Desde su nacimiento, muchos lo tacharon como una abominación, pues era el resultado de la unión maldita entre un humano y una demonio. Abandonado por sus padres para mantenerlo a salvo de aquellos que deseaban su muerte, no tuvo más remedio que vale...
El joven cambiante se encontraba bebiendo su habitual sake en su sitio favorito de la finca, el cual se trataba de los tejados. Pese a que la finca no era totalmente de su estilo, T/N no podía negar que le habia tomado cariño al lugar, pues durante las noches podía apreciar con total tranquilidad la luna.
El pelinegro disfrutaba de su preciado sake con total tranquilidad, pero un dulce aroma captó su atención. Curioso por saber de donde provenía aquél dulce olor, T/N saltó de tejado en tejado hasta llegar al origen, el cual se trataba de Tanko, quién al parecer era quién desprendía aquél cautivador aroma que tanto apreciaba el semihumano.
T/N: (curioso) ¿Mmmmm?
Pese a que el semihumano se encontraba prácticamente al lado de la joven, esta última no parecía haberse percatado de la presencia T/N. La joven Tanko se encontraba meditando, cosa que provocó aún más curiosidad en T/N, pues no veía necesidad alguna de hacer aquello y más a medianoche, o al menos eso era lo que pensaba él.
T/N: Oye.
Tanko: (meditando) ...............
T/N: Oye.
Tanko: (meditando) ...............
T/N: ...............
El pelinegro se acercó aún más a la concentrada Tanko y la agarró de la barbilla, logrando así captar la atención de la muchacha, quien al momento de darse cuenta de lo cerca que estaba T/N no pudo evitar ponerse nerviosa. Totalmente nerviosa, Tanko perdió el equilibrio e iba a caer de espaldas, pero para su fortuna, T/N le agarró de la cintura y la atrajo hacia él, quedando a pocos centímetros de la cara.
El rostro de la muchacha se enrojeció muchísimo al ver que estaban a pocos centímetros del pelinegro, quién pese a no mostrarlo también estaba sumamente nervioso. T/N colocó a Tanko nuevamente en su sitio y se separó de ella, ambos estaban procesando lo ocurrido hace poco, lo que ocasionó un silencio un tanto incómodo.
T/N: (ligeramente nervioso) Yo... Lo siento.
Tanko: (nerviosa) No ha sido culpa tuya... tenía que haber estado más atenta.
T/N: (ligeramente nervioso) ...............
Tanko: (nerviosa) Aún así, gracias... Por ayudarme...
El comportamiento nervioso de Tanko mezclado con su rostro enrojecido provocó una sensación de hormigueo en su pecho mezclado con una extraña necesidad de adularla. Sin embargo, aquello era algo imposible para T/N, no por el hecho de no querer hacerlo, sino porque era torpe y en cierto modo ingenuo a la hora de mostrar sus emociones o de expresarse.
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(Lamentablemente no se lo que pone en los bocadillos y sinceramente, no sé si ha quedado bien con esta escena.Decidme si os importa que ponga este tipo de imágenes con palabras en japonés, si os molesta evitaré o editaré dicho tipos de imágenes.. Os pido disculpas por ello, espero que aún así sea de vuestro agrado.)
