Capítulo 16

301 44 7
                                    

Hola a todos!!! Estoy de regreso con dos nuevos capítulos, quería dejarles tres pero aun no pude acabarlo así que para no demorar mas publico lo que tengo listo. Gracias por los votos y comentarios, me alegra mucho que les esté gustando la historia así que sigan votando y comentando para mayor motivación. Los quiero!

1/2

---------------------------------------------------------------

Capítulo 16

>>Priscila<<

El domingo decidieron todos salir desde temprano pero yo realmente necesitaba un momento para analizar lo que había estado sucediendo, le había declarado mis sentimientos a Valentina, nos besamos, dormimos juntas y tuvimos nuestra primera cita, todo eso en menos de veinticuatro horas. Jamás me había enamorado, no había sentido nunca algo similar a lo que Valen causaba y realmente me sentía a gusto compartiendo mi tiempo a su lado. Lo único que ocasionaba un poco de ruido en mi cabeza era que una mujer estaba provocando todo eso pero era más que nada porqué ninguna persona del sexo femenino había hecho replantearme mi sexualidad, para ser sincera no había visto a ninguna de una manera diferente a una amistad. Valentina me gustaba demasiado, tanto como para imaginar que podía ser la persona que muchas veces soñé para compartir mi vida aunque no sabía que tan fácil podría ser, no me importaba lo que los demás pensaran, era problema mío quien se metía en mi cama pero, ¿Podría convivir a diario con una mujer como pareja? ¿Sería sencillo verla interactuar con Luna como parte de nuestra familia? ¿Sería lo mismo cuando mi pequeña supiera que la mujer que adora está saliendo con su madre? Demasiadas dudas surgían aunque era consciente que había mucho tiempo por delante para poder aclararlas.

Al mediodía recibí mensajes de mis hermanas comentándome que llevarían al acuario a Luna, claramente estaban invitándome pero necesitaba un poco de calma así que rechacé la oferta para ir a la cama de Valeria ya que era la única que tenía pantalla en su cuarto y estuve toda la tarde viendo una serie que llamó mi atención. Al caer la noche recibí un mensaje de Valentina para saber cómo iba mi día, contesté que estaba sola disfrutando de un verdadero descanso, ella me contó que acababa de llegar a la casa de su madre y estaba siendo interrogada tanto por su progenitora como por su hermana para saber lo que ocurría entre nosotras. En el momento en que empezaba a quedarme dormida escuché que llegaron mis padres, salí para saludarlos y me sorprendieron trayendo comida de mi restaurant favorito así que cenamos los tres juntos. Casi era medianoche cuando mis hermanas regresaron con Luna que dormía con la cabeza recargada sobre el hombro de Gabriela, después de dejarla sobre la cama en la que estábamos quedándonos me contaron como habían pasado el día pero no demoramos en irnos a dormir ya que ambas tenían responsabilidades a la mañana siguiente.

Al despertarme me sentí muy contenta, era la tercera noche que no me costaba dormir, tenía claro cuál era el motivo y eso era lo que mejor me hacía sentir. Entre besos y mimos desperté a mi pequeña porque debíamos regresar al departamento, al bajar a desayunar nos dimos cuenta que todos ya se habían ido así que comimos con calma para luego irnos. Al llegar aproveché para poner a lavar ropa, mientras Luna jugaba en su cuarto limpié y lavé ropa para después irnos juntas al supermercado para hacer algunas compras. Al regresar me ayudó a preparar el almuerzo, al parecer se divertía bastante haciendo cosas en la cocina así que al momento de poner la comida en los platos nos divertimos decorándolos

- Mami... - levanté la mirada al escucharla - ¿Por qué no tenés novio? – la observé asombrada por su pregunta – ¿No te gustan los chicos como a la tía Vale?

- En realidad no sé si me gustan o no los chicos – conté con sinceridad

- ¿Por eso te casaste con mamá? – interrogó luego de beber de su limonada

Dulce AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora