Older - ChanMin

07

Seungmin estaba al lado de la puerta de la clase en la que se encontraba el maestro Bang y Felix.

Estaba confundido en principio. Primero se encontró a un chico que jamás en su vida había visto hasta hace unos momentos. No es ni la primera ni la segunda vez que Bang se queda con Felix después de las clases.

- ¿Seungmin? - oye una voz a su lado. Rápidamente voltea para encontrarse a su amigo con tres paquetes de papitas que se había comprado.

- Innie, ¿no crees que comes muchas papitas diarias? - le pregunta casi susurrando.

- ¿Qué? - le pregunta con una mueca de confusión en su cara.

- ¿Que si no crees que comes muchas papitas diarias? - le repite y el menor se le queda viendo por unos segundos mientras mete otra de las papitas a su boca.

- ¿Qué? - repite lo que anteriormente dijo.

- ¿Estás sordo? - le pregunta. Se vuelve a callar y no responde mientras hace la misma acción que antes.-, Sí. Estás más que sordo. - le dice para luego mirar en el pequeño cristal de la puerta a los mismos platicando muy animadamente.

- ¿Qué haces? - le pregunta.

- Esperando a... Felix. - le responde.

- Tengo sueño y hambre, me voy a tu casa. ¿Sí? - se acerca un poco más.

- Lo que sea, puedes irte, no pasa nada. Luego iré. - le responde para verlo a la cara.

- Bueno, nos vemos. - se despide y se va.

Después de ver que ya no queda nadie alrededor. O al menos es lo que él supone. Escucha como las voces de los que hablaban animadamente se acercaban a la puerta. Apartándose un poco de la entrada de aquella clase, ve a Felix salir con una gran sonrisa.

- ¡Nos vemos mañana, maestro Bang! - se despide con la mano para ir a la salida de donde se encontraba.

Seungmin lo mira como se va, viendo como su presencia se hace cada vez más pequeña cuando anda en los pasillos solos.

Él cuando ve que ya no está, ve y mira si está aún Bang. Y sí, sí estaba. Allí tranquilo viendo su teléfono.

Luego decide dar marcha a seguir a Felix y su preciada suerte lo persigue para escuchar la voz de su maestro y hablarle a su espalda.

- ¿Seungmin?

-

- ¡Yang Jeongin! - llama un rubio corriendo a brazos del mencionado.

Se voltea para ver de quién tratase y mientras vuelve su mano con una papita a su boca ve que es el chico que tanto le agrada.

- ¡Hyunjin! ¿Qué te trae por aquí? Es muy tarde y siempre te vas temprano. - le dice para seguir con el mismo movimiento de su mano hacia su boca.

- No, es que vine con Minho que quería ver una cosa. Sé que te vas tarde y decidí acompañarlo. - le explico mientras sacaba algo del bolsillo de su pantalón.- Toma, te lo debo. - le extiende unos billetes.

- ¿Qué es eso? - le pregunta tomando lo que le dieron.

- Es dinero. Para que compres más de las cosas que te gustan. - le dice y Jeongin al escuchar aquellas palabras le empiezan a brillar los ojos.

- ¡Para comprar papitas! - exclama bastante emocionado para luego agradecerle a Hyunjin unas cuantas veces.- ¡Gracias Hyunjin! - le agradece y se inclina.

- No hay de que. Quiero verte tan solo feliz. - le da una sonrisa.

- Hyunjin... - llama su atención. El mencionado lo mira en forma de que le puede decir.- Ahorita no podemos ir a comprar, ya es tarde y por eso fui rápido antes de que cerraran. - hace un puchero.

- No te preocupes Innie-ah, mañana los comprarás. - le da otra sonrisa.

- ¡Gracias HyunJinnie! - se acerca para darle un abrazo que el mayor no dudo en corresponderle.

-

Seungmin después de haber charlado está vez una pequeña conversación con el maestro, salió corriendo para ir a por Felix. Una excusa le dio, un "Solo pasaba a buscar a mi compañero Jeongin.", y era de esperarse que el mayor sin rechistar le creyera. Caminó lo más rápido que sus pies lo dejaron y al ver a Felix llegar a un auto se escondió un poco detrás de autos para que no lo viera.

El caso fue que Seungmin estaba ya un poco harto de ver como el lindo maestro Bang estaba con Felix. Sentia celos, claro que sí. Por eso decidió cruzar su propio límite sin pensar antes.

Viendo como Felix dejaba sus cosas en el suelo para buscar mejor algo en su mochila, Seungmin se acerca más hasta quedar atrás de él.

En eso Felix se levanta del suelo y con tan solo eso, el rubio vio una sombra detrás de él que no pudo ver bien y al querer voltearse dejo de ser consciente.

- Felix. - dijo y luego agarro aquel libro grande de pasta dura para alzarlo y pegarle tan fuerte como pudiera dejando a un Felix inconsciente en el suelo.

El vidrio del auto sonó al golpe, sin dejar a Felix reaccionar lo dejo caer al suelo. Por un momento pensó en lo que hizo pero solo lo vio como lo dejo en un estado bastante malo al golpearlo con aquel objeto.

Bang, Bang, Bang.

Su cabeza decía su nombre repetidas veces. Viendo como su mano llegó a tener sangre y su camisa blanca, quedó un momento pensando que acababa de hacer.

De por si no lo planeo, no lo pensó. Solo dejo que su cuerpo por si solo actuará o que lo que le pasará dejara que actuará.

No sé sentía mal por haber golpeado al rubio, al contrario se sintió bien al verlo ahí en el suelo por un golpe. Su cabellera rubia ya no lo era tanto ya que se tornó un poco roja.

- Maestro Bang. - dijo antes de inclinarse, tomo su muñeca para ver si estaba aún vivo y para eso sí, aún pudo sentir su respiración y sintió su corazón latir.

Trato de alzarlo para ponerlo en su espalda e ir a su auto.

- Christopher. - una sonrisa se armó en su rostro, esas lindas que se dejan ver cuando te sientes bien o feliz. Llevando al inconsciente en su espalda para ya ver que hará con el.

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