Outro

Día: IV

Outro

IV.First Date.

Max estaba soñando.

Era la única explicación que podía encontrar a toda esta situación tan bizarra.

De seguro se había golpeado la cabeza y lo que vive en este momento es un reflejo de su subconsciente, si debe de ser eso.

Era la única explicación que encontraba ya que no es posible que Jos Verstappen, su padre, este tan tranquilo después de contarle la historia que le ha sucedido en el último par de meses.

No podía cantar victoria, se había quedado sin palabras más de diez minutos y lo miraba fijo, lo extraño es que no gritara y manoteara por todo lo que pasaba; como la imprudencia de Daniel, el plan que tenían ambos para mantener las aguas tranquilas y que su hijo, el tesoro de su vida, estuviera embarazado.

Max jugaba con sus pulgares sobre su regazo, Checo estaba a su lado a una distancia prudente mirando fijamente a Jos por si se le ocurría hacer algo indebido.

Pero no hacía nada, solo había escuchado en silencio la historia y su semblante era una máscara fría de...

¿De qué era?

—Entiendo.

Max tragó con dificultad, ver a su padre tranquilo era mas aterrador que verlo gritar, al menos era algo que podía manejar, pero así era un completo enigma que le causaba conflicto.

Sergio no estaba mejor, estaba con los hombros tensos por si tenia que intervenir, conocía el carácter de Jos y el como trataba a Max, por eso no podía estar tranquilo desde que le avisaron que estaba en el hotel esperando verlos.

Jos se puso de pie mirando de reojo a Sergio. Ambos no se caían bien, se toleraban por Max, el equipo y la Formula 1, pero hasta ahí llegaba su relación.

Ahora que Sergio lo pensaba ¿como iba a poder cortejar a Max? Su intención era llevar este tipo de relación a una real aun con Jos de por medio.

—¿Podrías dejarme a solas con mi hijo, Sergio?

La forma en que lo dijo hizo sentir chiquito a Max, quería decirle que no, Checo podía quedarse con él ya que esto también lo involucraba, pero las palabras murieron cuando lo volteo a ver así que no pudo negarse, sea lo que sea que le iba a decir seria mas sencillo si estaban solos ¿no?

Eso quería creer Max.

Sergio notó su tensión, en ese tiempo había aprendido a leer su semblante, se había vuelto cuidadoso con Max y el cachorro, Max le medio sonrió pidiéndole en silencio que los dejara solos, Sergio le tomó la mano y la apretó despacio.

—Estaré en el pasillo por si ocupas algo.

Max asintió agradeciendo, Sergio para dejar mas en claro su compromiso con él le beso los nudillos y miró de forma retadora a Jos, advirtiéndole que estaría listo por si se le ocurría hacer algo, solo así salió de la habitación.

Jos se quedó un par de segundos callado y se sentó al lado de Max.

—¿Daniel es el padre?

Max asintió sin mirarlo, no tenía la fuerza para hacerlo.

—¿Te obligó?

—No, nunca...solo era... no había ningún compromiso, supongo que algo falló, siempre me cuidaba.

Jos suspiró sosteniéndose con sus brazos sobre sus rodillas.

—Me decepciona un poco que las cosas hayan tenido que ser así, estas en tu mejor momento y listo para el cuarto campeonato, pudiste obtenerlo, alcanzar a los mejores y ahora tienes que retrasarte porque decidiste jugar a la casita...