Capítulo 3: Un instruso inesperado

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Hola ya sé que ha pasado mucho que no he actualizado la historia, Pero al fin les traigo la siguiente parte, que espero sea de su agrado y procuraré realizar las demás partes, actualizando los fines de semanas. Por lo mientras póngase cómodos y disfruten del capitulo ☺️🙈.


Stolas entro a lo que parecía un lujoso hotel.

— ¡Bienvenido al hotel felíz! — Hablo alegremente una chica rubia, dejando volando confeti, ante está actitud se asustó el joven Stolas.

— Que agradable sorpresa. — Hablo tímidamente el búho.

La chica de las mejillas rojas se puso muy feliz, pero atrás de ella había una chica de cabello largo blanco, que solamente tenía un ojo visible.

— Oye Charlie, no asustes al huésped. — Le aconsejo está chica.

— No es ninguna molestia, al contrario me parece agradable su forma de recibirme. — Dijo Stolas dando una sonrisa.

— ¡Oh muchas gracias! Creo que a partir de ahora eres mi huésped favorito — Hablo la chica rubia que al parecer se llamaba Charlie, pero de ahí aparecieron otros demonios.

— ¡¿Y nosotros qué?! — Exclamaron esos huéspedes uno que tenía forma de polilla y otro tenía silueta de una serpiente.

— ¿Cómo creen que los voy a dejar de un lado? — Se lamento Charlie ante esos dos.

— No se suponía que era yo el favorito.— Dijo la araña, para ver al búho y guiñarle un ojo — Sin embargo bienvenido guapo, a ver cuándo me invitas a tu habitación, te podría dar unos consejos muy valiosos que podría ayudarte en muchos casos. — Dijo estás palabras hacia el joven príncipe.

— Gracias, pero así estoy bien.— Hablo algo avergonzado.

— Bueno ¿Que dices? ¿Quieres ir a ver tu nueva habitación? Prometo que será muy  cómodo que no vas a querer irte de este maravilloso hotel. — Comento Charlie con una llave en la mano.

— Si, me parece buena idea. — Acepto ir, siguiendo a esa demonio femenino.

Mientras iban caminando, podía ver las pequeñas ventanas de cada habitación, pero no pudo borrar de su mente esa sonrisa que para su punto de vista era algo tétrica y al mismo tiempo andaba comiendo carne de venado en su mesa.

Al llegar a su habitación se quedó asombrado, ya que en un principio pensó que su habitación iba a ser muy común a lo que siempre vería en los hoteles de lujo, tragándose sus palabras, ya que en la habitación que le tocó tenía un gran librero, una mesa con unas cinco macetas y su techo ni se diga era una constelación a tiempo real.

— ¿Te gusta tu habitación? — Preguntó la chica con una sonrisa reflejada en ella.

— Me encanta. — Respondió el ave haciendo sonidos de búho.

— Me alegra oír eso, lo bueno de todo esto es que la habitación se personaliza de  acordé a los deseos del huésped, pero siendo sincera tu habitación es muy hermosa.— Se asombro Stolas al oír este dato de parte de esa jovencita.

— Es muy amable su comentario, de casualidad ¿Usted ha nacido en este mundo? Ósea Wonderland...— Dijo tímidamente.

— Claro, Wonderland, es mi lugar de nacimiento, no es por nada pero soy la hija de Lucifer rey de este maravilloso reino lleno de diversión y locura, que tonta pregunta haz hecho, pero es muy lógica esa respuesta ya que toda mi vida he estado en este país.— Dijo mientras sacaba un libro donde salía un dibujo en 3D, que al parecer era como un mapa de Wonderland, pero se le hizo curioso que esta joven tuviera el mismo diseño y personalidad, al igual que su padre tenia el mismo nombre que el gobernador y creador del infierno.

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