#' ‹ 6 › | ¿ Una cita ?

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—Jay..— miro nuevamente a Jay, llamandolo por quinta vez, el más grande quedó confundido con un enorme sonrojó. —“¿...?”—

—¡Oh!, ¡Tienes una cita!— le pregunto al pelirubio al verlo vestido tan elegantemente, el peli-nergro lo había descubierto, especialmente iba a tener una cita con la persona que tanto le gustaba, Jay asintió.

—¿puedo preguntar?— el peli-negro alzó su vista para ver los lindos cabellos rubios qué ocultaban sus misteriosos ojos —¿?— el pelirubio inclino su cabeza, hasta qué volteo a ver hacia otro lado el cuál Daniel no presto mucha atención a su acción.

—¿Quien es esa persona en espec-?— este no pudo terminar de hablar ya que fue jalado con fuerza por las gran manos de Jay, Jay fue corriendo a un pequeño parque de juegos.

—¡Oh, j- Jay!— este no supo cómo reaccionar al ver que era jalado por su “Amigo” a un parque de diversiones. —¿Qué pasa ja-?— fue interrumpido ya que el más grande lo sento en los pequeños columpiós oxidados.

—¿J- jay?— este vio al pelirubio Pensativo mirando hacia un pequeño restaurante de hamburguesas. —ja-— denuevo no puedo terminar de hablar, el pelirubio ya se había ido hacia la dirección del pequeño restaurante de hamburguesas, quedó un poco confundido, se preguntó inocentemente quién realmente era la cita del chico rubio extremadamente guapo. (Daniel date cuenta)

esté fue interrumpido de sus pensamientos por un pelirubio alto Llegando con una delicosas hamburguesas a la vista, y unos pequeños basitos con jugo de naranja, todo se veía delicoso, Jay se sentó en el pequeño columpio se yacia cerca del columpio el cuál permanecía Daniel, este se sentó viendo cómo Daniel lo miraba haciendo qué este se sonroje y le diera una hamburguesa a Daniel.

Daniel miro la hamburguesa la cual era sostenida en manos del pelirubio, la acepto sin pensar aún qué estuviera confundido por las acciones de Jay. —¡Muchas gracias Jay, eres muy amable!— dándole un pequeño bocado a su hamburguesa. —está delicosa.— hablando con la boca llena con pedazos de una combinación de pan y trozos de carné, el cuál Jay sonrió, se veía tan lindo y tierno comiendo tal hamburguesa, le debería de tomar una foto de recuerdo.

—Oh, Jay.— el pequeño hablo nuevamente con comida en la boca, se veía tan gracioso, pensó Jay, hasta que el pequeño le preguntó ; “¿No te ibas a una cita?”, él peli-negro lo miro confundido, el cuál el más grande miro hacia otro lado y agarrar su hamburguesa para darle un gran bocado, lo qué no entendía, que ese mismo lindo peli-negro, con una cara tallada por los mismo angeles, lindo, hermoso, era su cita, el cuál Daniel no entendía quedando más pensativo y confundido de lo normal.

Los dos comían esa rica hamburguesa, en un desolado parque de diversiones, ya era tarde, Daniel ya debía de irse, este se asusto y recordó que mañana tenía que prepararse para la institución ah Igual que Jay, el cuál no parecía pensar mucho en éso, pero de éso, además tenía qué ir a su nuevo trabajo, no podía faltar, el pequeño se preocupo, haciendo que este de pare del pequeño columpio el cuál estaba, todo esto visto por Jay.

—Jay, ya me tengo qué ir, es muy tarde, a igual qué tú, mañana tenemos clases. — dijo algo preocupado, Jay agachó la cabeza un poco, al ver qué su lindo peli-negro ya iba. —¡Bien!, ¡Hasta pronto Jay, nos vemos mañana!— este le dedicó una pequeña sonrisa, haciendo que el otro se sonrojase, el pelirubio no quiere que Daniel se vaya aún.

Daniel estaba apuntó de irse, pero se detenio al sentir como era sostenido por su pequeña mano, Daniel quedó confundido, este se volteo a ver a Jay, el cuál este se paró y abrazó fuertemente al pequeño haciendo que se sorprendiera y se sonrojase un poco. —¿J-jay?— el peli-negro tartamudeo algo nervioso, hasta que fue separado por el rubio. —¿...?—.

—Oh, no, no es necesario, Jay.— este le sonrió al más grande haciendo que denuevo el gran pelirubio se sonrojara y volteara ver hacia otro lado, este solo asintió y volvió a abrazar al pequeño con un alto sonrojó y se apartará rápidamente, el más pequeño rio, hizo qué Jay explotara, hasta su pequeña risita era preciosa, era perfecta, Jay le dedicó una Sonrisa. —¡Hasta pronto, Jay!—.

Jay solo pudo despedirse del Peli-negro con una mano, moviendo hacia un lado y otro, vio como el peli-negro se desvanecía por la calle, este agachó su cabeza y se puso a pensar, nunca olvidaría esta cita con lindos momentos con la persona que le gustaba, Danielito, su querido Danielito.




















ya era de mañana, parecía ser aproximadamente cinco y media, era un Daniel medio adormilado, mientras esté tallaba sus manos en sus pequeños ojitos entré abiertos, era temprano, obviamente tenía tiempo para prepararse eh ir al instituto.

este se quitó delicadamente su pequeña sábana el cuál cubría su cuerpo delgado, bajando sus pies y tocando el suelo, este se estiró y bostezó haciéndolo parecer muy tierno, se dirigió con sus ojos de sueño y su pelo despeinado al pequeño baño del departamento para realizar su Aseó personal, como lo hacía diariamente, después de ésto apareció ya un Danielito recién bañado, con el cabello húmedo y aún despeinado con una toalla cerca de su cintura y una tocando su pelo pará que se cercará, se podía resaltar su pequeña cintura y una pequeña y ancha caderas del peli-negro.

Después de cercarse, saco el uniforme de la institución, cambiandose, ya listo se arregló su pelo desordenado, ya listo, fue directo a ver la hora, el cuál marcaba las ; 6:51, le quedaba tiempo de desayunar, a sí qué se preparó unos rico y deliciosos panqueques con miel y un café, ya después de terminar, se dió cuenta de qué el reloj que le regaló su madre marcaban las 7:24, ya era hora de irse, agarró su mochila, se vio en el espejo por última vez arreglandose, para terminar saliendo de su casa a dirección de la institución Jaewon.

cómo era de costumbre, estaba rodeado de lindas chicas, alrededor parecían ser chicas encantadas por la belleza de Danielito, el cuál las ignoro y saludo por educación, yendo a la entrada del instituto, ya dentro comenzó a buscar su salón, al subir la escaleras se encontró con alguien, era Jay el cuál tenía audífonos puestos, no se dió cuenta de que Daniel estaba atrás de el cuál este entro al salón, escena vista por Danielito que ya estaba entrando al salón, las chicas comenzaban a chillar por él este solo saludó y fue a sentarse, se dió cuenta en algo en particular, al lado de su asiento estaba ... Zack.

este trago duro, pero no tenía más opción de sentarse a su lado, recordaba ese asiento vacío el cuál le pertenecia a alguien, Pero no esperaba qué fuera Zack, este dejo sus pensamientos viendo cómo Zack lo miro intemidantemente, clavándo sus ojos en Daniel, el cuál nerviosamente miro hacia otro lado haciendo qué el otro sonriera ; ésto será divertido. pensó Zack.

para mala suerte todo esto era visto por un Jay celoso.



Continuará.

𝐁eautiful || Lookism.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora