Se escuchó el fuerte grito de parte de los gemelos, con más tono el del mayor, sintiendo impotencia y curiosidad, viendo como su prometida luego de la disparatada discusión de hace semanas se veía diferente, cortante y ayer luego de decir esas palabras tanto como a su hermano y a el que un tanto le afectaron, ya que se notaba que lo decía con una muy notoria razón que al parecer, el no notaba.
O si lo notaba o sabía y se hacía el tonto para no imaginarse tan dolorosa escena.
Mientras que el veía a Rose con una cara totalmente tranquila, el sabía que a ella que le era satisfactorio ver las caras frustradas de los dos.
- Pues si, tenemos pensado renunciar para seguir con nuestra carrera de modelo y tener más tiempo para Lana.
Dijo Sophia, a Tom no le caía muy bien Sophia, ya que ella desde que llegó, no se alejaba de Rose y el sentía que ella tenía la culpa.
- Te das cuenta que estás renunciando a la mejor banda del momento?- Soltó Bill ofendido y algo enojado, Rose, rodo los ojos dando a entender que no le importaba nada.
- Tal vez, pero mi carrera me modelaje factura más que está banda que volverá hasta el año que viene.
Tom se quedó viéndola sorprendido, negándose a sí mismo que las palabras que resonaban en su cabeza eran de ella. Sus preguntas eran lo que carcomian cada pedazo de su cerebro.
Y sin ellos darse cuenta los cuatro subieron sin darle mucha importancia al asunto.
Narra Rose:
Tal vez me mostré dura, pero si me sentí un poco mal cuando vi sus caras, pero yo no me siento bien.
Mientras le ponía la pijama a Lana, ella me dio una cálida sonrisita con la cual morí de una ternura increíble.
Tanta que le tome una foto.
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Sonreí nostálgica, recordando cuando mi madre cuando yo tenía unos cuatro o cinco años me mostrandome fotos mías cuando era una bebé.
Escuche toques en la puerta y la abrí.
- Podemos hablar?- Dijo Tom, aunque yo no quisiera, tenía que hacerlo.
Salí y cerré la puerta, cuando estaba por cruzar los brazos el trato de agarrar mis manos.
- No...
- Pero qué te pasa, ah!? Eres mi jodida mujer, maldita sea!- Vi como el levanto el brazo, oh mierda.
Lo empuje y le Di un puñetazo.- Nunca en mi jodida vida me levantaron la mano, procura no volver hacerlo, me escuchaste basura!?
El se paró del piso y la miro con desprecio.
Ella entró corriendo a la habitación ya con lágrimas y con tan sólo cerrar la puerta estaba en los brazos de su mejor amiga.
