prólogo

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Chuuya había vuelto de su viaje de negocios, estaba dirigiéndose a la oficina de su 'jefe', cuando alguien detrás suyo lo paro, era una de sus subordinados.

- Señor chuuya hay algo que debo decirle. - hablo.

- Habla rápido, tengo que ir a la oficina del jefe. - dijo, mientras se daba la vuelta para mirarla.

- No se preocupe será rápido, tiene que ver con el jefe después de todo.. - para ese momento de la conversación chuuya estaba prestando mucha más atención.

- ¿Que paso con el jefe? ¿Está bien? ¿Donde esta? - pregunto mientras la miraba con una mirada fría.

- E-el j-jefe está... Mu-muerto.. - dijo tartamudeado por la mirada asesina que tenía su superior.

- ¿Que? - dijo en shock.

- El Jefe murió en la tarde de ayer, se suicidó, lanzándose desde la azotea.. durante la pelea contra la agencia de detectives armados, la razón de su s-suicido se desconoce... Dejo una carta para usted y le llegó otra anónima también, Señor Chuuya... - dijo mientras le acercaba la carta de la persona anónima.

- B-bien dime, d-donde está la carta, que dejó dazai..? - dijo agarrando la carta y metiendo la en su bolsillo, mientras se insultaba en su mente por haber tartamudeado así.

- Está en su oficina, no se movió nada de ahí, lamento su perdida Señor chuuya, el f-funeral sera está tarde..

- Bien. - dijo dándose la vuelta para retirarse.

Sigio su camino hasta la oficina de su ahora ex jefe y ex novio.. Su cara era neutra mientras por dentro estaba rompiendose poco a poco, no sabía si enojarse consigo mismo, por no haber estado presente el día anterior, para salvarlo o enojarse con el castaño, por haberlo dejado solo, y por haber roto su promesa de mantenerse con vida.

Llegó a la puerta de aquella gran oficina que le  traía un montón de recuerdos, por un momento dudo en entrar. Pero aún así entro, todo estaba igual que antes, exepto por algo, que nadie si no fuera el y Dazai se hubieran dado cuenta.

- Idiota, s-sacaste la f-foto que t-tenías en tu escritorio cuando te pedí en navidad para que seamos n-novios... - dijo mientras se acercaba a paso lento hacia aquel escritorio donde el castaño se lo pasaba.

Con sus dedos tocó la madera del escritorio, cuando sus ojos se posaron en aquel sobre blanco encima de la misma mesa.

Agarro la carta con una de sus manos, la miro tenía el mismo sello que el solía usar, miro la parte trasera del sobre.

  Atte: Dazai Osamu.
Para: Chuuya Nakahara.

Abrió el sobre sacando las cosas de adentro, había un anillo, y pequeñas fotografías de ellos dos juntos, y luego ahí estaba la carta.

- Creo tuvimos la misma idea, no bastardo? - dijo mientras buscaba en su bolsillo una pequeña caja y la ponía encima del escritorio, se acercó a la gran silla roja carmesi, y se sentó ahí abrió la pequeña caja, mostrando un anillo, bañado en oro.

Abrió la carta para así leerla.

"Hola chibi,
se que en el momento
en el que leas está carta yo
Ya no esté aquí.

- ¿Desde cuándo tenías planeado hacer está mierda? - pregunto sabiendo que no iba a resivir respuestas.

Lo lamento
Lamento no haber cumplido mi promesa de
Dejar atrás el suicidio.
Lamento haberte dejado solo.

Siempre volviendo a ti..~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora