Marie Jeanne Storm siempre fue una chica bastante protegida, ¿y cómo no?, si es la única hija de una bruja del aquelarre Géminis
Jamás creyó quedar embarazada a tan corta edad
Pero de alguna manera sintió que todo salió de su cerebro aquella noche
H...
ˏˋ°•*⁀➷CHAPTER TWENTY-NINEೄྀ *ૢ✧.Take me back to the night we met. I don't know what i'm supposed to do, haunted by the ghost of you... Oh, take me back to the night we met ˚ ⚘ ˏ'
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Marie Jeanne ni siquiera tuvo tiempo de poder procesar del todo aquellas palabras puesto que el lugar comenzó a desmoronar se
Se apuraron a desatarlos a la par que varias cosas amenazaban con caerse y algunas si lo hacían
—¡De prisa!—exclamó Isaac
—Por favor, vámonos—pidió Noah
Antes de poder correr a las escaleras, estas se derrumbaron por lo que todos tuvieron que retroceder
Un minuto entero en silencio hasta que Argent observó a la joven Storm y al querer decir algo, la bruja se adelantó
—Isaac, ¿puedes ver algo?—cuestionó pero el negó—
Una parte del techo comenzó a caer y de no ser porque Noah lo sacó de ahí, habría aplastado al joven Lahey
Aunque otra de las partes también parecía caer por lo que Isaac lo impidió sosteniendo lo a la par que sus ojos dorados se mostraban
—¿Soy yo o este lugar se siente más pequeño?—el techo se desprendió un poco más por lo que el joven tuvo que usar la mayor fuerza que podía para sujetar lo
Minutos transcurrieron hasta que el chico volvió a hablar
—No puedo hacerlo, no puedo sostenerlo—Informó el joven a la par que los demás trataban de ayudarlo
Cosa que no resultó de mucha ayuda
—Es demasiado pesada—exclamó Allison
De un momento a otro el techo dejó de desprenderse, al todos voltear encontraron al joven Stilinski quien lo había sujetado con el bate de béisbol
—Siempre dije que el aluminio era mejor que la madera—habló Noah antes de que su hijo lo abrazara
La tormenta parecía persistente hasta que para sorpresa de los presentes, se detuvo
—¿Se terminó?—cuestionó Taylor
Todos se miraron y parecían aliviados de poder afirmar ante aquella pregunta
Poco después el teléfono del chico comenzó a vibrar
—¿Scott?—habló una vez contestó la llamada—... Si, estamos bien, todos estamos bien... ¿Qué hay de ti? ¿Estás bien?... Bien... Oye, ¿puedes venir por nosotros... Genial... ¿Puedes traer una escalera?
