LA CITA

63 5 0
                                    

Al entrar al restaurante, Natsu quedó impresionado por la opulencia que lo rodeaba. El lugar estaba decorado con exquisitos adornos de oro, las mesas estaban elegantemente decoradas con flores únicas y los techos altos exhibían imponentes esculturas griegas. Natsu nunca había visto algo así antes, y su asombro era evidente en su rostro.

Hisui observaba con una sonrisa la reacción de Natsu ante el lujoso ambiente. Era evidente que él no estaba acostumbrado a este tipo de lugares, lo que solo aumentaba el encanto de la situación para la princesa.

 Era evidente que él no estaba acostumbrado a este tipo de lugares, lo que solo aumentaba el encanto de la situación para la princesa

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Hisui: Sonriendo Parece que este lugar te sorprendió, Natsu.

Natsu: Asintiendo ¡Es increíble! Nunca he visto algo tan hermoso. Generalmente, como lo que preparan Mirajane o Kinana en el gremio, y cuando salgo, Erza es quien me invita a restaurantes. Pero ninguno se compara con esto.

La mención de Erza hizo que Hisui frunciera ligeramente el ceño. Sabía que la naturaleza algo ruda de Erza no se ajustaba del todo a la elegancia de este lugar, pero decidió no profundizar en ese tema por el momento.

Hisui: Con una sonrisa gentil Bueno, hoy te invité yo, así que espero que disfrutes de esta experiencia única.

EN EL GREMIO 

Ameri se quejaba entre las chicas del gremio sobre el problema que le ocasionaban sus pechos grandes. Se sentía incómoda con la sensación de pesadez y la limitación que le imponían a la hora de vestirse. En un momento de envidia hacia Levy, quien tenía una situación más cómoda en ese aspecto, expresó su frustración ante la aparente facilidad de otros.

Ameri: Suspirando ¡Estos pechos son un verdadero fastidio! ¡Son tan grandes y pesados que mis camisetas siempre quedan apretadas! ¡Ojalá pudiera tenerlo tan fácil como tú, Levy!

Las risas de las chicas no tardaron en hacerse presentes ante la lamentación de Ameri. Levy trató de brindarle algo de perspectiva.

Levy: Con comprensión Ameri, entiendo que puedas sentirte incómoda, pero debes recordar que hay mujeres que desearían tener la suerte de tener tu figura. La belleza viene en todas las formas y tamaños, ¿sabes?

Bisca intervino con un consejo práctico, recordándole que la vida a menudo nos presenta desafíos a los que debemos adaptarnos.

Bisca: Con calma Así es la vida, Ameri. Todos enfrentamos nuestros propios desafíos. Es cuestión de adaptarse. Quizás deberías haber considerado eso antes de comprar esas camisetas de anime tan ajustadas.

Cana, siempre lista con un comentario ingenioso, señaló algunos beneficios inesperados de tener pechos grandes.

Cana: Con una sonrisa pícara Bueno, al menos tienes almohadillas naturales para protegerte si te estrellas contra un muro. ¡Y también pueden evitar golpes cerca del corazón!

"El Rey Improbable de Fiore: NATSU X HISUI"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora