Una chica despertaba desorientada y con una gran dolor en su cuerpo, enfrente de ella había un árbol pero era de todo menos común, se levanto y tocó la corteza del árbol.
- ¿Que es esto? -miro que al tocarlo ligeramente emergió una pequeña luz dorada.
Asombrada de aquella belleza siguió tocandolo y dando vueltas a su alrededor, la luz seguía su mano.
Se reía al ver aquella belleza pero se detuvo cuando escucho la voz de una mujer detrás.
- Por fin despiertas, hija mía - se acercó a ella para acariciarla de su mejilla en cuanto la chica se giro.
Al mirarse a los ojos entre si, ambas sentían una fuerte conexión, aunque una no conociera a la otra, la mujer de cabellos dorados y castaños le conocía muy bien a la ojiverde.
- ¿Quién eres? -pregunto con curiosidad sin quitarle la mirada de encima.
- Soy tu madre, por favor ven conmigo- le extendió la mano y fue tomada por la rubia sin chistar.
La chica caminaba en una césped suave descalza, se alejaban un poco del hermoso árbol, había arroyos, mariposas, era como un sueño.
Pero no todos los sueños son reales a excepción de este, estaba muy confundida aunque no sintiera miedo o peligro, no podía explicar lo que veía, lo que sentía.
Ni siquiera podía recordar como había llegado a ese lugar y el por qué estaba ahí.
- Se que tienes dudas, pero con el tiempo te contestaré- acaricio los largos cabellos de la chica.
Miraba con sorpresa que con cada caricia de aquella mujer en sus cabellos este brillaba intensamente.
- Tranquila, antes que nada necesito que me ayudes a traer a unas personas -
Rapunzel recordaba con cariño ese día, ya había perdido la cuenta desde que había despertado en ese espacio lleno de naturaleza diversa y hermosa.
Sentada en la arena con los pies descubiertos dentro del agua de un hermoso mar, estaba pensativa pues sabía muy en el fondo que sus compañeros, sus amigos empezaban a sentir más curiosidad sobre si mismos.
Suspiro tranquilamente y se levantó para caminar un poco sobre la costa hasta que su mejor amiga se acercaba a ella tocándola del hombro.
- Oye, ¿Estás bien?-preocupada.
Rapunzel la miro con una mirada triste llena de angustia.
- Elsa e Hiccup empiezan a tener deja vus'- se tomó el cabello para acariciarlo nerviosa.
Moana cambio de expresión recordado lo difícil que fue para ella aceptar su destino y nueva vida.
- Escucha, algún día lo van a saber, por ti y por ellos mismos-la agitó de los hombros.
Rapunzel la miro a los ojos intranquila.
- No es lo mismo, tu antes de ser elegida por mi madre decidiste proteger siempre-se tensaba.
Ella suspiro ligeramente.
- Lo sé, pero también sabes que ellos también protegieron y se sacrificaron por un bien mayor-se detuvo un momento.
- Aunque, ¿Tu naciste siendo esto?-la miro curioso, no sabía mucho sobre Rapunzel.
Solo conocía su poder, su persona y su herencia pero jamás supo si alguna vez ella también tuvo una vida pasada alguna vez.
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𝑀𝑒𝑚𝑜𝑟𝑖𝑎𝑠 ¿𝐸𝑠𝑐𝑜𝑔𝑖𝑑𝑜𝑠 𝑜 𝑀𝑎𝑙𝑑𝑖𝑡𝑜𝑠?-𝐸𝑛 𝑃𝑟𝑜𝑐𝑒𝑠𝑜
Fiksi Penggemar¿Alguna vez te has preguntado cómo los guardianes fueron elegidos?, si te dijera que son más que unos "espíritus" que observan el equilibrio, que un día fueron personas como los demás, con vidas, familias y amores. Su "deber" es primordial pero, ¿Q...