Aún no es tarde

Tratando sin tratar

Continuamos abrazándonos durante un rato, hasta que ella se durmió en mis brazos, y cuando su respiración era totalmente leve lo cual indicaba que se había quedado dormida, la acomodé en la camilla retirándola de mi cuerpo y decidí salir a tomar un poco de aire fresco.

Afuera solo había ruido, demasiadas cosas a mi alrededor que no quería ver ni escuchar, así que me dirigí rápidamente a la salida tratando de tranquilizarme ¿Ella se me había declarado? ¿Que se supone que haría con eso? ¿Como seguiríamos siendo solo amigas después de esto? Ni siquiera sé cómo me siento, mis manos están mucho más frías de lo normal, pero por dentro estoy hirviendo.

Decidí dar vueltas y tratar de encontrar respuestas, respuestas que tal vez nunca serían respondidas ¿Por qué Kara no reaccionó? ¿Le costaba tanto salvar a su Lena? Claro después de todo era una cobarde, esa era mi única respuesta.

Estoy segura de que si mi Lena estuviera aquí tendría todas y cada una de las respuestas que necesitan mis preguntas, pero creo que eso llevará tiempo, tiempo que no tengo por qué cada día que paso en este lugar mía esperanzas de salir de este son más escasas y mi mente es una jungla llena de ideas que nadie quiere tener.

Me puse a analizar cada cosa, acción y palabras no solo que yo dije si no que Kara hizo, al estar cerca de ella me siento tan abrumada, siento que todos mis malos pensamientos quieren salir a la luz y destruir todo lo que está en mi camino, pero sé que ella no es así porque yo no soy así, y hay algo en ella... lo sé, su manera impulsiva de tomar las cosas y sus arrebatos, como me atacó sin si quiera saber que pasaba, solo por el simple hecho de estar cerca de Lena.
Se que la única cosa capaz de hacerme sentir tan abrumada es la Kriptonita Roja, sabía que esta no es cualquier kriptonita, ya que ataca de manera más lenta y no solo nos lastima si no que nos da placer lastimar y destruir todo a nuestro paso haciéndonos monstruos.

Esta kriptonita es diferente, probablemente sintética, aunque un experimento fallido ya que son más leves los síntomas que tiene Kara, está no se puede absorber solo tienes que estar en contacto con ella para que los síntomas se presenten y sigan aumentando, ya que si me acerco a ella puedo sentir todos los signos al estar en presencia de esta kriptonita pero cuando me alejo de Kara vuelvo a ser la de antes.

Esto es malo ya que si mi hipótesis es cierta va a llegar un punto donde Kara explotará y no podrán controlarla, ella causara mucho daño a todo lo que se encuentre en su camino.

Seguía preguntándome cosas, pero tenía la mente nublada, me sentía cansada emocionalmente por todo y nada, así que decidí regresar a la habitación donde estaba Blair, por suerte seguía dormida y por todo lo que había pasado creo que merecía un buen descanso después de todo.

Decidí hacer lo mismo sin pensar más y atormentarme.

Cuando desperté a la mañana siguiente Blair seguía dormida así que decidí esperar a que se despertara, admiré su manera tan tranquila de dormir como si nada ni nadie la pudiera atormentar y era algo admirable porque en el fondo yo siempre sentía miedo de todo, todo lo que pasaría por cualquier mínima cosa, pero en el fondo solo me tenía miedo a mí ya que yo era la responsable de mis propias decisiones como cuando le oculte ser Supergirl a Lena y borrarle la memoria a Alex.

De pronto Blair despertó, solo abrió sus ojos lentamente casi sin moverse como si no quisiera despertar -Hola- dije mirándola mientras que sus ojos se acoplaban a la luz que emitía la pequeña ventana a un costado de nosotras y su mente se despejaba.

Me miró frunciendo el señor y sus mejillas estaban un poco rojas mientras que se removió un poco más brusco como si quisiera quitarse algo de encima.
Hola - por fin dijo mirándome a los ojos y yo le dediqué una leve sonrisa - Odio la luz, soy un vampiro, ciérrala - reclamo ella tapándose la cara con la sábana y quejándose mientras que yo me dirigía a la ventana y la cerraba - ¿Ahora eres un vampiro? - module con sarcasmo y ella salió de debajo de la sábana  - Siempre lo fui, solo que no te diste cuenta tonta – me enseño su lengua, me sorprendió su respuesta pero después de eso quería de regreso a mi amiga y eso me alegro - debí suponerlo, tu piel pálida, suave y perfecta mmm y esos ojos color todo y nada - le seguí el juego.