《¹⁷》Prepararse

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Capitulo 17: Prepararse.

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Camila Cabello 18 de Junio de 1820- Londres (mas especificamente DROGADA)

Muy bien querido lector, en las próximas páginas te darás cuenta que debido a mi estado, pocas cosas recuerdo claramente de aquella noche, todo lo que esta aquí registrado fue ensamblado a partir de lo que me dijeron y los pequeños destellos de memoria que me quedan de la divisor de agua en mi vida.

- Oh, cariño, ¿te sientes bien?. - Preguntó Lady Devonshire, con tono
preocupado, manteniéndome de pie mientras me perdia en la laguna de mis
ensoñaciones.

- No seas la Dama Satán egipcia, ¿qué me diste?. - Pregunté con la lengua
enredada, mientras intentaba estabilizar mis rodillas.

Mi mente estaba más allá de cualquier miedo que pudiera haber tenido de esa mujer, solo senti que mi cerebro daba vueltas y vueltas.

Lady Devonshire cerró sus ojos en mi dirección y me di cuenta que esta era la
oportunidad perfecta para que ella me matara, a pesar de mi nariz respingona, reconocí que era una mujer pequeña y frágil, lo único que tenía que hacer era golpear mi cabeza contra la pared un poco más fuerte de lo que sería Camilita con Dios, pero, para mi sorpresa, lo único que hizo la
señora mayor fue reir a carcajadas.

- Estarás perfecta, querida. - Murmuró con tono orgulloso, sosteniéndome.

Intentaba preguntarle de qué estaba hablando, pero empezaba a resultar
muy difícil mantener líneas de razonamiento muy complejas.

Sentí una sonrisa idiota y sin sentido formarse en mi cara y de repente Lady Devonshire y yo estábamos sonriendo juntas mientras la abrazaba.

- Mami, ¿qué le hiciste?. - Escuché una voz lejana, pero tal vez no fue tan lejana, considerando que de repente Lord Morgado estaba justo frente a nosotras.

- No hice nada, parecía tener sed y le ofrecí algo de beber. - Respondió Lady
Devonshire encogiéndose de hombros, mientras yo asentía con la cabeza. - Toma, abrázala, buscaré ayuda, es imposible para ella regrese al a baile en estas condiciones.

Me encontré casi arrojada a los brazos del marqués, quien parecía extremadamente asustado por este arreglo, pero no pudo hacer nada antes
de que su madre se escapara, dejándonos solos en ese jardín poco
iluminado.

- O000Oi Marqués. - Dije felizmente abrazándolo, como era muy alto
necesitaba ponerme de puntillas para llegar a su cuello.- ¿Qué haces aquí?
Me estaba divirtiendo con tu madre, pero supongo que desapareció, ¿sabes
qué le pasó?

- Jesús, estás peor de lo que podría haber pensado. - Murmuró preocupado,
mientras me llevaba hacia una pequeña pared llena de plantas, donde podía apoyarme. - ¿Sientes algún dolor?. - Le fruncí el ceño, ladeando la cabeza como un cachorro confundido.

Sus palabras se perdieron rápidamente, ya que verlo tan de cerca realmente me
hizo perder la capacidad de pensar en cualquier otra cosa que no fuera su
rostro perfecto.

Era tan delicadamente hermoso.

- Tu nariz es más femenina que la mía y por femenina quiero decir que es más
bonita, todo en la mujer es más bonito.

Los ojos de Lord Morgado se abrieron un poco, parecía casi tan confundido
como yo, que estaba drogada.

- No te pasa nada en la nariz, Camila. - Rápidamente estuve en desacuerdo con sus palabras, sacudiendo la cabeza, tapándome la nariz con las yemas de
los dedos en un análisis minucioso. - Creo que es un poco raro, un poco
torcido, no.

SOS 7053 (Camren g!p)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora