•Nadie supo como explicar qué fue lo que le pasó a los 11 pasajeros que desaparecieron en el vuelo 828, para el mundo y el gobierno estadounidense era algo insólito.
Sin embargo, sólo los demás pasajeros sabían lo que habían vivido.
Esta historia se...
Pov Saanvi: Habíamos regresado hace ya una semana de nuestra luna de miel, habíamos extrañado a Cal, Olive y a Emma, pero de todas formas tratamos de disfrutar estos días para nosotros.
Estaba con Ben en el taxi yendo primero a nuestra casa para dejar las maletas y luego a casa de mis padres para recoger a Emma, en sí todo había sido muy bonito pero cansado a la vez.
Ben: Deberíamos repetir el viaje más adelante_ dijo tomando mi mano_ tal vez cuando Emma crezca un poco más, o viajando con ella para que conozca el mundo.
Saanvi: Sería muy bonito, así también para que se divierta, ya ves que nunca la hemos sacado todavía tan lejos_ le dije mientras veía por la ventana.
Me recosté en su hombro y me dormí unos minutos hasta que sentí que me susurró un "ya llegamos", lo ayudé a bajar las maletas y dejarlas en casa, ya después ordenaríamos. Ben salió a prender el auto y condujo hasta la casa de mis padres, bajamos y tocamos la puerta, mis padres nos preguntaron como fueron nuestras vacaciones y les respondimos que bien, que queríamos viajar de nuevo. Una vez adentro de la casa de mis padres, nos invitó un café con slgunos dulces, comimos mientras charlábamos y al final nos trajo a Emma que andaba en los brazos de mi papá.
Saanvi: Te extrañé demasiado_ le dije cargándola.
Ben: Hola princesa_ dijo dándole un besito en su cabeza.
Le agradecimos a mis padres por tomarse el tiempo de cuidarla, nos despedimos y nos fuimos de regreso a casa.
Ben me ayudó a desempacar todo mientras le daba de comer a Emma, ahora sí tocaba volver a nuestra realidad de nuevo.
[...]
Pedimos comida porque ninguno de los dos quería cocinar, el cansancio nos consumía, comimos mientras conversábamos de las cosas que hicimos en México, realmente fueron días increíbles, aunque empezamos un poco mal por el hecho de subirnos de nuevo a un avión, Mick se pasó todo el vuelo mensajeándonos y preguntándonos si aun seguimos en el mismo año, o si nuestro vuelo había desaparecido de nuevo, al principio no nos afectó pero por el clima malo de Estados Unidos, hubo una turbulencia fuerte que nos hizo a mí y a Ben imaginar lo peor, al llegar al aeropuerto de México le escribí a Mick que cuando a ella le tocara viajar, me las pagaría.
Fuera de eso, fuimos al hotel, que se encontraba frente a la playa; cenamos en un restaurante de la zona y pasamos el día en la piscina, ya al día siguiente fuimos a conocer un poco el lugar, compramos recuerdos, nos tomamos fotos juntos comimos de todo y lo que no dejamos de hacer, extrañar a los mellizos y a Emma. Ben pasó todo le viaje tomándome fotos y aunque no sé lo dije, me encantaba que todo le tiempo pasaba admirándome.
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Ahora que estábamos de regreso, Ben se acercó a mí con Emma durmiendo en su pecho y me miró sonriendo.
Ben: Sabes, el cumpleaños de los mellizos es en un mes, le escribí a ambos si deseaban que les haga una fiesta y me dijeron que sí_ me dijo_ ahora lo gracioso es que ambos tienen gustos diferentes y no sé como dividirme en dos.
