╰─►✩ 𝐈𝐍𝐒𝐎𝐌𝐍𝐈𝐀

04

Podía sentir su cabeza palpitando de dolor, era constante y definitivamente no se la estaba pasando bien.

Nuevamente unas náuseas se apoderaron de el y corrió hacia el baño, expulsó todo lo consumido de la mañana y el almuerzo que no fue hace mucho. Ya podía sentir ese horrible ardor en su garganta y las arcadas venir por venir, vomitó, no iba a hacer esfuerzo.

Bajó la cadena, como muestra de haber terminado, fue hasta el lava-manos y se limpió la boca junto a sus manos, tomó su cepillo dental para cepillarse y quitarse ese mal sabor de boca. Algo debió haberle caído mal, sabrá a que se debe.
El azabache lo estaba esperando afuera, totalmente preocupado, se suponía que estaban viendo una película y él había preparado palomitas de maíz acarameladas y otra saladas para su amigo, a sabiendas que no es un fanático del azúcar.

Quizás lo que causó aquello fueron las palomitas azucaradas.

Eso tiene mucho sentido, púes Zoro no es alguien que le guste mucho el azúcar, tal vez aquello se revolvió con las saladas y el almuerzo, probablemente fue eso.

❝¿Zoro ya se siente bien?❞

El nombrado solo se sentó a su lado y depositó su cabeza en el hombro de Luffy, hizo un sonido parecido a una afirmación.

No tenía muchas ganas de hablar, aún podía sentir el malestar en su estómago y su cabeza palpitando, en cualquier momento tendría arcadas nuevamente.
Luffy llevó uno de sus brazos hacia la espalda de su amigo, queriendo consolarlo.

Luego miró ambos tazones de palomitas ya vacíos por lo que decidió llevárselos a la cocina, no quería hormigas encima de su cama, aunque no habían derramado nada conocía a esas cabronas, por lo que quería evitar.

Antes de salir observó como Zoro solo se recostaba mientras se abrazaba el estómago con una ligera mueca de dolor. Salió de la habitación, conciderando en llevarlo a un hospital pero eso era mucho ¿no?

Solo era un dolor de estómago y de cabeza ¿verdad?
Nada del otro mundo.

Pasó por la sala para después la cocina y depositar los tazones, en ello escuchó como uno de sus hermanos resoplaba con molestia y eso provocó que frunsa su ceño, molesto también pero no por la misma razón.

❝¿Por que el está aquí todavía? ¿No se supone que solo pasaría el fin de semana? Ya es martes y sigue aquí❞

❝¡Zoro se queda hasta cuando se le cante la gana, Ace!❞

Luffy se fue, dejando a su hermano con la palabra en la boca, realmente nunca entenderá esa molestia que le tiene a Zoro.

Al entrar en la habitación no vio a Zoro pero si la puerta del baño abierta, lo esperó pacientemente.

El peli-verde apareció de nuevo con una mueca que no supo interpretar pero que no le gustaba para nada. Le abrió los brazos a su amigo, quien se sentó en su regazo y rodeo su cintura con sus piernas, apoyó la cabeza en su pecho junto a sus manos.

❝Podría llevar a Zoro al hospital, no te sientes ni te ves bien❞

Lo sintió negar, era obvio que se negaría, no supo ni por que le preguntó ya sabiendo la respuesta.

Luffy se acostó en la cama aún con Zoro encima, le proporcionaba caricias en su espalda de manera lenta, tratando de calmarlo.

Se dio cuenta que la televisión estaba apagada y supuso que el audio de la TV ya le molestaba.

Todo estaba bien hasta que escuchó unos sollozos, se sentó en la cama y separó levemente a Zoro, lo vio tratando de contener las lágrimas lo mejor que podía.

❝L-luffy...¿Podrias compararme algunas pastillas para el dolor de cabeza?❞

Originalmente no iba a pedirle ese favor, quería aguantar pero no pudo, el dolor lo estaba matando y su estómago no paraba de dolerle, aunque, esta vez no era tan fuerte por ende, era tolerable, pero molesto.

Vio al azabache asentir rápidamente por lo cual, salió de la cama.

Quería que esa tarde nunca terminara, no quería volver mañana a la escuela.

Perfectamente si ese era el caso, podía faltar con la escusa de que estaba enfermo. El dolor estomacal paró y de eso estuvo agradecido pero el dolor de cabeza no se fue.

Al escuchar como la puerta se abría lentamente, se sentó por puro instinto, al mirar en dirección a la puerta lo vio entrar con un vaso de agua y una pequeña bolsista en donde está el medicamento.

Le sonrió lo mejor que pudo y tomó el pequeño paquete para tomarse una pastilla que fue acompañada por el vaso de agua que le trajo el azabache.
Luffy le recomendó descansar, de todas formas estaría a su lado.

El monito se acostó, provocando que el peli-verde se pegue a el.

Tal cercanía provocó que su corazón diera un pequeño vuelco, miró el rostro de su acompañante y tenía una suave mueca de dolor todavía, al principio dudó pero besó su frente junto a sus mejillas y por último nariz, haciendo que Zoro soltará una pequeña risa y su semblante se relajara para poder dormir.

No sabía por que su..amigo..se había sentido mal de un momento a otro pero lo cuidaría, tal como él lo hacía cuando se enfermaba.