-¿A qué te refieres?-le dije a Harry gritando por la música.
-Ven conmigo- dijo él en mi oído para que pueda escuchar.
Antes de reprocharle agarró mi muñeca y nos dirigimos a un costado de la pista.
- ¿Quieres un trago?-me ofreció-No. -le dije fríamente
-¿Que pasa nena? No estabas tan amargada cuando movías tu culo en la pista.
- ¿Acaso estuviste observándome?-le grite enojada, aunque dentro mío, muy dentro mío, eso me gustaba. "Por favor ¿qué estás pensando?"
-Tal vez-respondió con una media sonrisa.
Me di media vuelta y me dirigí a la pista a buscar a mi amiga. No iba a perder el tiempo con un idiota "Un idiota que esta muy bueno"
-Genial hasta mi mente me contradice- susurré para mi misma.
No entiendo que problema tiene conmigo, me conoce, por así decir, hace una semana, y ni siquiera hemos establecido una conversación normal.
Encontré a Cathy con la mirada. Se estaba devorando a un chico, que por lo que supongo es James. No iba a interrumpir su momento romántico.
Genial, ahora ¿Cómo volvería a casa?
Decidí esperar hasta que Cathy termine su sesión de besos con James.Me senté en el taburete de la barra y pedí otra cerveza. Así pasaron los minutos, que se convertían en horas, y las horas en cinco cervezas. Me iba acostumbrando al sabor.
Me sentía mareada pero con mucha
confianza. Perdí la cuenta de cuantas cervezas y chupitos, que un chico muy amable me ofreció, había tomado.A lo lejos divise al chico de rulos bailando con una morena tetona.
El tenía sus brazos en su culo y ella le estaba haciéndose un chupetón en el cuello. "Consíganse una habitación" pensé.Debería estar demasiado borracha como que para cuando un chico, muy atractivo a decir verdad, me pidió de bailar y yo acepté.
Empecé a moverme al ritmo de la música, con el chico rodeándome la cintura. Hasta que en un momento veo al rizado bailando con una chica, que para aclarar no es la misma que hace tiempo, esta vez es rubia. Pero que... ¿¡todas tienen las tetas gigantes!?
El me miro y empezó a besar a la chica rubia, todavía mirándome. No se porque, pero por impulso agarré la remera del chico que tenía enfrente y estampé mis labios contra los suyos. El chico acepto fácilmente, ya que me apretó más a su cuerpo.
Miré a Harry que seguía besando a la rubia. Sus ojos se posaron en los míos y frunció el seño.
Era una batalla, y no me refiero al beso, me refiero a una batalla..
Entre Harry y yo.(...)
Desperté al otro día con un dolor de cabeza terrible. Las ganas de vomitar me agarraron inmediatamente. Fui corriendo al baño y expulse todo lo que ingerí ayer.
Nunca me había emborrachado antes, y definitivamente no lo voy a volver a hacer. La sensación es placentera en el momento, pero luego las consecuencias son espantosas.
Cepille mis dientes y fui hacia la cocina, salude a ni madre que estaba leyendo el periódico:
-Hola má-le di un beso en la mejilla-Hola Kim-respondió fríamente mirando el periódico.
Nunca un saludo normal, nunca. No me pregunto ni dónde estuve ayer, ni porque vomité. No le importaba. Parece que yo no valía nada para ella.
Fui al baño a buscar un ibuprofeno para el dolor de cabeza.
Y mientras lo tomaba me preguntaba como habré llegado a casa ayer. Lo último que recuerdo es estar besando un chico en la fiesta.
Seguro que me trajo Cathy, es la única que conoce dónde queda mi casa.Subí a mi habitación y saque mi mochila para hacer los deberes. Era domingo y mañana tenía escuela.
Antes de empezar le mande un mensaje a Cathy agradeciéndole por traerme a casa ayer:"Gracias por traerme a casa ayer, eres la mejor :)"
Bloquee mi celular y saqué mis libros, un papel cayo de este. Cuando lo abrí me di cuenta que era la nota que me había dado Harry hace unos días antes de conocer a Cathy, nunca llegué a abrirla... Pero no me esperaba lo que decía:
"Nena no sabes lo que te espera el sábado en la fiesta"
Un momento... ¿El sábado en la fiesta? No me ocurrió nada malo allí. ¿Cómo sabía que iba a ir? Cathy me convenció a ultimo momento.
A los segundos me llega un mensaje de Cathy:"Cariño, yo no te lleve a tu casa ayer"
ESTÁS LEYENDO
Crawling Back To You [h.s.]
Fanfiction-Nunca descubriras mis secretos— dijo él acercándose cada vez más a mí. Su rostro estaba a centímetros del mío. -Déjame intentarlo— susurré. -No sabes dónde te estas metiendo— me dijo con su típica sonrisa que marcaba sus hoyuelos. -No le tengo mied...