Cristina entra a la oficina apresurada
-Buenos días a todos- anuncia nada más entrar al edificio
Buenos días Cristina, Chiara Oliver te espera en tu oficina. Ha llegado bastante temprano y está algo nerviosa, toda tuya.- le explicaba su gerente
En cinco minutos estoy ahí, por favor avísale que no tardo- dijo Cristina sin pararse siquiera a mirarlo. Tras eso, fue directa a preparase un café para poder sopesar la mañana tras el mal despertar que tuvo.
*A la mañana*
-¡Ring!¡Ring!¡Ring!- sonaba el despertador repetidamente
-¡Mierda!- gritó Cris -¿Qué hora es?- preguntó desorientada
-Mmhm- fue lo único que pudo decir Violeta somnolienta.
-¡Joder, joder, joder! Voy tarde...- se levantó corriendo, dejó un beso en la frente de Violeta y salió corriendo tratando de tardar lo menos posible.
Cristina finalmente entra a la oficina y ve a chiara jugando con sus manos, demostrando el nerviosismo anteriormente mencionado.
-Buenos días, ¿Chiara verdad? ¿Qué tal estás?
-Buenos días, sí, algo nerviosa para que engañarte pero encantada de estar aquí. (¿Algo nerviosa? Si se acercara a mí sería capaz de notar mi corazón salir del pecho. Me dedico a la música desde que tengo uso de razón pero nunca ha sido de una manera profesional, lo más importante que he hecho, ha sido cantar en mi pueblo y en algún que otro restaurante, pero nunca algo tan grande como esto.)
-Genial, tranquila por los nervios, es el primer día no tienes de qué preocuparte... ¡Ay! que distraída... no me he presentado, soy Cristina Rodríguez.
-Te conozco perfectamente- soltó Chiara sin pensar sus palabras. Quizás eso sonó un poco intenso de su parte, por lo que se arrepintió al momento. -Disculpa...
-Jajaja perfecto, pues si ya nos conocemos manos a la obra.
Tras un rato tratando temas musicales, temas de contratos y haciendo alguna que otra prueba ya habían pasado varias horas.
-Bueno, ha sido un gusto conocerte y empezar a trabajar contigo, ¿Primeras impresiones?
-Estoy encantada. Muchísimas gracias por esta oportunidad.- dijo Chiara muy entusiasmada
-Si te parece bien nos vemos aquí mañana a las ocho y empezamos a concretar los primeros pasos.- sugirió Cristina
-Aquí estaré. Muchísimas gracias.
-A ti
Chiara salió de la oficina intentando ocultar una sonrisa que le llegaba de oreja a oreja, pero se le hacía imposible. Estaba cumpliendo uno de sus mayores sueños, y empezando por todo lo alto. Cristina le había parecido una mujer muy agradable, por lo cual todo iría sobre ruedas, o eso creía ella....
Al igual que Chiara, Cristina salió de la oficina para ir a casa. Una vez en el coche buscó el contacto de violeta en el teléfono y lo marcó.
*En la llamada*
-Menos mal te dignas a dar señales de vida- contestó violeta tras el teléfono sin dejar pronunciar palabra a su pareja.
-Discúlpame, llevo un día muy ajetreado, ¿Estás en casa?
-Sí, un dia muy ajetreado con el "gran talento"- Violeta sabía como sonaban esas palabras y le parecía lo mínimo que podia decir. -¿No me vas a contar nada? y sí, estoy en casa.
-Perfecto, voy en camino, ahora te cuento- respondió Cristina apresurada para dirigirse a casa. -Te quiero
-Y yo a ti.
*Fin llamada*
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Helou, un capítulo quizás un poco aburrido pero es necesario para que todo funcioneee
besoos <3
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¿Casualidad o causalidad?
FanficVioleta Hódar, una reportera para las noticias en una cadena no muy conocida. Cristina Rodríguez, su pareja, no para de hablar de un supuesto talento que va a llegar a su productora músical, Chiara Oliver. ¿Quién será esta supuesta chica?