Capitulo 9

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Mañana sería día de acción de gracias, el cuál sería muy difícil al no estar con nuestra familia por primera vez.

Hoy me había levantado temprano, así que cuando todos llegaron a desayunar yo ya estaba terminando mi café.

-Buenos días.-dijo Nathan entrando a la cocina muy apurado con Jacky detras mientras yo me levantaba para lavar mi taza y un plato.

-Fueron a correr está mañana?-preguntó Katherine tras saludarlos.

-Si 4 kilómetros, y con jaqueca.-respondió Nathan

-Otra vez?

-Si, siempre me pasa cuando hace frío.

-Pues entonces tienes que comer algo.

-Oye, esto sirve.-dijo George a Katherine entrando a la cocina con dos ollas enormes.

-En eso vamos a marinar los pavos?-dijo Katherine.

-Pesan 7 kilos, no tenemos nada más.

Terminaba de lavar mi taza y plato cuando Isaac a mi derecha estiró su brazo para tomar algo a mi izquierda, por lo cual nuestros rostros quedaron muy cerca, me sonrió y se alejo, ya que estando todos en la cocina no podíamos hacer nada.

-Oye Isaac, tal vez quieras ponerte un abrigo más calido,-dijo George y Isaac lo miro mal-hay un 80% de probabilidad de nieve.

-Pero hay que sacrificar la comodidad por el estilo, y esta chamarra de cuero dice que soy duro, un galán con labia, me explico?-dijo Isaac y rodé los ojos tomando mi mochila y acercándome a Jacky.

-Las quemaduras por frio también son de galán duro, con labia, me explico?

-Sabes algo de mi papá? Sabes a qué hora llamará mañana?-dijo Lee a George.

-Si si, a las once en punto.

-Chicas quieren preparar algo para mañana? Aquí todos hacen una receta para la cena de acción de gracias.-dijo Katherine tras acercarse a nosotras.

-Si hay alguna tradición de los Howard podemos comprar los ingredientes o sus comidas favoritas.-dijo George y Jacky y yo nos miramos.

-Pasamos, si no les molesta.-dije y Jacky asintió y subimos.

Jacky y yo ya habíamos hablado sobre acción de gracias y lo más probable era que buscaramos alguna excusa para no estar para cenar ya que ninguna se sentiría muy cómoda ese día.

(....)

Guardé unos libros en mi casillero y cuando lo cerré lo primero que vi fue la cara de Isaac a centímetros.

-Idiota, casi me matas del susto.-dije llevando una mano hacia mi corazón.

-Lo siento linda,-dijo riendo-como estás?

-Bien, supongo, que tal tu? No tienes frío duro galán con labia?

-Lo memorizaste.-dijo mientras en su rostro se formaba una gran sonrisa.

-Claro que no, lo recordé por casualidad.-dije y comenzamos a caminar.

-Si claro, hablando en serio linda, cómo estás con lo de mañana?

-Estoy.. lo mejor que se puede estar si? Solo me gustaría olvidar el día de acción de gracias.

-Si quieres hablar.. hoy o mañana, o si en cualquier momento de la cena quieres irte dímelo y hablaré con mis tíos.

-Lo dudo, pero muchas gracias, de verdad.-dije deteniendome y volteando hacia el y el hizo lo mismo.

-No tienes que agradecerme nada linda.

Mi vida con los chicos Walter ; Isaac García Donde viven las historias. Descúbrelo ahora