•Flowers•

•17•

Algo no estaba bien con su hyung, Taehyung lo sabía perfectamente.

El mayor tenía tiempo actuando extraño y realmente nervioso cada vez que Jeon pasaba cerca de ellos a la hora del almuerzo, cuando Jimin y el se unían a los mayores para pasar un rato relajado antes de una nueva sesión de clases.

Después de la tarde en la feria, dónde los demás les abandonaron a su propia suerte, Jung y él habían tomado más apegó, no solo como "los mejores amigos de los novios", ahora jugaban, se hacían bromas e incluso Taehyung sentía la confianza de robar porciones del plato ajeno o de saltar a la espalda del mayor por sorpresa a forma de saludo.

Habían seguido conversando más sobre ellos mismos, lo que les gustaba y lo que no, conociéndose bastante bien, cosa por la cual sabía que el comportamiento del pelinegro no era normal cuando JungKook se encontraba vagando alrededor.

También había notado varias veces al rubio mirando en dirección de Hoseok, una mirada que no podía descifrar para nada, a decir verdad.

Luego estaba "J.H", aquel romántico chico de las cartas.

No había día en el que una nueva flor no se encontrara en su casillero acompañando una carta, amaba las anécdotas, los pensamientos, los poemas y las composiciones que el chico escribía para él, además de los significados tan bonitos que las flores tenían, todos relacionados al amor y la belleza.

Estaba confundido, y es que Jeon ya no movía nada en el luego de las crueles palabras dichas más de un mes atrás, incluso con su cara guapa y su cuerpo tonificado, pero en cambio "J.H" era lo contrario.

El desconocido le hacía palpitar con fuerza el corazón, hacia revolotear mariposas tanto en su estómago como a su alrededor y le hacía entregarle sin oposición un pedacito de su corazón, incluso sin conocer su cara o su nombre siquiera.

Por último... Hoseok.

El mayor era atractivo y simpático, siempre alegre y muy servicial, realmente un hombre de ensueño. Pero no podía evitar ponerse el mismo un límite en su pensar, el bailarín (por qué había descubierto qué lo era) solo podía ser un buen amigo, solo eso.

Incluso si Jimin se esforzaba arduamente en decirle que era más factible fijarse en el amigo de su novio que "en un total desconocido que escribe bonito", según la descripción exacta que el pelirrosa había usado.

Y quizá tenía razón, quizá si se esforzaba un poco, podría llamar la atención de Hoseok y tener una relación tan bonita como la de SeokJin y el peliplata, relación que el tanto admiraba.

Pero, como siempre, ese sentimiento de inferioridad y de ser mucho menos que insuficiente le impedían siquiera imaginar algo como aquello.

Tener un "algo" con Hoseok era simplemente imposible.

Sin embargo, eso no evitaba que el extraño comportamiento del pelinegro le afectará de cierta forma.

—Sigues distraído –Jimin sentenció, comiendo un gusano de goma.

Taehyung le miró, ciertamente había estado con la mirada perdida en un punto aburrido de la habitación.

—¿Que? No –se negó, viéndose decaído a pesar de su negativo, volviendo la mirada a la televisión justo para ver cómo Emily sonreía para Víctor.

SeokJin y Jimin compartieron una mirada preocupada, era evidente que el peliazul no se sentía del todo bien, algo lo estaba haciendo estar distraído y metido en sus pensamientos.

—TaeTae –le llamó SeokJin está vez, recibiendo la mirada del chico– encerio estás muy metido en tus pensamientos ¿Que pasa? –insistió.

El de tez canela pego un suspiro después de notar las miradas intensas de sus mayores, esperando por su respuesta.

—Esta pasando demasiado a la vez –Admitió– Hobi hyung está actuando extraño, J.H está haciendo que me vuelen maripositas en el estómago sin siquiera conocerlo y –el chico hizo una pausa, dirigiendo la mirada a sus propias manos, dónde una bolsa de gomitas de mora se encontraba a medio comer.

—¿Y? –le incitó el castaño a continuar, ganándose un nuevo suspiro de parte del menor en la habitación.

—Y JungKook me ha estado mandando mensajes últimamente –soltó, haciendo sorprender a los otros dos.

Un nuevo suspiro salió de sus labios y volvió la mirada a sus amigos, justo para ver el seño fruncido con molestia del pelirosa.

—¿Que carajos quiere después de lo que dijó? –cuestionó, apretando la mandíbula ante la confesión de su alma gemela.

—No lo sé, deje de leer sus mensajes cuándo comenzó a hablar mierda sobre el como... Cómo hago el ridículo "llendo y viniendo con florecitas y cartas" –soltó cada vez más bajo.

—Voy a hablar con Namjoon –sentenció el Kim mayor luego de segundos de silencio.

—No! –se negó Tae en rotundo– no necesito que me defiendan! –alegó– JungKook ya no causa nada... –confesó.

—Esta siendo molesto por un tema que no le incumbe! –Jimin encerio estaba enojado.

—Taehyung, Namjoon nos puede ayudar a ponerle un alto –la voz de SeokJin fue dulce y comprensiva– si tan solo lo habla con el consejo y el profesor Kyung –intentó explicar, pero las negaciones del menor le pusieron un alto.

—No hay agresión física, no influye en mis notas, tampoco hay un acercamiento en la escuela... No servirá de nada hacer algo como eso –tenia razón y los mayores lo sabían– solo es cuestión... De seguir ignorandolo –concluyó.

No había necesidad de hacer un gran escándalo, Jeon no era una amenaza de ningún tipo...

Aunque los sentimientos no se protegen con solo clickear la opción de "ignorar" en las notificaciones del móvil.

¿Verdad?.

:)

–MinPark.