Diversas historias de Daryl Dixon x Reader, situadas en diferentes temporadas de TWD. Pueden mandarme mensaje privado si tienen alguna idea sobre uno en específico y con gusto lo escribiré.
Espero sean de su total agrado, si tienen alguna sugerenci...
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El caminante se acercó velozmente hacia mí y me asustó al verlo tan cerca. Me aventó hacia el suelo y hacía lo que podía para evitar que sus podridos dientes se acercaran a su rostro. De pronto el caminante dejó de intentar morderla debido a que una fecha le atravesó la cabeza. Esa flecha casi le atravesaba también la cara, sólo unos centímetros de diferencia. Me levanté alejando bruscamente al caminante que ya estaba muerto y miré a Daryl furiosa.
— ¡Hey! Casi me matas. -le exclamé con enojo.
—De nada. -murmuró Daryl y esto hizo que me enojara aún más.
Caminamos juntos en silencio, me sentía tan enojada con Daryl por su actitud. Desde hace días, no, más bien semanas, ha estado actuando muy extraño conmigo. Aquello me hacía sentir mal, yo creí que estábamos logrando ser muy buenos amigo y, para mi esperanza, algo más. Sin embargo, todo eso se había ido a la mierda cuando Daryl estaba comportándose indiferente conmigo. Sentí como se había alejado, ya que una mañana me acerqué con él a desayunar y se alejó sin decir nada. Otra tarde, fui con él a fumar un cigarro y lo apagó para después irse. Esta situación estaba siendo un constante sufrimiento. Ahorita estaban juntos debido a que Rick nos había pedido ir, éramos los que estábamos en mejor condición en este momento, así que era nuestro trabajo llevar lo que habíamos recolectado.
—Daryl... ya estoy cansada de esto. -hablé mientras me detuve. Daryl se giró hacia atrás y me miró con el ceño fruncido. —Estoy cansada de que me ignores, de que estés así conmigo... no sé que mierda te hice para que estés así, yo...
—No has hecho nada. -dijo mientras miraba al suelo.
—Entonces dime que pasa, ya no puedo con esto. -me acerqué hacia él bruscamente, pero él no se movió ni un centímetro. Su mirada estaba fijamente en mí. —Daryl... cada día es difícil, no sabemos que pasará y no quiero morir sin que sepas que... me importas... y mucho. Maldita sea, te amo tanto que no puedo aguantar más.
Estas palabras retumbaron en Daryl como nunca. Pude ver como tambaleó ligeramente y me acerqué hacia él. Daryl no dejaba de mirar mis ojos, no sabía si estaba realmente escuchándome, parecía estar sorprendido.
—Perdón por decírtelo así, pero...
No pude terminar mi frase, ya que sus labios chocaron con los míos. Un contacto brusco, con esto pude saber con exactitud que Daryl jamás había besado en su vida. Este beso fue tan dulcemente torpe, podía sentir la necesidad que emanaba de su ser interior. Después de unos segundos, Daryl se separó de mí y me miró expectante.
—Lo siento... -susurró con timidez. -No soy bueno en estas cosas.
Sonreí y lo jalé hacia mí una vez más para disfrutar de sus labios, por lo que tal vez sería algo que haríamos diariamente y aquello me emocionaba aun más.
