04

69 7 0
                                    

Kokichi Oma••×

Estaba en una habitación, encerrado. Mire a los lados a ver si había alguien en ese lugar oscuro y húmedo, pero se me hizo difícil ver, ya que una oscuridad infinita lleno la habitación. Solo escuchaba el sonido de mis respiraciones y sentía mi cuerpo adolorido, cansado y enfermo... Solo tres días... Tres más... El sufrimiento acabara pronto... Eso espero, estoy harto de sufrir aquí, ver a Kaede llorar y ser torturada por los tormentos de Shuichi. El solo recordar ese nombre me daba náuseas... “Shuichi Saihara” El hombre que arruinó mi vida por completo. El hombre que hizo todo por un experimento. El hombre más horrible y asqueroso que el mundo trajo a la tierra.

Sus comentarios tan horribles hacía mí... Solo hacían que empeorará mi salud y mente, ni siquiera pensar con claridad podía hacer... Me siento mal.

Mi mente se estaba deteriorando cada vez más rápido. Esos pensamientos, es locura interna por querer salir. Saber que no hay nadie que me espere afuera ni dentro de esto... Mi esperanza se iba desvaneciendo, estoy solo y siempre lo estaré... Shuichi dijo que iba a ir a la cárcel pronto y si eso no pasaba se entregaría... En esta terrible historia hay contradicciones... Ya no puedo con esto... ¿Será que Shuichi planeo todo? ¿Será que lo invento para llevarme a la locura?

Solo puedo decir... ¿Adiós?

—Kokichi, me alegra que hayas despertado...— una dulce voz se escuchó cerca mío y una mano tocó mi mejilla de forma delicada. Por primera vez en mi vida recibí tal afecto... Se sentía tan agradable... Quería que siguiera... Esa voz era fácil de reconocer, al menos algo me daba esperanza... Kaede...

—Hola Kaede... ¿Estás bien? ¿Shuichi te hizo algo?— Hablé con voz calmada tratando de esconder el dolor de mi cuerpo.

—No, la verdad no. Solo me trajo hasta aquí y me habló un poco sobre algunas ubicaciones sobre cámaras y micrófonos. Dijo que si intentamos romperlos el vendrá y se encargará de nosotros antes de su experimento... Las cámaras y micrófonos están ubicados en las esquinas del techo... Dijo también que nadie más podría venir además de él y creo que ya sabes, hablo un poco sobre su experimento y cuánto ansia por ver si funciona...— Kaede hablo en voz casi baja. Apenas me dijo las ubicaciones de las cámaras empecé a mirarlas a cada una de ellas, aún sin luz y sin nada se lograban ver algunas formas sobre cámaras y micrófonos...

—Ya veo... Gracias, ¿Sabes si el vendrá desde ahora? Quiero decir, si es que el vendrá mañana o en un rato...—

—Oh, sobre eso, él dijo que no vendría más, solo estará vigilando las cámaras y micrófonos para ver si pasa algo...—

—Entonces se podría decir que ya no hay nadie que nos haga daño...—

—¡Podremos completar el experimento!—

—Oh, es verdad... ¿Has comido algo?—

Uh, no... Pero ya me acostumbré a eso... No como mucho—

—¿Tienes problemas alimenticios, verdad?— Hablé en voz casi alta para después mirar a Kaede de arriba a abajo. Mi teoría era cierta. Ahora recuerdo que Kaede se veía mal desde el primer día... Ahora mismo ella se ve peor, pero no demuestra hambre a diferencia de mí...

—Mgh-Uhm...— Kaede hizo un ruido de afirmación con su boca. Me sentí mal por ella. No quise tocar el tema ya que ella se podría incomodar más con eso...

—Uhm... Lo siento por eso...—

—Esta bien, no te preocupes... Shuichi me preguntó lo mismo antes de venir aquí...—

—¿Disculpa?— Eso era... Esa era la ventaja que Shuichi me dió... De eso hablaba.

—Oh, sí, él pregunto eso...—

No le dije nada a Kaede, si lo hacía, lo más probable es que trate de enfrentar a Shuichi... Y se cómo acabará todo...

—¿Antes de tú secuestro, como Shuichi te secuestro?—

—Shuichi y yo éramos amigos desde pequeños... El me había invitado a un bar, algo que me sorprendió. El no era de tomar... Acepte ya que pensé un poco “Tal vez este estresado” Acepte su propuesta y se lo dije. En la noche el vino a mi casa en su coche, yo salí de mi casa y me subí al carro. Platicamos un poco hasta que en un momento, casi llegando al bar dijo que se había olvidado de algo y que iríamos a su hogar... Ahí fue donde todo empezó. Apenas llegamos, él sonrío de una forma horrorosa algo que me dió miedo y pregunté el por qué de su sonrisa, el solo me agarró fuertemente de los brazos, me tapo la boca con su mano y así llegué aquí...—

Me di cuenta de varias cosas. El mismo se delato en frente de todos. El mismo dejo huellas. Fue a casa de Kaede Ella vive con sus padres, dudo bastante que Kaede trate de esconder tal cosa, sus padres saben que Shuichi es alguien que la va a cuidar ya que este siempre gana reputación en actividades...

Después los vecinos... ¿Cómo no me di cuenta?.. ellos delataron a Shuichi y los padres de Kaede contactaron a los míos en búsqueda de ella.

Alguien nos espera afuera, nos están buscando. Es nuestra salvación

Por primera vez... Sentí tanta adrenalina recorriendo mi cuerpo...

Era el fin de Shuichi.

Saldremos pronto de aquí Kaede... Lo prometo

𝑨𝒏𝒊𝒎𝒂𝒍 𝑪𝒂𝒏𝒏𝒊𝒃𝒂𝒍Donde viven las historias. Descúbrelo ahora