-Que gusto estar en casa, a sido un día horrible.- Le comenté a mi acompañante.
-Qué pasó? Querido pelirrojo.
-Tachi te he dicho muchísimas veces que no me llames con apodos-Dije mientras le miraba con una mala expresión.
Tachihara y yo comenzamos a salir, yo no pensé que le interesase de ese modo, pero un día Koyo me propuso ir a una cita a ciegas y cuando llegué al restaurante acordado me lo encontré en la mesa, al principio creí que era una broma o algo así, pero con una cara muy seria me dijo que le interesaba de forma romántica, al principio no le tomé en serio, pero con el paso de las semanas y de las citas descubrí que teníamos mucho en común y que me hacía reír y olvidarme de todo lo que me hacía daño. Al segundo mes de quedar en citas, me pidió que saliésemos de forma formal, como pareja, y yo acepté, realmente le tengo mucho aprecio y creo que es una pareja genial, nunca me hace llorar, ni pensar que quiere a otro persona, me hace sentir bien la verdad, y eso es lo único que necesito en este momento de mi vida.
-Y nunca entenderé por qué, es un apodo precioso, no tan perfecto como tú, pero lo más cercano posible- Mientras decía eso me abrazaba por la espalda.
-Jaja, muy gracioso, pero no me gusta que me apoden de ninguna forma, podría aceptar que me llamases Chu, pero única y exclusivamente porque eres tú- Me giré y le abracé por los hombros.
-Podría aceptarlo-Dijo mientras sonreía y se acercaba a mí.
-Podrías?- Le devolví la sonrisa mientras cerraba los ojos y esperaba a que acabase con la distancia entre nosotros.
Justo antes de darnos el beso escuché un ruido en la piso de arriba de mi apartamento y abrí los ojos dando un paso hacia atrás.
-Pasó algo?
-No, solo creí escuchar algo, debe ser el sueño.
-Quieres que vaya a ver?- Me dijo con una sonrisa ladina.
-Creo que podré yo si es un ladrón- Le devolví la mueca y le di un pico- Ahora ve a tu casa, que también te estás muriendo de sueño.
-Okey, si pasa algo llámame, sabes que estaré aquí en cinco segundos.
-Lo sé, y esa es una de las razones por las que te quiero, ten cuidado.
- Lo tendré, descansa- Y desapareció de mi vista mientras cerraba la puerta de mi casa.
Y era cierto, un de las cosas que me gustó de él y me ayudó a tomar la decisión de empezar a salir formalmente o no fue saber que siempre estaría ahí para mí, saber que no importase en que momento o que pasara, él siempre vendría.
Empecé a subir las escaleras para llegar a mi cuarto y en medio de estas vi una figura al final.
-Tachihara?
-Dazai?
Qué coño hace Dazai en mi apartamento? Y peor aún porqué tiene una de las cartas que le escribí en la mano derecha.
-En serio estás saliendo con Tachihara?- No me puedo creer que me esté preguntando eso y menos aún con ese tono de acusación.
-Y eso a ti qué más te da?- Dije mientras cruzaba mis brazos buscando una posición defensiva- La pregunta aquí es por qué estás en mi apartamento y hace cuánto estas aquí?
- yo pregunté primero, tú respondes primero, esas son las normas y lo sabes- Me dijo mientras sonreía.
Siempre tuvo esa tonta norma y hasta ese momento siempre la había cumplido, aceptándola como uno de sus múltiples juegos, pero ahora no estoy para ellos.
-Largo.
Se le borró la sonrisa de la cara, mejor.
-Vale, vale, solo quería hablar contigo.
Suspiré, pues sabía que no me iba a dejar en paz hasta que hablásemos.
-Habla, pero no prometo responder.
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Holaaa, soy la escritora, lamento haber tardado tanto en publicar este capitulo, pero por cosas personales y del bachiller me es imposible a veces escribir, espero que os gustase el capitulo
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Hola, Dazai - Soukoku
FanfictionCartas que escribió Chuuya y que Dazai nunca debió haber leído. Holaaa, la verdad es que esta es la primera historia que escribo, por favor si veis algún error decídmelo para poder arreglarlo, muchas gracias.