𝐒𝐖𝐄𝐄𝐓 𝐑𝐎𝐂𝐊 ― Viva and Barb

VIII

Viva suspiró varias veces, preguntándose qué había dicho para que la pelirroja reaccionara así de repente.

Casi de inmediato, Poppy apareció con una cara de confusión.

— ¿Qué pasó? ¿Por qué la puerta está abierta? — Dijo, cerrando la puerta de entrada para después sentarse al lado de Viva.

— Barb pasó, de nuevo. — Hizo una mueca de frustración.

— Uy, y no cerró la puerta. — Viva se veía estresada y muy frustrada. — ¿Ahora qué hizo?

— No sé, creo que la culpable fui yo. Le conté que acepté la propuesta de Clay y creo que no le gustó. — Viva suspiró y se recostó en el hombro de Poppy.

— Oye, ¿Y qué tal si vamos a Rock City a visitarla? — Poppy le sonrió a Viva.

— ¿Rock City, que es eso? — La confusión en el rostro de Viva era evidente.

— Es el reino de Barb, seguro se va a poner muy feliz cuando te vea, y además no me gusta verte triste, hermana. — Viva hizo un sonido de entendimiento mientras asentía.

— Pero, lo que no entiendo es por qué Barb se puso así cuando le dijiste lo de Clay. O ¿acaso le dijiste otra cosa?

— Le dije que su perfume quedó impregnado en toda mi pijama, ¿será que eso le disgustó?

— Sí, ¿quién se pone así porque una amiga tenga novio? No? debería ponerse feliz. — Poppy hizo una pausa para después seguir. — A menos que Barb esté celosa.

— ¿Celosa? — Viva recordó cómo la pelirroja la noche anterior se le había confesado. — ¿De mí, no?

— No, tontita, celosa de Clay. — Poppy soltó una pequeña risa al ver la cara de Viva. — O quizás simplemente quiere lo mejor para ti, aunque Clay es un buen tipo.

Viva lo pensó por varios segundos.

— O mejor dejamos de darle vueltas al asunto. — Viva sonrió para después levantarse del sofá. — ¿Nos vamos?

— Hay algo más, Viva. Digamos que Rock City no queda tan cerca de acá, hermanita.