Especial: ¡Navidad!

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Como cada día te despertaste con mucho sueño, seguramente serían las siete de la mañana, pero había algo extraño, hoy Kyōka no estaba despierta, en vez de eso seguía durmiendo tranquilamente. Desde que habías llegado nunca te habías despertado y que Kyōka no lo estuviera, lo que acababa de pasar era una novedad. Así que debido a lo extraño de su comportamiento pensaste que pasaba algo. Pero tan rápido como te levantaste tu compañera de cuarto se despertó, su capacidad de escucha era impecable. Por lo cual cuando estabais desayunando decidiste aprovechar para averiguar qué estaba pasando.

-¿Y cómo es que hoy no madrugas tanto, Kyōka?- le preguntaste sentándote con un vaso de leche.
-¿No lo sabes?- al pasar unos segundos y no conseguir ninguna respuesta, continuó-. Ayer era el último día de clase antes de las vacaciones de Navidad, no volvemos hasta el lunes 8 de enero.
-¿Entonces tenemos libres todos estos días?- preguntaste ahora comprendiendo mejor las palabras que Dazai te dijo el día anterior.
-Sí, te deberían haber informado de todo cuando llegaste- en ese momento, te acordaste de que, por llegar tarde el primer día, te saltaste la reunión donde se explicaban ese tipo de cosas. Ahora que lo sabías, decidiste cambiar de tema.
-Dazai me dijo algo de preparativos para navidad. ¿Cómo funciona eso?

Kyōka te dijo todo lo que sabía. Parece ser que en las vacaciones de navidad se suelen juntar todos para hacer decoraciones de navidad para el centro. También te dijo que ayer cuando habían llegado todos hablaron de cómo se organizarían para hacerlo, al final la decisión fue que dentro de dos días, el viernes veintidós, a las cuatro y media, habíais quedado en ir a la habitación de Dazai y Kunikida para preparar el árbol, pero como vosotros llegasteis tan tarde no les dio tiempo de informaros.

Los dos días se pasaron rápido junto con Kyōka, te dio tiempo a hacer muchas cosas que llevabas tiempo queriendo hacer, como: leer tu libro, escuchar música, ver películas, estar un buen rato con tu compañera... Haciendo esas cosas que tanto te gustaban, casi sin darte cuenta, ya era el viernes y saliste de tu habitación para ir con el resto al dormitorio de Dazai y Kunikida.

Cuando llegaste y abriste la puerta, te diste cuenta de que Kyōka y tú erais las últimas en llegar, aunque no habíais llegado tarde, más bien eran dos minutos antes de la hora acordada. ¿Tantas ganas tenían cómo para llegar tan pronto?

La habitación era muy parecida a la vuestra, pero habían apartado las cosas y puesto más mesas para que pudierais sentaros todos. Encima de ellas había papeles, cartulinas, arcilla y todo tipo de cosas para hacer manualidades. Después de una amable bienvenida os sentasteis junto con los demás para empezar, tú estabas muy concentrada intentando hacer una corona de navidad que viste el día anterior por internet, mientras el resto de tus compañeros hacían otras cosas.

Kunikida, que a sorpresa tuya era muy bueno cosiendo, estaba haciendo un calcetín de navidad. Ranpo estaba haciendo bastoncillos de navidad con arcilla a la vez que se comía unos dulces. Atsushi y Kyōka estaban decorando bolas de navidad y haciendo otros adornos. Kenji y Haruno estaban preparando fuera el árbol. Naomi y Tanizaki bueno... supuestamente deberían estar haciendo algo, pero hacía un rato que no los veías, aunque te habían dicho que mejor no preguntaras por qué estaban haciendo. Y por último Dazai, él no estaba haciendo nada relacionado con los preparativos de navidad, estaba tumbado en un pequeño sofá con sus auriculares puestos, pensaste que seguramente estaba escuchando alguna canción que le gustase. Pero te sorprendiste cuando de la nada empezó a cantar.

-Shinju wa hitori de wa dekinai futari nara dekiru Shinju, Shinju, Shin-
-¡Ponte a hacer algo útil!- dijo Kunikida quitándole enfadado los auriculares

Dazai ahora sin nada que hacer, obligado a seguir las órdenes de Kunikida se sentó al lado tuyo en la mesa y se puso él también a hacer una corona de navidad. Para tu sorpresa, él estaba más concentrado de lo que pensaste que podía llegar a estar nunca. Pasó un rato con todos entretenidos haciendo las decoraciones, hasta que de la nada Dazai entusiasmado se levantó de la silla con una gran sonrisa pintada en la cara, estaba cogiendo con ambas manos, lo que era su... ¿Corona de navidad? No sabías si eso podía llegarse a considerar una corona de navidad debido a que no tenía su distintiva forma redonda, sino una forma de cuerda para suicidarse, pero debido al material y a la decoración se podía decir que tenía un toque más navideño. Pero Kunikida, aún más cabreado que antes, cerró el puño de su mano y lo golpeó con mucha fuerza sobre la cabeza de Dazai, que ahora dolorido por el golpe estaba frotándose la zona del impacto. Todos empezasteis a reíros de lo mal que se llevaban esos dos.

Escuela de detectives (Dazai x Reader)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora