SOS 7053 (Camren g!p)

《¹³》La curiosidad mató el gato

Capítulo 13: La curiosidad mató al gato

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Debido al día tan ocupado, los niños terminaron acostándose incluso más
temprano de lo habitual, dejando solas a Lauren y Camila. Camila intentó a toda costa alejar este hecho de su propia mente lo más posible, pero
siempre terminaba pensando en Laureny el inusual piu piu que tenía en el lugar donde debería haber habido algo más.

Todo el tiempo después del rápido vistazo que tuvo, no pudo evitar mirar
las partes inferiores de la mujer de ojos verdes, a pesar de que no había mucho que ver allí. La ropa que usaba siempre era muy holgada de cintura para abajo, por lo que nunca notó nada y no es como si fuera a mirar ese lugar en específico antes de saber que allí había algo diferente. Aun así, se sintió un poco tonta por no haberse dado cuenta antes, ni siquiera cuando Lauren estaba sumamente asustada por la broma que le gastó a Teresa.

- ¿Lauren?

- Sí. - Respondió la chica en voz baja, quitando la vista del televisor donde
estaban viendo un documental sobre las casas más bellas del mundo.

- ¿Cuándo pretendías decirme que tienes polla?. - Preguntó directamente,
no era de andarse con rodeos, sobre todo cuando tenía un nivel tan alto de
curiosidad.

Lauren jadeó con una expresión tan asustada que Camila temió que
estuviera sufriendo un derrame cerebral o algo así. Se levantó
rápidamente del sofá, respirando rápidamente, mirando a la ingeniera con los ojos muy abiertos, preguntándose si esto era algún tipo de pesadilla.

-¿C-Como?.. que?...que?

- Cuando llegué al baño para ayudarte, estaban tú y él, y para mi sorpresa él era parte de ti. - Señaló recordando el momento exacto en que vio la cosa, si no hubiera sido a mitad del día habría asegurado que estaba borracha, aunque ella no bebía a mitad del día, ya no. También había pasado la etapa de experimentar con drogas, pero se sentía como una especie de alucinación.

De todas las cosas que Lauren podía hacer para sorprenderla, esta fue, con
diferencia, la que funcionó más eficazmente en ese sentido. No todos los días a una mujer se le brinda un regalo asi.

- Bueno..yo..yo....- Lauren estaba nerviosa, extremadamente nerviosa,
nunca era bueno que alguien fuera de su círculo familiar se enterara de su
pequeña peculiaridad. No sabía exactamente qué esperar de Camila, pero ciertamente nada bueno iba a pasar.

Cuando estaba en la escuela, cuando aún intentaba encajar con otras
personas, pasó por un momento bochornoso muy similar a ese. Todas las chicas insistían en ir juntas al baño y los malditos baños de las escuelas
públicas nunca tuvieron cerraduras que realmente funcionaran.

Como uno más uno es dos, un día acabó descuidando la puerta y sus compañeras notaron que orinaba de pie. En medio de las especulaciones,
tuvo que confesar de qué se trataba y lo que obtuvo a cambio fue una acusación de que en realidad era un niño, no es que tuviera unos pechos muy grandes en ese momento eso demostraba algo.

El rumor se extendió por toda la escuela y la chica terminó en la oficina del director, básicamente siendo castigada por haber nacido como era.

Obviamente su madre casi derriba a toda la escuela cuando se enteró de
todo lo sucedido. Lauren fue transferida y nunca más se sintió segura contándole a la gente sobre su condición o incluso acercándose
demasiado.

Si la mayoría de las personas no estaban preparadas para lidiar con
orientaciones sexuales diferentes a la suya, cuánto más lo estarían para lidiar con el hecho de tener características físicas de dos sexos diferentes, incluso si solo se identificaran como mujer.