SMALL REIGNS

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Feliz año a todos ustedes que lean esto, pásenla bonito.

Sin más aquí otro capitulo, espero sea de su agrado y cualquier error ortografíco mil disculpas.
Tratare de arreglarlo tarde que temprano :]

- No volverán a salir de nuevo!_ levantó la voz aquélla dulce mujer que miraba molesta a sus hijos, la pequeña Muriel dormía en su habitación afortunadamente.

Las mellizas junto a Gabriel tenían la mirada gacha y jugaban nerviosamente con sus manos.

Aziraphale había sido llevando con una de las criadas y un médico para que le revisaran, su madre casi se infarto al ver el estado deplorable en el que habían traído a su pequeño malvavisco.

Gabriel miraba al suelo mientras escuchaba el sermón de su madre junto con Michel principalmente, no sabían cómo pedirle perdón a su madre, sabían ambos que había hecho mal en excluir tanto a su hermano, ahora ambos pagan la cuenta por así decir.

- Están castigados, espero me perdonen mis niños pero esto es imperdonable, no quiero que ninguno salga más allá del pueblo._ sentenció la monarca finalmente, dejando a sus hijos mayores para ir con su pequeño, quería ver cómo estaba.

Uriel miro con furia a sus hermanos, era increíble como se comportaban ambos tontos y como los problemas parecían crecer si ambos estaban involucrados.
...

Zira miraba como su pierna era vendada suavemente, le habían puesto anteriormente algunos pequeños y delgados tubos de metal,no había dolido pero lo que si le dolió fue cuando el médico apretó su nariz y la acomodo.

Su pequeño grito rezonó por los pasillos, pero madame Tracy lo calmo dando caricias en sus rizos mientras limpiaba algunas lágrimas traicioneras.

...

Ahora estaba en su habitación, miraba a la nada, dejando que su cena se enfriase, su plato siendo iluminado por una pequeña vela de su mesita de noche.

No sé sentía bien, y no solo en en el ámbito de salud, se sentía decaído por alguna razón.

Giro a su costado, encontrándose una pequeña pila de libros, no tenía ganas de leer.

Decidió que mejor se acostaría, se sentía cansado, sus ojos aún ardían de tanto llorar y los sentía pesar, se acurrucó en las almohadas de plumas de su cama y se cubrió con una suave manta color crema.

Quería que su madre lo arropara pero no quería causar más molestias, asi que lo hizo el mismo. Apagando la vela en un suave soplido y se dio las buenas noches.

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- Crowley_

Escuchó su nombre en un susurro, gruñendo se cubrió la cabeza con su manta, para después sentir como jalaban de ella.

-Ngk!, Belz! Duérmete de una vez o le diré a papá!_ dijo molesto, era una maña que Belz lo levantará por cualquier cosa.

Volvió a cubrirse eh intentar dormir de nuevo.

- Tu viste al niño sierto? Describelo! Yo no alcance a verlo! Bastardo con suerte_ escuchó el berrinche de su hermana, haciendo que la imagen de aquel niño pasará fugazmente por su mente.

Ese cabello blanco como las nubes y esas mejillas como amapolas florecientes, tan rojas y suaves a la vista que daban ganas de apretarlas.

Con molestia se destapó, mirando a su hermana con el ceño fruncido en la oscuridad

Por lo poco que vio, le regreso la mirada con una sonrisa de victoria. Sabía cómo hacerlo hablar.

- No_ dijo finalmente para cubrirse de nuevo aún más molesto.