C12: ¿Feliz Navidad...? (2 meses)

1.5K 150 5
                                    

—¡Eres una preciosura!— Mitsuki saludaba al pequeño cachorro, quien era acunado pegado al pecho de Izuku, en un fular.

Hiro Bakugo, con solo dos meses de edad, sufría una grave enfermedad llamada mamitis aguda. Y los instintos de omega del pecoso no ayudaban. El mejor regalo, proveniente del segundo padrino en tercer grado, Kaminari, quien fue ascendido debido a ese fular de color menta.

—¡Si es una hermosura! Igualito a Izuku de bebé.

— Ah, mamá... —Katsuki se señaló a sí mismo, esperando un cumplido de su progenitora.

—Ay pues hijo... es que eras bien feo, la verdad— respondió apenada, esto hizo reír a la pareja de peliverdes.

—Izuku, cielo, ah... yo lo hago, no te preocupes... — Masaru preguntó, debido a los codazos de su esposa.

—¿Hmm? Ah, yo puedo hacerlo.

—No, I-Izuku, hijo… cuidado en…— Inko observaba a su hijo  encaramarse en una pierna para dejar un ornamento navideño. 

—Ay mami, tranquila… No era nada, ¿Verdad, Hiro? Eh, ¿...Por qué me miran así?

Todos se quedaron mirándolo preocupado, estando como en alerta. Se quedaron mirándolo perplejo, hasta que Katsuki habló, mientras cortaba zanahorias.

— No hagas eso de nuevo. El doctor dijo sin movimientos bruscos.

— Hasta que termine el puerperio. Ya acabó— el pecoso le respondió, alzando de pequeño.—Ya han pasado 2 meses, ¿Verdad, mi amor?

—El doctor dijo hasta el 29 de diciembre, cielo—Inko añadió, casi forzando a Izuku a sentarse.

— Ay mamá, faltan 4 días... — suspiró cansado. El pecoso paseó hacia la cocina por un vaso de agua, masajeando suavemente la espalda del alfa.— Kacchan, ¿Cómo vas? ¿Ayudo?

—Acuéstate mejor será. Quédate tranquilo— El rubio respondió, cortando vegetales con su padre. —Ahora que terminaste la cuarentena andas hiperventilado.

—Pero es que…quiero moverme.— Lloriqueó, reposando su cabeza en su hombro. Bajó su mirada para observar a Hiro, quien ya empezaba con bostezos y muecas— Hora de la siesta… te amo, llámame por cualquier cosa, ¡Ah! Y…

—Izuku… murmuras~. Ve a dormir una siesta, no se acabará el mundo… Tranquilo.— El peliverde sonrió y lo besó, caminando hacia la habitación principal. 

No se va a acabar el mundo, ¿Cierto?

* * *

—Katsuki, ¿Cómo ha estado todo? Hablo más de… Izuku. 

El rubio arrugó la nariz, era obvio que en su familia había un hijo favorito. Y no era él. 

—O sea… bien, tú misma le preguntaste. Come bien, duerme cuando Hiro lo hace, no… entiendo la pregunta. 

—...— Mitsuki y Masaru se miraron entre sí, hasta que preguntaron —¿Y su omega?

Ladeó la cabeza. ¿Omega…? Ah, claro, los instintos de omega de su pequeño esposo. Izuku nunca fue un omega agresivo. Algo muy común era una gran sobreprotección por parte del alfa hacia el cachorro, pero más por el omega. Izuku no ha tenido que sentirse así. Su paternidad ha sido libre y propia, no criticada, privada… Era un proceso muy dulce. 

Pero en algún momento, al ser imágen pública, gran familia, gran grupo de amigos… una piedra tenía que caer. 

—Hola, ¿No han llegado los demás…?— El peliverde salió de la habitación en silencio, cerrando la puerta. 

Pecas, Dinamita y Cachorros [BkDk Omegaverse]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora