Omega. |+18|

Capítulo 6.

Capítulo 6: La presentación. 

Días después.. 

Venus.

Colocaba en las canastas las frutas que se habían recolectado el día de hoy, estaba contenta de que mis Omegas estuviesen tranquilos, yo por otro lado estaba nerviosa, mañana me presentarían a la manada como su Luna. 

No sabía cómo o que hacer en estos casos, puesto que jamás he sabido el rol de la Luna en una manada, algunas personas me han explicado el rol de la Luna en la manada. Es como una reina basicamente, asi que tengo que dar lo mejor de mi en este tiempo que seré la Luna.

Aun estaba sorprendida de que estuvimos en la misma manada, pero jamás nos conocimos.

Damiano siempre ha sido mi mate, solo que ambos no lo sabíamos. Su historia fue trágica y tiene tantos motivos como yo para asesinar a Romano, el destruyo su manada y la mía.

—Luna, pruebe estas —me dio una fresa y de inmediato la probe.

—Esta deliciosa y fresca.

—Me alegra que le guste, con estas haremos un enorme pastel para su ceremonia.

El entusiasmo de las personas era palpable, ellos jamás habían tenido una Luna y podía percibir que para ellos es muy importante tenerla.

Pero como asi hay personas alegres, otras no lo están tanto. Me he dado cuenta de que hay una hembra acechando a Damiano, se que es Beta por lo pesada que es su Loba, no tengo nada en contra de la Loba, por que se que toda hembra desea un mate, pero su portadora no es la mas honesta que hay. 

Damaris sigue molesta por que Damiano o bueno su lobo pasaron su celo con alguien más. A mi en lo personal no me molesta ya que ambos estábamos lejos del otro, además de que era un jovencito cuando eso sucedió, cosa que si me molesta. 

¿Quien en su sano juicio llevaría a un jovencito a las prostitutas? Estaban locos. 

Pero si me alivia de que haya pasado sus demás celo encerrado, el a diferencia de los demás Alfas, puede preñar a cualquier hembra ya que es un Alfa dominante. 

Entiendo a las lobas de aquí, cualquier hembra desearía tener a Damiano como macho, pero yo soy la afortunada y tengo que dejárselos en claro. 

Y hablando de el, estaba hablando con su Beta del otro lado del campo, a pesar de ser un Alfa y el rey de esta manada, no suele vestirse con prendas costosas u ostentosas. Parece un habitante más y eso se aprecia, por que se nota que fue criado por mi padre. 

Me acerque a el con la canasta de las frutas en mis manos, el clima estaba precioso y fresco. 

—Hola Luna mia —dejo un beso en mi frente— ¿Por que estas trabajando? 

—Por que me gusta sentirme útil Alfa —el sonrió—, las frutas están deliciosas, hacen un buen trabajo cosechándolas. 

—Todo es gracias a los Omegas que saben como hacerlo —me quito la canasta—, ven conmigo, te mostraré algo. 

Hasta ahora nos hemos conocido un poco más, me he dado cuenta de que es un hombre que le gusta escuchar, además de que es atento, no lo digo por que sea su mate, es atento con cada persona dentro de esta manada, es educado y un poco alegre, a pesar de que en su mirada no lo parezca. 

Es normal, ha perdido mucho. 

Conmigo se ha portado como un verdadero caballero, no se si es por que jamas lo habian hecho o por que sea mi mate, aun no lo se.