Collecting Hearts

🫀¹³🫀The beginning

Capítulo 13: El principio

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Lauren POV.

Nuestra conversación fue interrumpida por el sonido del timbre. Miré a Camila una vez más y me dirigí hacia la puerta.

Cuando la abri, una sonriente Stefanie apareció al otro lado, devolviéndome la chaqueta que había olvidado en su casa.

— Lo olvidaste en casa. Lo traje con la esperanza de continuar lo que empezamos.

— ¡Gracias Stevi! ¡Pero eso es para otro día! — Dije dándole un beso en la mejilla. Nos despedimos y cerré la puerta.

Cuando me di vuelta, no tuve tiempo de decir nada, Camila avanzó hacia mí, golpeándome los brazos, completamente fuera de sí.

— ¡Espera, deja de hacer eso! Tu mano pesa!

— ¡Hiciste todo este show porque sabías que me acosté con MI NOVIO mientras tenía sexo con esta chica! ¡Hija de puta!

— ¡¿Qué?! Ya te propusiste esa intención, o has olvidado que dijiste ¿"Voy a obtener respuestas, pase lo que pase"? Yo también fui a buscar respuestas! — dije alzando la voz, ahora también irritada.

— ¡Sólo si tus preguntas estuvieran atrapadas en el coño de esta rubia
asquerosa!

Su irritación se volvió cómica ante esa respuesta, y no pude contener la risa, lo que la enojó aún más, abofeteándome nuevamente. Rápidamente la agarré por las muñecas y la lancé contra la pared, inmovilizando su cuerpo con mi cintura mientras ella luchaba, tratando de liberarse de mi agarre.

— ¿Crees que sólo tú puedes tener sexo, Camila? — Pregunté con mi rostro cerca del suyo, presionando con fuerza su cuerpo para que no pudiera escapar.

Ella perdió el habla, mirándome con los labios entreabiertos, su respiración agitada hacía que su pecho subiera y bajara, enfatizando el escote de su vestido negro.

Sus ojos brillaban de lujuria. El impulso energizante que corria por mis venas era más fuerte que yo, la besé nuevamente, esta vez no insistí en ser delicado.

La besé fuerte, empujando mis labios hacia los de ella, envolviendo mi lengua alrededor de la de ella en un beso voraz, haciéndola gemir por el corte.

Aflojé el agarre de sus muñecas, pasando mis manos por su espalda,
apretando su trasero, pero ella me empujó con todas sus fuerzas, pero al
contrario de lo que parecía, quería más.

Cortó el espacio entre nosotras y me besó nuevamente, sosteniendo mi nuca con una de sus manos, apretando mi cintura con la otra.

Cuando su beso me derritió por
completo, me empujó una vez más.

Fruncí el ceño sin entender si ella me
quería o no, estaba completamente enojada, no la reconocía. La dulce
mujer a la que estaba acostumbrada desapareció, y frente a mí estaba una
nueva Camila.

Sus ojos expresaban deseo y una sonrisa en la comisura de su boca demostraba que era plenamente consciente de ello.

Su boca hinchada me llamó la atención y cuando intenté besarla de nuevo
me abofeteó, haciendo que mi mejilla estallara.

La miré incrédula, tomándome la cara con la mano, y ella se acercó desafiante:

— No vuelvas a gritarme nunca más, Lauren — Me tomó con un beso
impresionante, empujándome por los hombros, haciéndome sentar en medio del sofá de mi sala.