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Carre gimió bajito al sentir las manos más grandes del otro macho recorriendo su abdomen con suaves caricias burlonas.

-Rob!- jadeo ladeando la cabeza

-Tan lindo- le susurro- tan bonito

El felino sintió un estremecimiento recorrerle desde la punta de los dedos del pie hasta sus largas y peluditas orejas color café.

-Rob, por favor- suplico entre jadeos

-paciencia gatito- río el más alto, quitando lentamente los míni shorts del castaño más claro

  No había nada más que lujuria en el ambiente, no había espacio para el amor o el cariño romántico, solo un insaciable deseo de piel con piel, de necesidad casi sofocante de amor íntimo, de algo que ninguno de los dos sentía por el otro.

-E-Espera..-gimió carre, deteniendo al otro antes de entrar .

-¿todo bien?- respiraba agitado, apretando las caderas del más pequeño para controlar su deseo bestial de seguir complaciendo al felino.

-Si, si, nhg- se atragantó al sentir a Rob entrar de golpe- o-oh dios, tan grande, Robbie, nooo~ -gimió con descaro, moviendo su cola emocionado por la intrusión

El castaño más alto río al ver al menor tan complacido por una simple acción; estaban por seguir cuando fueron sobresaltados por el teléfono celular de Carre.

-M-Mierda, ahora?- suspiro frustrado al ver el identificador de llamada

-y si no lo atendes? Estas ocupado- y marco su punto dándole una fuerte estocada

-Ah, ah, Ngh~ -gimió mordiendo su labio, inundado por el placer, ignoro la llamada.

Hasta que volvió a sonar.

Una vez

Otra vez.

Y otra vez.

A este punto ambos chicos estaban realmente frustrados, lo único que querían era algo de alivio carnal y hasta en esos momentos eran interrumpidos.

-espero que este hijo de puta no me hable para una boludes, porque lo voy a cagar a trompadas- gruñó tomando el teléfono para contestar la llamada

-al fin te dignas en contestar- hablo una voz al otro lado

-¿que?- soltó con brusquedad, molesto con su amigo

-bue, para pibe, ¿que no te cogieron todavía?- río el oso

-Y vos ves, estaba en eso hasta que decidiste joder- tomó aire para no mandarlo a la mierda- apúrate pibe, no tengo toda la noche, la pija que tengo en el culo se ablanda

Todos quedaron en silencio, un silencio tenso que fue roto por la risa estridente de Robleis.

-¿estas con él?- sonaba molesto

-si, apura el tramite querido- carre nunca trataba así a sus amigos, pero tuvo un día de mierda, una semana de mierda y ahora estaba teniendo una cogida de mierda y todo gracias a la misma persona

-no, deja, te hablo cuando no estés ocupado, porque es obvio que preferis seguir comiendo que escucharme- dijo con ironía, casi haciéndose la víctima

-Joya, chau, nos vemos amigo- y corto sin más para entrar en una sesión de besos acalorados con Rob.

Spreen miro sorprendido la pantalla de su teléfono, carre acababa de contarle la llamada sin siquiera preguntar porqué la urgencia.

-ya no soy tu prioridad, ¿he?- bajo el teléfono com tristeza

Ca De Cata ¿verdad? [C!Rodrivan]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora