Gays separados

gogogo

Y ahí estaba. No recuerdo cómo llegamos aquí, solo se que ahora mismo, nos estamos besando apasionadamente. Mis manos recorriendo su piel por debajo de su ropa, y las suyas acariciando mi cabello. Nuestras lenguas bailaban entre si y entonces, comencé a quitarle lentamente su camisa, el no se quejo ni nada, en cambio, me ayudó a hacerlo. Poco a poco nos despojamos de nuestra ropa, yo ligeramente besaba todo su cuerpo, sobre todo sus botoncitos rosas, eran lindos. Amaba todo de el y el todo de mi... Comencé a quitarle su boxer de a poco, el no se quejo solo se quedó acostado boca arriba jadeando un poco

Solamente comencé a darle un par de besitos más en su cuerpo y lo mire un poco, acerque un poco mis dedos a su boca y...

"Puedo entrar...? No quiero hacer nada sin tu consentimiento" Dije, y era verdad, el seguía siendo un ser humano y tenía voz

"Cállate, Omar, solo hazlo..." El dijo, me encogí de hombros y solamente para prepararlo y que no duela tanto, metí uno de mis dedos en su entrada

El soltó un ligero gemido y dejo sus manos a los costados de su cabeza, queriendo más. Moví el dedo en círculos, luego, al meter el segundo comencé a simular unas tijeras para que sea más fácil... Escuché como soltaba pequeños gemidos ahogados, no era muy ruidoso y me gustaba. Después de un pequeño rato, metí el tercero, está vez simulando estocadas y los gemidos del otro aumentaron ligeramente, jadeos y pequeños gemidos lograba escuchar, es como musica para mis oídos...

Hice ese movimiento por unos pequeños minutos, veía como Carlos estaba muy desesperado por que entrara y dejará de jugar... No lo puedo evitar, saque mis dedos y entre en el sin previo aviso. Escuché un gemido algo alto de su parte, lo mire y el a mi... Se veía tan lindo. Comencé a dar estocadas leves y suaves, no iba a romperlo tan rápido...

Así estuve por un pequeño rato hasta que poco a poco aumente el ritmo y deje de ser tan suave. Carlos estaba intentando ahogar sus gemidos y agarraba las sábanas con fuerza, yo suavemente tome una de sus manos y seguí dándole...

Esto de siente tan hermoso, cálido... Y tan lindo, es como un sueño echo realidad, ahora estamos juntos, estoy dentro suyo y el está gimiendo mi nombre, es simplemente hermoso... Quiero más, quiero mucho más, quiero hacerlo llorar de placer, hacerle saber que es solo mío pero... Eso luego, ahora seré un poco suave, lo romperé pero no tanto, no lo dejaré en silla de ruedas... Por ahora