Dulce Amor

Capítulo 8

Hola a todos!! Les dejo el maratón que les había prometido por el fin de año. Muchas gracias por los comentarios y votos en el maratón anterior. Como siempre les pido, sigan votando y comentando para poder darles capítulos más seguido. 

Deseo que tengan un gran inicio de año y que sigamos compartiendo historias juntos!! Los quiero!!

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Capítulo 8

>>Valeria<<

Desde el día en que Bella apareció en mi casa para llevar el pastel de Luna sentí una atracción por esa mujer, su vibra relajada y lo hermosa que era me envolvieron por completo por lo que no dudé en aceptar cuando me propuso que fuéramos a tomar unos tragos aunque me decepcionó un poco cuando llegó acompañada de Valentina ya que de verdad pensaba que podíamos tener algún tipo de avance. Entre semana nos enviamos algunos mensajes, unos un poco más descarados que otros pero de alguna manera ella estaba dejándome ver que estaba en la misma sintonía que yo y cuando volvió a invitarme a salir el viernes por la noche me mentalicé de que esa debía ser mi oportunidad de tener un poco de ella. Al llegar al bar pedimos cervezas, al inicio dejé que las cosas fluyeran pero cuando estaban dejando sobre la mesa nuestra tercera ronda di un paso hacia adelante acercando mi silla a la suya

- Sos preciosa, Bella – susurré acercando mi rostro al suyo – Sé que acabas de terminar una relación pero desde que te conocí me estas volviendo loca

- ¡Qué directa! – mordió su labio inferior – No voy a aplicar la de un clavo saca otro pero quiero que me beses

Esas palabras fueron las que necesitaba escuchar para unir mi boca a la suya, comenzó siendo un beso suave en el que ambas disfrutábamos solamente entrelazar nuestros labios pero cuando metí mi lengua en busca de la suya todo tomó fuerza, ese simple roce me hizo enloquecer y la situación se tornó muy pasional, mi mano derecha tomó su cintura y la otra fue subiendo hasta quedar a un costado de su pecho derecho

- Espera – me apartó con delicadeza – Estamos yendo demasiado rápido

- ¿Queres romanticismo? – negó sonriendo – Vamos a un hotel, necesito sentirte

- No voy a hacerlo de esa manera – fruncí el entrecejo – Apenas nos conocemos... - no dejé que continuara hablando

- No te estoy pidiendo matrimonio, solo quiero sexo – solté molesta – Me voy a mi casa

Sin esperar a que dijera algo me puse de pie, dejé varios billetes sobre la mesa y comencé a caminar hacía la salida y justo cuando salí sentí que una mano tomó la mía así que me di vuelta encontrando a Bella un poco agitada

- Vayamos a mi departamento – dio un paso hacía mi – Yo también tengo muchas ganas

Dejó un beso sobre mis labios, apretó con más fuerza nuestro agarré y me llevó hasta su coche que estaba estacionado a unas calles ya que no habíamos conseguido lugar cerca del bar. El trayecto fue en silencio pero en cada alto me besaba con mucho énfasis para mantener el deseo bastante elevado. Una vez que estacionó el vehículo frente al edificio subimos hasta el segundo piso, estando adentro nos miramos a los ojos unos segundos y justo cuando nos lanzamos a besarnos con desesperación sonó mi celular aunque no respondí pero cuando volvió a escucharse el tono de llamada me aparté de ella

- Tengo que contestar – murmuré rozando sus labios con los míos

Saqué el teléfono de mi bolso, al ver que era Gabriela le devolví la llamada y cuando me informó que mi madre se estaba sintiendo un poco mal supe que mi noche no acabaría como lo había querido