05. Lark after Dark

597 28 0
                                    

Al entrar al salon de clases Sidney vio a un chico con una chamarra de cuero negra sentado en el pupitre dónde ella se sienta siempre, pero nunca lo compartía con nadie debido a que la mayoría de los demas estudiantes prefieren evitar los lugares delanteros por alguna razón.

Al llegar se dio cuenta de quien se trataba.

- Isaac?

El chico la volteo a ver con una media sonrisa.

- Ey Smoothie, espero que no te importe compartir este lugar, eh decidido que a partir de hoy quiero poner mas atención a las clases.

- Esta bien, solo no me causes problemas -dijo tomando asiento junto al chico.

La clase comenzo, Isaac no paraba de hacerle preguntas a Sidney sobre cualquier cosa, algunas de sus preguntas ni siquiera tenían que ver con la clase. Desde luego esté hablaba en susurros tapando disimuladamente su boca con una de sus manos para evitar ser regañado.

- ¡Podrías callarte! -grito Sidney arta al no poder escuchar lo que decía la profesora, Isaac la estaba distrayendo demasiado consiguiendo que no lograra prestar atención ni entender nada de la clase, esto provoco llamar la atención de todos incluyendo la de la profesora.

- Señorita Santana, que significa todo ese alboroto? -dijo la maestra enojada ya que creyó que el comentario iba para ella- quedará castigada esta tarde por interrumpir mi clase, talvez así cambie su mal comportamiento.

- Pero... No ha sido culpa mía.

- No quiero oír excusas, continúe en silencio por favor si no quiere tener otro día de castigo.

Sidney se puso colorada del enojo y de vergüenza, Isaac trataba de decirle algo pero ella no le prestaba atención.

Al terminar la clase Isaac volteó directo a Sidney para decir algo pero antes de que las palabras salieran por su boca, ella salio lo más rápido que pudo de ahí, no quería volver a dirigirle la palabra a Isaac, por su culpa la habían castigado, era totalmente injusto.

- Enserio Kiley estoy segura de que lo hizo a propósito -dijo azotando su casillero.

- Talvez enserio no entendía la clase -dijo encogiéndose de hombros- oye espera un momento... Te han castigado y eso hará que te retrases con tus trabajos ¿no podrás ayudarme mañana en el Lark?

- oh no, no te preocupes Kiles, el castigo no durará mucho, hare todos mis trabajos para poder estar libre y ayudarte en el Lark te lo prometo.

- Gracias, por que estoy segura de que irá demasiada gente.

En clase de gimnasia, dónde la madre de Erin es entrenadora:

Terminando de correr...

- Buen trabajo Jackie, acabas de convertirte en capitana.

- No, yo soy la capitana del equipo. -Dijo Erin con una expresión en su rostro de indignación.

- Y cuando superes la marca de Jackie volverás a serlo ¡Sidney otra vez fuiste la última en llegar!

- Lo siento ¡Lo intento! sabe que correr no es lo mío. -dijo dejándose caer al césped.

- Pero solo me gano por un segundo -siguió hablando Erin.

- Talvez dar 5 vueltas mas te hagan bien.

- ¡Eso no es justo! -grito Erin molesta.

- Que te parece si mejor das 10 vueltas, aver si cambias tu actitud.

- No puedes...

- Una palabra mas y te castigare -la interrumpió.

- Puedes parar, estamos en la escuela -dijo Erin con un tono mas calmado.

Sucesos Inesperados // Isaac García Donde viven las historias. Descúbrelo ahora