His Prisoner - Vkook

05

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Una vez obtuvo la información de la posible relación familiar entre el asesino y el líder de la banda, le comentó a su jefe, el director Choi sobre las posibilidades de que este hecho fuera real e inmediatamente se inició con una investigación de fondo que pudiera guiar hacia el asesino o hacia un posible familiar que sea miembro de la banda.

Si bien no contaban con información relevante, tras una semana de investigación encontraron información sin duda interesante. Al parecer Park Gae, quien sólo era un simple traficante de drogas, fue un familiar del líder, porque si bien los miembros que contaban con información relevante del caso o del asesino solían ser miembros de alto rango jerárquico, en este caso, el ahora fallecido Gae, contaba con información importante de este, lo cual era extraño teniendo en cuenta que era un don nadie dentro de la organización criminal.

Al inicio, la idea parecía un tanto descabellada, hasta que pruebas de sangre lo confirmaron. Hace unos años atrás, en un caso de asesinato por traición, se encontraron restos de sangre del líder Kyong tras una pelea directa con otro de los miembros de la banda, lo que Jungkook no sabía es que esas muestras de sangre se conservaron para investigar otros casos relacionados en donde pudieran implicar directamente a este criminal. Y fue esa muestra la que comprobó la conexión sanguínea entre ambos criminales.

Por ende, todos los ojos estaban centrados en criminales de apellido Jung. El problema es que en la prisión central no había nadie relacionado con la banda del sur que tuviera ese apellido. Por lo tanto, la investigación regresó a un ritmo lento e investigadores de otras prisiones decidieron colaborar buscando información en sus sedes.

Jungkook no podía quejarse, si bien el caso no estaba avanzando demasiado, sin duda había dado un gran paso con esa información, y por lo menos conocía el apellido del posible asesino de su amigo.

— Hey, Jeon, ¿mucho trabajo?

La voz de su colega Jimin le hizo centrarse en el presente.

— Ni que lo digas… tengo la jodida cabeza en todos lados.

Jimin se burla y se recuesta en la puerta de la oficina, suelta un suspiro cansado, porque seguramente el hombre también tiene mucho trabajo, al fin y al cabo es quien se encarga de cualquier tipo de investigación en donde esté implicado cualquier criminal que entra en la prisión. Y esta era la jodida prisión central, por lo tanto, el trabajo acumulado sería abismal.

Jungkook pensaba que el nivel de explotación al que estaba expuesto su colega era denigrante.

— ¿Es por Kim, verdad?

Levantó su mirada sorprendido ante la afirmación - no tan desacertada - de su colega y seguramente debió verse como un completo inútil que no sabe ocultar sus pensamientos porque Jimin se burló en su cara inmediatamente.

— No eres el único que ha perdido un poco la cabeza al hablar con él, Jeon — Jimin tomó asiento en la silla enfrente de su escritorio y se cruzó de brazos con la mirada perdida — Antes de ti han venido otros investigadores temporales también, pidiéndole ayuda a Kim para obtener información, pero él jamás lo ha hecho, nunca se abrió a ellos, pero tú… supongo que eres diferente.

Decidió fingir estar ocupado con algunos archivos sobre su mesa sin darle mucha importancia a los comentarios de Jimin. Sabía que era imposible que el hombre llegara a tal conclusión por la cual él estaba recibiendo información de un criminal del nivel de Kim Taehyung. Pero aun así, temía conectar su mirada con la de Jimin y que de alguna manera - sobrenatural - pudiera leer sus pensamientos.

Sí, Jungkook estaba sufriendo de problemas de pánico últimamente. Sentía que todos lo observaban o que de alguna manera conocían todos sus pecados. Y se arrepentía profundamente de sus decisiones, a la par que se sentía humillado.