CAPITULO 4.

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-¡¿Que yo que?!- grito Heidi levantándose de la silla.

-¿Volverás al instituto?- respondí algo temerosa.

-¡¿Quieres llevarme nuevamente al infierno, Austin?!... ¡¡Eso quieres?!- mierda. Ayudame diosito. Heidi estaba a centímetros de ahorcarme.

-Solo es un año, después de eso tendremos 100 mil dólares a nuestra disposición.

Como a mi, la mandibula de Heidi casi toca el suelo.

-¿100 mil dólares?... Joder Charlotte, con esa suma solo tendremos que trabajar medio tiempo hasta graduarnos- dijo emocionada.

-Solo ven conmigo, Heidi. No podría sobrevivir sin ti- rogue haciendo un puchero.

-Solo si dices: "Heidi tu fuiste quien me hizo dudar sobre mi heterosexualidad."

Le muestre mi dedo del medio mientras rodaba los ojos. Heidi sabe perfectamente por que me gustan las chicas, pero a mi querida amiga le encanta recordarse a si misma que muchas chicas están dudando en estos momentos gracias a ella. Modestia aparte.

-"Heidi tu fuiste quien hizo dudar mi heterosexualidad."- repetí como quien no quiere la cosa y ella aplaudió mientras daba pequeños saltitos.

-Bien, iré contigo. Pero solo porque sin mi no te divertirás igual- Heidi me abrazo por los hombros mientras yo le daba un pequeño golpe.

-Nunca voy a admitir que tienes razón.

Ambas reímos, pero lastimosamente nuestro momento fue interrumpido por el timbre de la puerta, Heidi se levanto con un sonrisa y fue abrir.

-¡Charlotte Austin! ¿De nuevo apostaste en Las Vegas sin mi?- grito una muy indignada ojimarron desde la puerta.

-¿Que?- pregunte para mí misma caminando hasta la puerta.

Al llegar me encontré con el rostro serio de Arun pero gracias al cielo ya no me veía como si hubiera asesinado a un cura. Heidi me veía indignada ¡nunca iría a Las Vegas sin ella, es la mejor contadora de cartas del mundo!.

-Arun, ¿Que haces aqui?- pregunte mirándolo fijamente.

- El señor Waraha me envia. Deberíamos irnos, ¿Ella es tu amiga?- contesto con voz rasposa y seria mirando a Heidi.

-Oh si, Heidi el es Arun. Arun ella es Heidi. Ahora si, ¿iremos a donde?

-Nos vamos de compras.

-¿Y te enviaron a ti?- dijo Heidi en un intento de contener la risa.

-Tengo un gran sentido de la moda.

(...)

-Me siento como niña pequeña en un parque de diversiones- susurro Heidi mordiéndose el labio.

-Heidi está a punto de hacerse pis- dije apareciendo frente a la cámara y en ese momento ella me golpeo.

Grabe con mi cámara todo mi alrededor que estaba abarrotado de las mejores marcas de diseñador del mundo, creo que ya estaba empezando a comprender a Heidi. Arun andaba a nuestro lado sin quitar su cara de orto, asi que decidi molestarlo.

-Oye Grandulón, saluda a la cámara- apunte la cámara a su rostro y el me fulmino con la mirada- ¡Oh vamos, Arun! Sonríe un poco al menos, vamos, intentalo.

-No fui diseñado para sonreir- contestó mientras una pequeña sonrisa se abría por su rostro.

-¿Quien te crees? ¿Terminator?- cuestiono Heidi con burla.

-Sonrie, sonrie, sonrie...- empecé a alentar y Heidi se me unió aun con el rostro de Arun frente a la cámara.

-Sonrie, sonrie, sonrie... No te hagas de rogar, Arun. Yo se que quieres sonreir- lo anime apareciendo frente a la cámara.

Pizza - adaptación englotDonde viven las historias. Descúbrelo ahora