𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 xxᴠɪɪɪ: 𝐄𝐯𝐢𝐝𝐞𝐧𝐜𝐢𝐚

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Chigiri no sabía cuanto tiempo había pasado desde que se desmayó, solo se despertó y sentía su cuerpo caliente, abrió los ojos y miro al peli naranja a su lado.

—Kunigami —dijo mientras se levanta.

—Chigiri —Se acerca a él—. ¿Cómo te sientes?

—Siento el cuerpo muy pesado y también siento demasiado calor, ¿qué fue lo que me sucedió?

—Te lo diré todo, pero antes tienes que tomar esto —le entrega una pastilla.

—No lo haré, dime que sucedió.

En otro lugar, estaba el hombre quien había lastimado a Chigiri, se encontraba en un sitio pequeño, acaba de despertar por lo que no sabía en donde estaba.

—¿Dónde estoy? —se pregunta a si mismo.

—En el Reclusorio —dice Reo—. Y yo me encargaré de que después de aquí vayas directamente a prisión y no salgas de ahí nunca.

—¿Qué estas haciendo aquí?

—Estoy haciendo lo que debí hacer hace mucho tiempo —se sienta frente a él—. Tengo todas las pruebas necesarias para que te hundas en la cárcel.

—No tienes nada, déjame ir.

—Silencio —golpea la mesa—. ¿De verdad crees que no tengo pruebas?

—Estoy seguro que es así —dice.

—Se que a Chigiri no fue al único chico inocente que violaste, hubo muchos más, antes y después, usabas tu apariencia de Ángel y tu maldita hipocresía para engañarlos, no te detenías hasta que lograbas lo que querías.

—Bueno si, lo hacía. ¿Qué vas hacer con eso?

—Eres un maldito enfermo, también descubrí tu asqueroso secreto, te ponías a grabar cada una tus acciones enfermas, por suerte no lo volverás hacer nunca más, lo que hiciste no estuvo nada bien, serás castigado por eso.

—¿Cómo estas tan seguro? ¿Tú piensas detenerme? Un niño mimado como tú no puede hacer nada.

—Hablas mucho —dejó un celular en la mesa—. Tengo todos esos videos, cada uno de ellos, ¿dime si esto no es prueba suficiente para mandarte a prisión por los años que le queden a tu miserable vida.

El hombre tomó el celular molesto y lo dejó caer al suelo haciendo que se rompiera. Reo lo miro y suspiro con tranquilidad.

—Eres tan ingenuo si creíste que solo tenía los videos en ese teléfono —dice el peli morado—. Tengo una copia, y también una copia de la copia, tengo las copias suficientes, nada te salvará.

—Mira, Reo, te propongo un trato, entrega todas las copias que tengas y te dejaré tranquilo, no te haré nada, acaso ¿No tienes miedo de un Alfa como yo? Siendo que tú eres un simple Omega.

—Sobre eso —deja un sobre en la mesa—. También me tome el tiempo de hacerte una prueba que demuestra que no eres un Alfa, eres un Beta solamente, siempre tuviste que mentir que eras un Alfa dominante para sentirte superior a los demás, pero no lo eres, que lastima me das, no eres nada.

—se levanta molesto—. Me estas cansando, el que no sea un Alfa no quiere decir que no te pueda hacer algo.

—Solo inténtalo —dice mientras juega con un bolígrafo en sus manos—. Solo ponme un dedo encima y varios policías y de más personas estarán aquí, dándose cuenta del monstruo que eres.

—Eres un maldito niño millonario y estúpido.

—Lo de estúpido no te lo aceptó —se levanta—. Si fuera estúpido como tú dices no abría podido reunir toda esta información en tan poco tiempo, sólo me costó una llamada, ponerme en contacto con el mejor abogado que conozco, investigar un poco y tuve todo listo para hacer que te hundieras.

ᑭᗴᖇᖴᗴᑕT ᗯOᖇᒪᗪ - Omegaverse Donde viven las historias. Descúbrelo ahora