Decisiones apresuradas

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Lena

Estaba en un lugar sumamente obscuro y mi mente estaba hecha un lio, de repente unas luces se prendieron de manera repentina alrededor de mi y después de manera automática otras se encendieron,  las cuales apuntaban directamente a mí, mis nervios eran masivos ¿Dónde estaba?

Mi piel empezó a erizarse… sentía miedo y mi cuerpo me decía a gritos que corriera con todas mis fuerzas y que nunca parara, que el peligro se acercaba y que no tendría oportunidad de escapar cuando eso apareciera, pero yo ya no quería ser cobarde.

El lugar era grande, como si estuviera varada en medio de la nada, como un estacionamiento enorme, no podía ver nada a los alrededores y eso me aterraba cada vez más, solo podía ver las lámparas colocadas en el suelo de manera perfecta en un círculo alrededor de mí.

Y lo que estas alcanzaban a iluminar en su paso, pero no eran suficientes para ver más, más afuera que ese círculo a mi alrededor.

Las luces empezaron a parpadear cada vez más rápido, hasta desvanecerse, pero no se apagaron, mi corazón se estabilizo poco a poco pensando que todo volvería a la normalidad, pero no fue así, las luces crearon una sombra, pero no eran su propia sombra si no la de alguien más, acompañada de más que claramente conocía.

Lena veía morir lentamente a esas sombras… aunque ella sabía que no eran simples sombras, morían lentamente gracias a una terrible guerra, escuchaba voces del pasado que la atormentaban, estas pedían ayuda de manera desgarradora y aunque ella intentaba ayudar, cuando se acercaba de manera desesperada las sombras se desvanecían como si se tratara de un oasis.

¡Basta! – mi voz era frágil y mi corazón estaba acelerado y no quería seguir con recuerdos que nunca se desvanecerían – ¡Basta!¡Basta!¡Basta ¡Basta! ¡Basta! – mi voz tomo fuerza con cada palabra hasta gritar y quedarme sin voz, apretando fuertemente mis puños hasta enterrarme las uñas en las palmas y cerrando mis ojos.

De repente desperté con el corazón acelerado, sintiendo un peso mortal en su pecho y unas ganas inmensas de llorar, y todavía podía sentir como ese sueño se aferraba a su conciencia de manera aterrorizándola internamente.

Los espejismos de lucidez se desvanecieron, como estrellas fugaces en la noche, la razón es como una mariposa enferma, atrapada en la red de la locura, junto con todos mis miedos y dolía saber que esa mariposa preferiría la red de la locura a seguir volando con el riesgo de que un depredador más fuerte la matara.

Mi teléfono empezó a vibrar de manera repentina sacándome de mis lagunas mentales de forma rápida asustándome levemente, tome el celular sin pensar mucho y conteste – Bueno – dije esperando una respuesta rápida, pero no fue así – Bueno – trate nuevamente después de no tener ninguna respuesta en un largo tiempo.

Trataba de entender ¿Por qué llamaban? Era un numero desconocido, pero internamente sabía que era de una persona que conocía muy bien.

Hola… hija… - hubo una pausa eterna entre cada palabra y eso me torturaba y ella lo sabía, mi corazón se detuvo por un momento para empezar a palpitar de manera rápida y con fuerza, sabía que era su voz y era ella, pero me negaba a aceptarlo así que colgué apresuradamente y traté de calmarme y a mis recuerdos tanto como mis miedos.

Todo esto para después ignorar el hecho de que mi madre estaba torturándome nuevamente. Decidí relajarme y tomar una ducha con agua caliente, mi cuerpo necesitaba sentir algo de calor, comí un tazón de fruta y un café, me arreglé de manera cómoda, no me importaba en este momento lo que los demás empezaban a pensar de mí.

Sali de mi departamento y llamé a Sam le pedí que me viera en mi oficina, en verdad necesitaba hablar con alguien y ella es una de mis mejores amigas sé que me escuchara y no me juzgara, decidí caminar un poco hasta llegar al trabajo, no me quedaba demasiado lejos y aunque así fuera yo necesitaba un tiempo para mí, un tiempo para calmar mi mente, pensamientos e ideas.

Tomé aire fuertemente en mis pulmones para después soltarlo de manera fuerte, después de caminar de manera calmada pude llegar a la entrada de ese edificio, y ahora que lo podía apreciar a más detalle era enorme, masivo si lo comparabas con cualquier persona, y me gusto sentirme dueña de algo así, aunque… no era de lo único que quería ser dueña.

Me dispuse a entrar de manera más firme, tomando el elevador más cercano y esperé pacientemente a que todos llegaran a su destino, ya que mi oficina estaba en el último piso, en lo más alto, y solo los mejores especialistas en ciertas áreas tenían acceso a esta.

Llegué y pude colocar mis cosas de manera cómoda en mi escritorio y empecé con algo de trabajo que había dejado para hoy.

Después de unos 15 minutos mi secretaria me llamó y me informo que Sam ya había llegado.

-Déjala pasar Jess

-Si señorita Luthor

Se abrió la puerta y Sam entró con una gran sonrisa y una bolsa de donas en la mano y comenzó a caminar hacia mi.

-Hola Lena perdón el retraso el tráfico era enorme

-Tranquila Sam - me levanté de mi asiento y fui directo a ella nos dimos un gran abrazo de saludo y luego la invité a sentarse en el sofá.

-Te traje tus favoritas donas de fresa- dijo sacando la dona - además sé que no has estado desayunando muy bien que digamos así que unas donas son la salvación-termino de decir y me la entrego.

-Gracias Sam, hoy he estado demasiado inmersa en mis pensamientos que se me olvido desayunar algo- dije y luego comencé a comer la dona.

-Para eso me tienes para darte una dona cada que lo necesites-dijo y yo le sonreí en verdad agradecía tener una buena amiga como ella- pero dejando de lado las donas ¿de que necesitas hablar? En la llamada te escuchabas algo apagada y triste. -dijo un poco preocupada.

-Es solo que estoy pasando por muchas cosas en estos momentos y en verdad estoy cansada de esta situación-dije frustrada, en verdad que había cambiado tanto desde que Kara se fue. -siento que he sido una persona diferente a la que era antes. -dije desanimada.

-Y que es eso que tanto te atormenta Lena? Solo quiero comprender la situación para poder ayudarte- dijo tratando de comprenderme, pero como le digo que me esta afectando que kara desapareció por culpa de mi hermano y no sé si la volveré a ver sin revelarle que Kara es supergirl.

-Es que no lo sé, creo que me está empezando a doler mi realidad sabes, nunca tuve una buena relación con mi madre, mi padre murió cuando era solo una niña, el hermano que tanto quería se convirtió en un psicópata vengativo que no reconozco, mi infancia no fue la mejor nunca me sentí 100% parte de la familia por mi madre y esa misma me llamo hoy en la mañana pero le colgué.-dije triste , una parte de eso siempre me dolió aunque en estos momento eso no me importaba a comparación de la situación con Kara, aunque quisiera Kara debe ser quien le revele su identidad no yo.

-Oh Lena tal vez no tuviste la mejor familia e infancia, pero todos tus amigos somos tu familia y siempre querremos lo mejor para ti, siempre te protegeremos y estaremos para ti cuando nos necesites. -dijo mientras me abrazaba con mucho sentimiento y mis lagrimas empezaban a salir poco a poco.

Después de romper el abrazo Sam me quito las lágrimas que escurrían por mi rostro y me sonrió.

-Sabes Lena tu eres brillante, eres gentil y tienes un alma hermosa espero que lo sepas. -dijo y yo solté una pequeña risita llorando un poco más y volvió a abrazarme.

-Eso me lo dijo Kara, parece que se pusieron de acuerdo. -dije tratando de controlar mi llanto y sentí que Sam se rio un poco.

-Ya sabes, las mejores amigas siempre sacamos lo mejor de nuestras personas favoritas. -dijo mientras rompía el abrazo y después me empezó a mirar con cierta curiosidad - ya lo sabe Kara? – dijo y yo me tense, pero trate de relajarme rápidamente antes de que preguntara algo de lo que yo no pudiera darle respuesta.

-No, ella no lo sabe aun no se lo he dicho. – dije tratando de no llorar

-Y no le vas a decir? Digo si no quieres decirle no te voy a obligar a que le expreses tus problemas-dijo de manera comprensiva - pero conociéndola sé que ella está muy preocupada por ti es un milagro que no este aquí tratando de averiguar que tienes. -dijo y no sabía que decir, hablar de ella es un tema doloroso para mí porque el pensar que está en una tierra perdida y lo peor es no saber si está viva.

-Si yo creo que le diré en unos días. -dije de manera apagada mirando al suelo
-Está bien tú sabes que puedes confiar en nosotras, ese Golden retriver te adora y quiere lo mejor para ti igual que yo, además me alegra que te hayas desahogado conmigo porque significa que me quieres más. – dijo de manera victoriosa y yo rodee mis ojos.

-Las quiero a las 2 por igual Sam son mis mejores amigas, además no le he dicho porque no la he visto. -le dije para que no siguiera que la quiero más a ella.

-Bueno yo tampoco la he visto desde que llegué a la ciudad, Ruby le llamó cuando paso lo de Alex, pero nunca contesto-dijo pensativa y yo me puse nerviosa- ¿Sabes dónde está? - me pregunto y mis nervios aumentaron y empecé a pensar en que decirle.

-Bueno ella fue con Cat Grant a hacer un reportaje muy importante y nos dijo que tendría apagado el celular para concentrarse mejor en su reportaje y no nos dijo cuándo va a regresar -dije tratando que no se escucharan mis nervios.

-Oh bueno eso lo explica todo, bueno si te dice cuándo va a llegar me avisas para invitarla a mi casa Ruby la quiere ver y de paso podemos juntarnos las 3 como antes. – dijo y yo le asentí.

Después de un rato de actualizarnos un poco más ya que la otra vez no tuvimos tanto tiempo para terminar de hablar porque nos embriagamos Sam se fue y yo seguí con el trabajo, tenía planeado terminar todo el trabajo de hoy ya que me retrasé al estar con Sam y había dejado algunos documentos sin revisar por no dejar de pensar en Kara , pero mis planes después de unas horas se vieron interrumpidos por mi celular vibrando, dando a conocer una llamada inesperada de Brainy, pero muy reclamada por mí.

Lo tome de manera rápida contestando – Hola Lena – Su forma de hablar era muy emocional y más para un coluano como el, aunque trataba de ocultarlo – Hola Brainy – me apresure a decir con ansias de tener más información.

Creo que debemos discutir un asunto importante… lo antes posible – tome mis cosas rápidamente, sabia a donde ir y no necesitaba más información, quería cualquier cosa sobre ella y Brainy sabia eso.

Sali de manera apresurada con mi corazón acelerado y mi cuerpo en estado de alerta, esperaba nuevas noticias sobre ella con la esperanza de saber más cosas, aunque probablemente aun tarde mucho para saber realmente algo real sobre ella.

Llegue a la torre en donde Brainy esperaba mi presencia con ansias… aunque no totalmente de las buenas – Que bueno que llegas… necesito mostrarte algo de manera desesperada – dijo el tratando de sonar tranquilo, pero no lo lograba del todo.

Lena – llamo mi atención como si él fuera mi profesor y yo su alumna más problemática, dirigí mi atención totalmente a él.

Descubrí algo que realmente… yo, no sé si esto sea algo bueno, en realidad creo que realmente es catastrófico – su control iba en picada cada vez más.
Lena… la tierra en donde esta ella debería no existir – soltó sin previo aviso mientras que el trataba de calmarse, pero nada funcionaba - ¿De qué hablas? – dije tratando de seguir su paso, aunque eran cosas impredecibles y casi imposibles y más cuando mi mente estaba totalmente nublada.

Estuve estudiando cada tierra… tanto antes como después de la crisis… debido a la crisis de tierras infinitas y el lugar de cada una cambio, dejando solo unas pocas después de todo – dijo suspirando pesadamente tratando de buscar un descanso rápido.

Antes de la crisis había un multiverso y ahora… después de ese acontecimiento solo sobrevivió un universo, simplificando todo es este solo universo todos los multiversos que desaparecieron con anterioridad, haciendo cambios masivos, como que Lex era bueno y muchas otras cosas, cambiando, aunque en lo mínimo cada una de nuestras historias – Brainy se movía de manera desesperada tratando de seguir explicándome
Sus manos jugaban de manera inquietante.

¿A qué te quieres llegar con esto? – mi duda era evidente y mi ansiedad crecía a cada momento. El me miró fijamente y antes de proseguir aparto la mirada sin poder sostener la mía como si todo esto fuera su culpa.

La tierra en donde esta nuestra Supergirl no existe… o más bien no debería existir, después de la crisis, las tierras que sobrevivieron son específicas, y cada una reconoce a las demás, como si estuvieran conectadas, pero esta… esta es como una anomalía, se que cada tierra vibra a una frecuencia diferente, pero rápidamente de distinguir… pero esta tierra, esta tierra en específico es simplemente una aberración – su manera de contar era desesperada y eso me llenaba de nervios.

Me estás diciendo que esta tierra… es como una “Tierra fantasma”, ya que teóricamente no debería haber sobrevivido y esto complique aún mucho más las cosas – dije tratando de simplificar todas sus palabras dichas con anterioridad. 

-Si – me miro brevemente – Pero… ya encontré la frecuencia a la que vibra esta “Tierra fantasma” – me sonrió de forma ganadora y mostrándome en una computadora cercana a nosotros a que frecuencia exacta vibraba.

-Solo falta hacer que la nave vibre a esa frecuencia para poder entrar a esa tierra y sacar por fin a nuestra Supergirl – dijo aun ajustando algunas cosas en la computadora y mostrándome posteriormente.

-Pero, iré solo, si por alguna razón la nave falla o yo fallo al hacer que vibre a esta frecuencia… sería catastrófico y muy probablemente alguien que no sea como yo muera en el proceso y no lo permitiré por que hay un margen de error del 78.36% - me negaba rotundamente hacia la idea de esas cosas.

-Quiero tomar ese 21.64% - lo mire firmemente pero el enloqueció de manera repentina.

-En serio quieres hacerlo– me miro como si fuera una niña indefensa, pero yo no lo era y en el fondo él lo sabía
– Si – dije bajando la mirada y pensando en mil cosas.

-Estas… realmente segura Lena sé que en verdad la quieres de regreso y quieres verla, pero corres demasiado peligro, si haces esto tal vez nunca vuelvas a ver a Kara – el trataba de buscar mi mirada de manera sutil, pero yo trataba de ignorarlo lo más posible, aunque mis nervios crecieran de manera descomunal y mis palabras no sonaban del todo razonables, aunque internamente juraba que sí.

-Si, estoy segura. – dije de manera firme permaneciendo en la misma postura
– Parece que no – dijo de manera firme para después seguir, pero no se lo permití.

– Lo hare – dije mirándolo fijamente para comprobar si tal vez decía la verdad.

-Lena, habrá peligros por favor entiende, no solo al tratar de entrar si no más riesgos aparte de una forma masiva, el tiempo, el lugar, las cosas que pueden pasar potencialmente… ni siquiera sabemos si kara sigua viva – él hablaba de una manera desesperada, pero en este punto, ya no me importaba.

-No me importa nada cuando se trata de ella – y era cierto y lo mejor es que pude ver en su cara que también lo sabía, no importaba que tanto yo o ella metiera la pata, siempre la quería poner a salvo, aunque muchas veces era todo lo contrario.

-Y ¿Qué hay de ti? – lo corte antes de que dijera cosas que muy probablemente se arrepentiría pero que al final de todo eran verdad – No soy nada sin ella… lo hare y no me importan los riesgos, menos cuando se tratan de ella… - mi cabeza trataba de no ceder ante la idea que debía quedarme porque era lo mejor, aunque yo sabía que no.

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Bueno aquí algo despues de un rato desaparecido por qué fui el duende de Santa y ayude mucho (perdón si no les lleve a su casa, es que andan leyendo cosillas)

Bueno nos vemos (o ¿no?)

Gracias por leer renacuajos ♥️.

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