.— pidió y reí —No te burles, ya me encariñé con vos.—
—No llevamos tanto tiempo siendo amigos.— recordé
—Yo me encariño rápido, no me juzgues.— se cruzó de brazos —¿Lo aceptás o no?.—
Fingí pensarlo un poco pero finalmente asentí accediendo a no dejarlo, después de todo me importaba demasiado conservar su amistad
—Pero cuando tengamos la oportunidad aclaramos que no hay nada entre nosotros.— pedí
—Lo principal era hacer creer que yo podía conseguir que una mina como vos se fijara al menos un poco en mí.— recordó haciendo un corto puchero —Hagamos que se lo crean un rato, ya después vemos como podemos aclararlo.—
Asentí un tanto dudosa, mi intercambio duraba unos cuantos meses, aún con toda la presión del hospital esto podía ser la pisca de emoción que esperaba para al menos tener una anécdota memorable que contar en mi vejez
Cuando por fin llegamos a la entrada del hospital simplemente nos detuvimos
—¿Nos vemos hasta la próxima semana?.— pregunté y él asintió
—Estaré contando cada minuto para volverte a ver.— exclamó
Ambos nos miramos unos segundos y después empezamos a reír, sin duda había dicho una de las tonterías más cursis que existían.
—Cuida no volverte a caer.— pedí después de reír —No quiero volverte a ver por aquí solo porque la sangre de tu nariz no para.—
—Mi vida se resume en caerme.— contó entre risas —Mientras laburas buscaré mis mejores clips para mandártelos y que los veas cuando llegues a tu casa.—
—Está bien.— sonreí sintiéndome extrañamente feliz, incluso emocionada por ver lo que me mandaría —Ya debo entrar, mi paciente debe estar esperándome.—
—¿Ya tenés paciente fijo?.— cuestionó emocionado por mí así que simplemente asentí con una gran sonrisa
Para muchas enfermeras era un logro tener un paciente fijo, eso significaba que tenían menos carga de trabajo o que tenían el suficiente conocimiento para encargarse de cierto tipo de pacientes, sabía que si yo tenía paciente fijo era porque las demás querían librarse de aquel viejito amargado pero aún así me sentía contenta de tenerlo
—Algún día te lo presentaré, es mi abuelito.— conté y él pareció no entender porque decía que era mi abuelo —Me voy, chau.—
Me despedí con un movimiento de manos, él me imitó y simplemente después de eso entré al hospital para dirigirme a la habitación de mi paciente, al menos podría entretenerlo contándole sobre los chicos que conocí hoy... y sobre lo lindo que sentía que era Rodri
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𝐓𝐈𝐏𝐎 𝐂𝐎𝐍 𝐒𝐔𝐄𝐑𝐓𝐄 [Carreraaa X Tú] ✓
Фанфик𝐓𝐂𝐒|| Dónde ______, una enfermera de intercambio en Argentina conoce a Rodrigo Carrera, un streamer que por culpa de su mala suerte siempre termina en el hospital. Inicio: O8-12-23 🩺 Final: 23-O4-24 👗