Maldita Confusión

Capítulo 3: Extraño

—Cada vez se pone más raro conmigo, me evita demasiado.
Tiene suerte de ser muy guapo, estaría muy molesto si me ignorara un feo.— Pensó el albino

Alastor guardaba más distancia con Angel conforme pasaba el tiempo, ¿Había algo que no quería hablar?,  ¿Estaba molesto por algo?, Por su puesto, Angel no se rendiría, no podía ser que alguien tan atractivo como Alastor no lo volteara a ver.

Charlie citó a todos en el lobby del hotel para darles una noticia, realizaría una fiesta para dar la bienvenida a nuevos demonios en el hotel, así como promocionar la abertura de este.

—Espero que todos se diviertan mucho, pero no demasiado, no queremos incidentes— Dijo Charlie con una sonrisa

—Eso va para ti, maldita Araña, si se te ocurre alguna pendejada procura no llevarla a cabo— Exclamó Vaggie mientras señalaba a Angel.

—Cállate, perra— Respondió Angel

Esto hizo enfurecer a Vaggie, quien trató de abalanzarse contra Angel, pero su novia, Charlie, logró capturarla a tiempo.

La noche de la fiesta llegó, Charlie trató de que fuese una fiesta tranquila, pero en el infierno es imposible.
Al fondo, en el bar del hotel, se encontraba sentado Alastor, trataba de alejarse un poco ya que no le gustaba ese tipo de ambiente.

Quizá algún pensamiento lo tenía abrumado en ese momento, razón por la cual empezaría a beber sin parar hasta sentirse un tanto hebrio.

Angel logró encontrarlo entre la multitud, y por su puesto aprovecha el momento para coquetear un poco con él.

—Hola, guapo~ ¿Qué haces aquí tan solo?— Se sienta a su lado

—Hola, ¿Cómo estás, amigo?, tan solo estoy tomando un poco— En su voz se notaba que estaba algo mal

—¿Un poco?, Pero si ya te pasaste de copas, querido~— Se acerca más a Alastor

Alastor ríe un poco—Hay muchas formas de divertirse, tan solo estoy probando una de ellas—

—Yo conozco muchas otras formas para probar— pasa sus dedos por el hombro de Alastor

El demonio de color rojo volteó de reojo para ver a Angel, y bajó ligeramente su mano para tomarle la pierna.
Angel moría de nervios ahora, pero trataba de mantener su actitud coqueta.

—Probar siempre es una opción, querido, el mundo está lleno de formas de entretenerse— Dice Alastor con una sonrisa

—Yo estoy para entretenerte~— Angel pone su mano superior en la cara de Alastor

Ambos demonios se ven fijamente por algunos segundos, mientras la tensión podía sentirse a flor de piel.

—Bien, si eso quieres—