Hitomi

Capítulo 1: Pesadilla

Estaba aterrada, corría y corría sin saber a donde me dirigía o hasta donde sería capaz de llegar. Estaba siendo perseguida por unos malhechores, creo que eran cuatro o cinco... La prisa no me dejó ni de darme cuenta de ese mínimo detalle. Tenía miedo, lloraba al mismo tiempo en que corría, no sabía que hacer, estaban a punto de alcanzarme, ya no soportaba correr más.

Era de noche, alrededor de la 1:30pm, se preguntaran ustedes que hacía tan tarde a esa hora fuera de mi casa, en realidad fue por algo que ni siquiera yo soy capaz de recordar.

Me tropecé, que tonta, pero en realidad no podía más, veía como los malhechores se acercaban más y más a donde estaba mientras que mi vista se nublaba y se ponía un tanto borrosa. Me levanté y empecé a trotar con mi rodilla lastimada y sangrando. Me estaban alcanzando, solo pensaba en lo que me harían, pensaba en mis papás, en qué hubiera pasado si ese estúpido accidente nunca hubiera ocurrido y el motivo por el que salí de casa, no debió de ser algo importante para no poder recordarlo. Ya me habían alcanzado lo suficiente, no tenía escapatoria, seguía trotando mirando hacia adelante, cuando de pronto escuché unos gritos de dolor y sufrimiento, eran los gritos de los malhechores que me perseguían, estaban siendo atacados y apuñalados por un muchacho. Era una escena horrible, había mucha sangre.

El muchacho tenía ojos verdes y cabello castaño; los apuñalaba con tanta brutalidad y sin ningún sentimiento de compasión, parecía como un juego para él, sus movimiento eran realmente rápidos en comparación con sus oponentes. Yo, solo deseaba que todo esto fuera un sueño, un mal sueño; mi vista se volvía cada vez más borrosa y me sentía mareada, me caí de rodillas y puse mis manos contra el suelo tratando de sostenerme, no tenía fuerzas.

El muchacho se acercaba hacia mi mientras mi vista se nublaba y mis párpados se cerraban cada vez más hasta no ver nada.

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- ¿Mmm? ¿Fue... un sueño? - dije mientras me estiraba y bostezaba en mi cama. - ¿¡Queeee!? - grité mientras me caía de la cama. - ¡No puede ser! Yo... Sí salí en la madrugada, lo recuerdo bien... Pero ¿por qué? Recuerdo también que me perseguían y recuerdo aquella escena con el muchacho... ¿Qué está pasando? -

¡Riiiiing! ¡Riiiiing! - Mi celular... - agarré mi celular y contesté.

- ¿Hola? - dije.

- ¡Hitomi! ¡Mujer, que rayos estás haciendo! ¿¡Ya viste la hora!? - dijo desesperada.

Volteo a ver el reloj. - ¡Aaaaaaaaah! ¡Es tarde! ¡Escuela! ¡Voy para allá Nona-chan! -

***

Mi nombre es Hitomi, tengo 15 años y vivo sola, mis padres murieron en un accidente automovilístico hace 3 años y tuve que ingeniármelas yo para vivir por mi cuenta. ¿Algún familiar o amistad que se hiciera a cargo de mí? La verdad es que simplemente no teníamos familia y no quería ser una molestia para alguien más. Tengo un trabajo de medio tiempo y asisto a la escuela.
Fisicamente tengo el cabello color negro y los ojos morados, soy de tez blanca y delgada. Mi personalidad es algo tímida y curiosa... Tengo buenas calificaciones, pero soy pésima en los deportes.

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- ¡Jajajaja! ¿es enserio? ¡A puesto a que ese muchacho era realmente guapo! Seguro que era un simple sueño... ¡No vuelvas a ingerir alimentos con grandes cantidades de azúcar antes de dormir! Además, ¿qué estabas "haciendo" tan tarde fuera de tu casa? - dijo Nona.

Nona es mi mejor amiga, nos conocemos desde el jardín de niños, no sé como sobreviviría sin sus consejos, la considero como una segunda madre a pesar de que tenemos la misma edad y vamos en el mismo salón de clases.

- En realidad... No recuerdo por qué salí exactamente de mi casa a esa hora... - dije, tratando de recordar.

- En serio, Hitomi, era solo una pesadilla, no le tomes tanta importancia, además, si aquello que sucedió fuera cierto, ¿cómo es que regresaste a tu casa, si te desmayaste? Dudo mucho que ese muchacho supiera tu dirección como para dejarte allí y con buenas intenciones... -

Tomé el consejo de Nona-chan y traté de convencerme de que fue tan solo una pesadilla y de olvidarlo.

¡Riiiing! - La campana...Ya es hora de volver al salón, vamos, Hitomi - dijo Nona.

- Mmm - Asintí.

Es cierto, por qué preocuparme por algo así, no recuerdo ni por qué razón salí de mi casa; fue solo un sueño, una pesadilla.