¿Papá? //*Draco Malfoy//Harry Potter x OC*

»»----- 𝟐𝟔 ----««

Regina se coloco ese elegante y bonito vestido blanco qué su papás habían mandado a confeccionar especialmente para ella, se asomaba una pequeña pancita la cual ella acariciaba con una mano, mientras con la otra cepillaba su negro cabello, colocó una de sus elegantes peinetas en una media coleta, para finalizar se puso perfume y aguardo en la sala esperando la llegada de los dos hombres.

Recordó todo lo que vivió con Harry ¿cómo no enamorarse de alguien tan lindo como él? Le dio su apellido se hizo cargo de ella y de un bebé qué no era suyo, le dio una vida tranquila, lo amaba en verdad lo amaba y el bebé qué estaba en su vientre era la gran prueba de ese amor

Pero por otro lado aun sentía el loco aleteo de su sentimiento por Draco, ese nerviosismo cada que le hablaba, llegaban a su mente la loca pasión con la que ambos se amaban cuando estaban juntos, la sensación que provocó volver a sentir sus labios.

Pero recordarse llorando en una cama, embarazada y confundida hacían que el amor por él rubio se desvaneciera y la imagen de su hijo al borde de la muerte por el impacto de descubrir que su marido fue infiel hacía que el dolor volviera….

¿Que podría hacer con ese amor que sentía por ambos?

Uno era el amor de su vida y el otro su alma gemela….

Pero solo uno, uno era el indicado, la decisión ya estaba tomada.

El timbre sonó, se levantó y abrió la puerta.

—Qué puntuales.

Draco llegó con un ramo de rosas blancas, mientras que Harry, su marido llegaba con uno de rosas rojas.

—Gracias a ambos son muy bonitas.

—Mi amor te ves preciosa esta noche y mira esa pancita, nuestro bebé, amor ya por favor, sabemos que Draco aquí está de más.

—Deja que ella me lo diga Potter y si lo hace aceptaré mi derrota tal cual, Te ves muy linda Reggie.

—Chicos tranquilos, Gracias Draco.

—¿Dónde está mi cachorro?

—Remus se fue con mis papás a su casa de Yorkshire, quería hablar con ustedes a solas, Harry me esperas en nuestro cuarto ¿por favor? Necesito hablar con Draco a solas.

Harry sonrió triunfante, dejó un beso en la mejilla de Regina y subió.

—Claro amor, te espero en nuestro cuarto.

Harry desapareció de la vista de ambos y Regina le sonrió a Draco.

—¿Aquí es donde me rompes el corazón?

—Es lo que menos quiero Draco, en serio.

—Regina se que no soy el hombre con el cual una mujer desearía estar, por como soy, pero te puedo asegurar que te amo y me arrepiento de haberte hecho tanto daño.

—¿Por qué debería creerte y por qué ahora?

—Por que lo único que tengo para darte que verdaderamente es mio, es el amor que me haces sentir y no quiero dejar a la única persona que me ha hecho sentir especial, se que te falle al no luchar por nuestro amor, porque te deje sola, no puedo cambiar el pasado ni lo que hice, pero quiero estar contigo, con mi hijo y daría la vida por tu bebé.

—No voy a negarte que aun siento amor y muchas cosas por ti, eres el papá de mi hijo y las veces que me has besado has hecho que mi estómago aletee y me confundes mucho, creo que no es justo, no tienes derecho de hacerme eso.

—Lo tengo porque te amo, te amo en serio.

—¿Me amas? Yo no sé en qué mundo o en qué realidad alterna me amas, en mi mundo eso no es amor cuando tu amas a alguien luchas por ese alguien y no te rindes, no te das por vencido, que es lo que tu hiciste.