LOS GUARDIANES DEL ALMA

2. Conociendo al guardian

Habían pasado unos pocos días desde que el príncipe Izuku se convirtió en el nuevo guardián del fragmento del alma. Se encontraba entrenando con algunos compañeros y su amigo en un claro del reino de Ignatia. A lo lejos, se escuchaba el choque de las espadas.

-Vamos, Denki, sé que aún puedes contra mí - retó el peliverde, extendiendo su mano para ayudarlo a levantarse después de derrotarlo.

-No es justo, Izuku. Tu entrenamiento siempre ha sido mejor que el mío - se quejó el rubio, tomando la mano que le ofrecían y poniéndose de pie.

-Esas son excusas.

-Claro que no. Yo empecé apenas hace un par de años con el entrenamiento de guardián, en cambio tú llevas desde los cinco años preparándote.

El peliverde solo sonrió con nostalgia, pues sabía que Denki tenía razón. Él tenía poco tiempo como futuro guardián, ya que originalmente no estaba destinado para ese papel, se vio obligado a asumir la responsabilidad después de la misteriosa desaparición de su hermano mayor, quien originalmente era el elegido.

-Entonces debemos entrenar más para que me puedas alcanzar - sugirió Izuku.

-Presumido - respondió Denki con una sonrisa.

El entrenamiento continuó, Izuku estaba decidido a ayudar a Denki a alcanzar su pleno potencial como guardián, y Denki estaba agradecido por tener un amigo tan dedicado y comprensivo.

Luego de un par de horas terminaron el entrenamiento y decidieron descansar bajo un frondoso árbol, se sentaron en el césped, bueno Denki se dejó caer estruendosamente sobre la hierba, parecía que iba a desfallecer, Izuku por otro lado solo se burló del comportamiento de su amigo, y le ofreció una botella de agua que el rubio lo acepto sin dudas.

-Sabes, Izuku, todavía me resulta difícil creer que mi hermano haya desaparecido de la noche a la mañana. Y ahora seré el guardián de Ventusaria - expresó con pesar en su voz.

- Entiendo que sea difícil, Denki, Pero eres fuerte, y estoy seguro de que descubrirás la verdad detrás de la desaparición de tu hermano. Y como guardián de Ventusaria, tienes la responsabilidad de proteger el fragmento del alma del viento.

- Gracias, Izuku. Me alegra tener un amigo como tú a mi lado, aunque he de aceptar que estoy nervioso, dentro de un mes me entregaran el fragmento, ¿Qué se siente? – Pregunto curioso

Izuku reflexiono un poco antes de responderle -Se siente como una conexión profunda con Celes, como si pudiera sentir la esencia misma del mundo humano, además sentí como el fuego de Ignatia surgía en mi interior.

Denki escucho aquellas palabras con emoción deseaba experimentar lo mismo que los demás pronto aun y cuando sus nervios jugaban en su contra. Luego de un breve silencio volvió a preguntar.

-Oye, Izuku, ¿cómo fue el proceso de unión con tu guardián? Debe ser increíble tener un compañero como él.

Izuku sonrió, recordando el momento en que se unió a Katsuki. -Fue una experiencia única. Cuando toqué su corazón, sentí una conexión instantánea. Pude percibir la sabiduría y el poder que poseía y su promesa de protegerme en esta misión. – se quedó un momento callado – la verdad Denki siento que ya lo conocía, pero no recuerdo de dónde.

Denki lo miró con curiosidad. -¿De verdad sientes que lo conocías antes? ¿Quizás en alguna vida pasada?

Izuku frunció el ceño, tratando de recordar. -No estoy seguro. Es como si hubiera algo en su mirada, en su presencia, que me resulta familiar, y no sé cómo explicarlo.

-Bueno, sea como sea, estoy emocionado por conocer a mi guardián. Espero que podamos formar un vínculo tan fuerte como el tuyo con Katsuki.

-Lo lograrás, estoy seguro. Cada guardián y príncipe tiene una conexión única. Ahora, ¿qué te parece si descansamos?, después de todo tu ceremonia será en un mes y no creo que quieras llegar todo golpeado – Bromeo Izuku.