Jujutsu Kaisen [ONE-SHOTS]

· CHOSO ·

Ahí estabas tú en un día nublado y fresco como cualquier otro día de otoño, no emitías palabra alguna, tus ojos, sombríos y apagados miraban fijamente la tumba de tus padres, este era su primer aniversario de fallecidos, seguías dolida y trastornada por lo que ocurrió hacía ya 1 año en Shibuya la terrorífica noche de Halloween, la noche de las pesadillas y la destrucción, jamás pensaste que perderías a tus padres tan rápido, pero todo se había esfumado como las hojas son llevadas por el viento brusco.

- Es injusto...No teníais que haberos ido así, dijísiteis que no os pasaría nada y que estaríamos juntos siempre, quería que me viérais crecer, casarme, trabajar y tener una familia, quería veros jugar con mis futuros hijos, quería que os sintiérais orgullosos de mí...¿Es alguna clase de castigo del universo por mis errores? -Te preguntabas- Os echo de menos...Me siento sola.

- ____....- Un hombre te observaba a los lejos, se distinguía levemente que llevaba 2 pequeñas coletas y una túnica morada y blanca para ver una foto llena de sangre seca- Lo siento...

Lágrimas salían de tus ojos, tu vista se volvía borrosa e ibas descendiendo al suelo para abrazar la tumba con fuerza, tus pulmones se llenaban de grandes cantidades de aire para solar un grito lleno de dolor, de frustración, de impotencia contenida. Tus padres eran personas inocentes que no merecían aquel cruel destino, aquella cruel e injusta vida. 

-Sollozabas- ¿Por qué las personas buenas son las que tienen que pagar? 

Choso te miraba a los lejos con pena, hubo muertes que tú viste y jamás pudiste soltar. El castaño pensaba muy a regañadientes que hacer, no quería ir contigo debido a tu situación y quiso darte tu espacio personal, así que se quedó tras el árbol esperando pacientemente, se preocupó al ver que no te levantabas y decidió acercarse en silencio para verte, acercó su mano pero la quitó cuando detectó que parecías una flor hermosa que estaba a punto de terminar de marchitarse...Tus labios y nariz rosados, tus mejillas suaves, tus ojos hinchados y de un leve color rojo en el párpado inferior, tus pestañas pegadas por ese pequeño río de lágrimas derramado del lago de tus ojos. Se sentía muy culpable por ver tu estado pero no podía regresar en el tiempo por mucho que quisiera hacerlo las veces posibles para salvar vidas que no merecían llegar al otro mundo tan temprano.

- ¿Cuál fue el crimen que mis padres cometieron...? -Balbuceaste- 

Choso te contestó susurrando también.

- Su peor crimen fue amarte con locura, tal locura tenían que llegaron a tal punto de dar sus vidas por la tuya, pero esto no es una derrota, es una victoria, en la vida hay y habrá momentos difíciles que nos contará superar, pero para eso estamos viviendo la vida, viviendo nuestra historia, debes llegar al mañana ____, debes seguir adelante sabiendo que las heridas sanarán con el tiempo, tus padres te verán crecer desde el cielo, eres el mayor orgullo que tus padres pudieron tener. Ama, ríe, llora, enamórate, pero vive...Vive por ti, por tus sueños y por ellos.

El moreno dejó junto a ti la foto de tus padres para marcharse mientras grandes bocanadas de aire movían su traje de un lado para otro, se preguntaba, ¿sus palabras te habrían servido aún estando dormida? ¿Llegarías a recordarlas? 

Las oraciones del hombre desconocido se repetían en tu mente, tenía razón, no podías dejarte vencer, aún no, tus ojos se abrieron y miraron en todas direcciones pero no supiste de aquel sujeto, pero le agradeciste eternamente su consejo sin saber que aquel...Fue el asesino de tus padres.