Capítulo 305: Te encierro para siempre.

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Los ojos de Ning Xi se encontraron con los ojos negros del hombre. Ella se quedó parada y un poco asustada, temerosa de acercarse a él.

Lu Tingxiao encendió un cigarrillo y se apoyó contra la puerta mientras comenzaba a relajarse un poco. Solo que ahora que Ning Xi se encontraba ahí se sintió más cómodo para avanzar hacia él a medida que la atmósfera se volvía menos tensa.

Ning Xi pasó junto a Lu Tingxiao a la velocidad del rayo.

"Swoosh"

Se fue, dejando solo su sombra, casi como una maestra de artes marciales en la serie de televisión.

En el centro de la habitación, Ning Xi estaba un poco aturdida.

Nada en su habitación había cambiado en absoluto. Revistas de moda sucias estaban esparcidas por toda su cama, colchonetas de yoga enrolladas tiradas descuidadamente en el suelo, el lápiz de cejas que se había caído el otro día seguía allí e incluso la posición de la mina rota del lápiz seguía siendo la misma.

Todo esto la hizo sentir como si estuviera viviendo una realidad diferente. Sintió que el tiempo que pasó aquí fue algo que le había sucedido en su vida pasada.

Cuando una ráfaga de viento atravesó las ventanas y levantó las cortinas, Ning Xi volvió a sus sentidos y comenzó a empacar.

Primero, sacó una caja grande que se encontraba debajo de la cama, luego ordenó sus artículos uno por uno.

Ropa, zapatos, cosméticos, artículos de cuidado personal, consola de juegos PSP.

Cada vez que guardaba un artículo en la caja, sentía que una parte de su corazón estaba siendo empaquetada y le dolía.

Durante todo el tiempo que estuvo empacando, no se atrevió a mirar a Lu Tingxiao en absoluto.

Desde dentro de esta habitación, ella solo tomó sus cosas y nada más.

Cuando miró los pequeños artículos que Lu Tingxiao le había comprado, se sintió culpable por abandonarlos cruelmente.

Finalmente, terminó de empacar y Ning Xi tuvo que enfrentar lo inevitable. Respiró hondo, levantó la cabeza y miró al hombre silencioso que estaba junto a la puerta.

-CEO Lu, estoy muy agradecida por su atención durante este período de tiempo. Con respecto a pequeño tesoro, si hay alguna necesidad, simplemente llámame, estaré allí siempre que me necesites. –

A este punto, de repente se quedó sin palabras.

Después de una lucha interna, soltó sus últimas palabras.

-Voy a seguir mi camino, entonces. –

Se inclinó ante él por respeto y gratitud antes de arrastrar su caja y comenzar a irse.

Después de esta despedida, quizás las posibilidades de reencontrarnos sean muy escasas.

No pertenecían al mismo mundo con la disparidad entre ellos. Si no fuera por el accidente de la otra vez, nunca se hubieran conocido en esta vida.

El corazón de Ning Xi se hundió mientras continuaba su salida con un sentimiento de preocupación. En el momento en que llegó a la salida, vio un movimiento por el rabillo del ojo.

El hombre que había estado fumando tranquilamente sin ninguna respuesta, de repente colocó sus manos en el otro lado del marco de la puerta con el cigarrillo todavía entre los dedos, bloqueando su salida.

-Er, ¿CEO Lu...? –

Ning Xi estaba un poco confundido, dudando de que es lo que quería hacer Lu Tingxiao.

-Ning Xi. -

-¡Sí!-

-Definitivamente tienes agallas. -

-¿Eh? –

Ning Xi se sorprendió por lo que dijo Lu Tingxiao.

Lu Tingxiao terminó el último bocado de su cigarrillo, lo apagó y la miró. Comenzó a hablar con calma.

-¿No tienes miedo de que te encierre aquí para siempre?-

Ning Xi se sorprendió.

¡Por favor, cálmate, jefe!

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