¿Casualidad o causalidad?

Capítulo 12

-Te has pasado- dijo Chiara a Violeta tras volver

-¿El qué? ¿Con qué?- Chiara extendió su mano para que Violeta se levantara y la llevó a una habitación. Entró y tras cerrar la puerta dejó caer un poco su vestido.

-¿Ya?¿Otra vez? Chica no me dejas respirar... pero bueno- dijo Violeta acercándose a Chiara

-No...- Chiara se giró al instante dejando ver su espalda, la cual no tenía ni un solo rincón libre de los efectos de la exitación de Violeta, manifestada en arañazos.

-Ups

-Tenemos que hablar- soltó Chiara seria

-Intentaré no hacerlo más, pero es culpa tuya- contestó Violeta en un tono burlón

-No es eso, digo sobre nosotras, ¿Qué está pasando?

-Osea que sí puedo volver a hacerlo- Violeta la miró con una cara sugerente

-Violeta, te estoy hablando en serio, ¿Qué vas a hacer?

-Perdón, ya paro. Chiara yo quiero mucho a Cristina, ha sido mi vida desde hace mucho tiempo y tienes que entender que no es fácil para mi, pero contigo siento algo diferente. Sé que no he hecho las cosas bien, pero hablaré con ella, te lo prometo. Y entre tú y yo, no se que va a pasar, pero tendremos tiempo para pensar que hacer. Cambiando el tema, mañana deberíamos vernos porque necesito más videos para el reportaje. Ahora, vistete porque tu espalda es un cuadro y yo me voy a casa, ¡Ah! y por favor avisa a Denna cuando no esté ocupada con tu amiga de que me he ido- dijo Violeta para dejar un leve beso en los labios de Chiara y salir de la habitación. Violeta sabía que le hacía un favor a Denna en irse sin avisar, así tendría excusa para irse con Rus. Chiara se subió el vestido y fue en busca de las chicas.

-¿Y Denna?- preguntó Chiara a Ruslana al verla

-Está... en el baño...sí- respondió nerviosa

-Bueno, prefiero no preguntar- contestó Chiara sin querer saber que se tramaban. -Cuando puedas dile que Violeta se fue. Tengo otra cosa que decirte- dijo Chiara haciendo una pausa dramática.

-Vamos Chiara arranca- contestó Ruslana desesperada

-Volvió a pasar, con Violeta- dijo Chiara un poco avergonzada

-Lo sé, vi sus pechos- (¿Cómo que vió sus pechos? ¿Perdón?)

-¿Que tu qué?- preguntó en una mezcla de enfado y verguenza sabiendo que era lo que podría haber visto

-No pienses cosas raras, me acerqué a ver como estaba y su camiseta dejaba ver sus marcas- dijo Ruslana entre risas al ver lo avergonzada que estaba su amiga

-Bueno, por lo que sea, la cosa es que hablamos y lo va a dejar con Cristina, espero que ahora vaya todo mucho mejor

-Me alegro mucho por ti kiki, pero oye, le diste bien entonces ¿No?- preguntó Ruslana curiosa

-RUSLANA

Violeta llegó a su casa y se acostó en el sillón a dormir. Tras despertarse tenía clara cuál sería su conversación con Cristina, sabía que eso se tenía que acabar hoy. La buscó hasta que finalmente la vió entrando a la cocina

-Buenos días

-Buenos días Vivi, ¿Qué tal anoche?

-Muy bien la verdad- (Y tanto que fue bien...) -Oye, hay algo que quiero hablar contigo, me doy una ducha y vuelvo- Salió del salón y fue a ducharse. Su ducha volvía a ser agobiante, no sabía como iba a hablar con ella ni que debía decir. Al salir de la ducha se vistió, poniéndose un vaquero y un top blanco, junto a una americana negra, ya que tras la conversación tenía que verse con Chiara para seguir trabajando. Al salir del baño vió algo que en ninguno de los escenarios que se imaginó estaba contemplado. Cristina le había preparado algo precioso, un desayuno elaborado para ambas, en su mesa de café, que fue el primer mueble que compraron juntas, junto a unos cafés, decorado con un mantel rojo y fotos de ellas durante su relación.

-¿Qué?¿Por qué? No tengo palabras...-Violeta no sabía ni que decir ante eso

-¡Sorpresa! Sé que querías hablar conmigo pero ya lo tenía pensado hacer, espero que te guste. Además tengo otra cosa que enseñarte, que quizás prefieras antes del desayuno

-¿Hablamos primero?- dijo Violeta preocupada por lo que pudiera significar ese desayuno y supuesta sorpresa. Cristina no dijo palabra, sin embargo se quitó el albornoz, dejando ver su cuerpo desnudo, únicamente cubierto por un conjunto de ropa interior de encaje en color negro

-Cris...

-Sé que te gusta, sé que te gusto- se fue acercando poco a poco a Violeta. Al principio esta se mostró poco receptiva, pero su pareja la conocía perfectamente, después de alguna que otra caricia, algún intento de beso provocando en ella deseo, sabía sus puntos debiles y... (A la mierda) cayó.