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🏹🔥 act two, chapter fourteen: 𝟏𝟒
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OBSERVE LOS ALREDEDORES TRATANDO DE entender quien en su sano juicio pondría un campo de fuerza Justo en medio de toda la isla.
— Al parecer este es el final del campo de fuerza. —informó la cabellos chocolatosos.
—Yo creo que deberíamos acampar —Odair propuso —. Peeta está débil y no creo que le siente bien al bebé que sigas corriendo —me miró por unos instantes —. Haré la primera guardia.
—No estoy muy segura de eso. —Katniss río irónicamente.
—Querida, eso que hice antes por Peeta se llama salvarle la vida, si hubiera querido matarlos ya lo habría hecho —se levanto de su lugar, con su tridente en manos —. Además estoy protegiendo la vida de ahijado.
—Nunca dije que sería tu ahijado. —Dios odiaba mentir.
—Hablaremos de eso luego, cariño. —sonrió y me miró por unos instantes.
Peeta rodó los ojos ante el apodo y me obligo a sentarme a su lado, Mags iba tras Finnick y Katniss igual. Reí un poco observando como la chica aún veía de mala manera al de piel bronceada.
Me giré hacia Peeta quien miraba sus manos de manera absorta.
—Oye, deberías descansar. —acaricie levemente su mejilla.
—Tu también, Finnick hará guardia y supongo que Katniss también. —apoyó su mejilla contra mi mano.
—Debo cuidar que no se maten. —bromee.
Se apoyó sobre el árbol y me atrajo hacia su cuerpo, mi cabeza apoyada sobre su hombro mientras sentía su respiración hacerse cada vez más lenta y tranquila.
La noche había llegado, el aire era frio y la luna artificial nos brindaba un poco de luz.
—¿Cómo está Peeta? —Finnick habló lentamente.
—Mejor, aunque aún no obtiene todas sus fuerzas de nuevo. —murmure, observando al castaño — rubio dormido.
Un sonido llamo nuestra atención, pronto una luz azul se disparó de uno de los árboles y los tributos que habían caído empezaron a aparecer.
—Creí que durarían más. —Katniss murmuró observando a la mayoría de profesionales.
—Algunos murieron por las razones más tontas. —baje la mirada hacia el piso de arena.
—¿Cómo lo sabes? —Katniss interrogó.
—Simplemente lo se. —me encogí de hombros.
Di un pequeño salto en cuanto el cuerpo de Peeta se movió, me acerque un poco a él dándome cuenta que solo había despertado gracias al sonido que el anterior acto desprendía.
—Al menos aún no está muerta. —Finnick me miró antes de volverse hacia Mags.
